El juicio se suspendió en febrero de 2013 porque los CD's con las
 escuchas telefónicas obtenidas por la Guardia Civil no habrían sido 
remitidos a las partes. La nueva vista oral se reanudará el próximo 
viernes, 27 de marzo, a las 10.00 horas, en la sección segunda de la 
Audiencia Provincial.
Martínez Andreo renunció a ser candidato del
 PP a la Alcaldía en las últimas elecciones municipales y permaneció en 
prisión dos meses desde que fuera detenido a finales de noviembre de 
2007 por su imputación en dicho caso.
En principio, estaba 
previsto la celebración del juicio durante dos semanas, pero el tribunal
 decidió suspenderlo en 2013 a petición tanto del fiscal, José Luis Díaz
 Manzanera, como de los letrados de la defensa, que coincidieron en 
entender que no cabe la continuación del juicio en estas circunstancias.
Para
 el fiscal, los hechos son constitutivos de un delito de falsedad, 
fraude, infidelidad en la custodia de documentos y omisión de perseguir 
delitos en relación a las obras del colegio San José de Totana y por el 
que pide para Martínez Andreo un total de diez años de prisión.
Para
 el empresario Pedro José Martínez, que ostentaba la representación 
legal de la empresa 'Ucom 2005 S.L.', que firmaría con el Ayuntamiento 
un convenio urbanístico para la construcción de infraestructuras 
municipales, haciéndose cargo los promotores del pago del coste de las 
mismas, entre las que se decide incluir las obras de un colegio, pide 
cuatro años de cárcel por los presuntos delitos de fraude y falsedad, al
 igual que para la exsecretaria municipal del Consistorio, Laura 
Bastida, a la que solo se le imputa falsedad.
Así como dos años 
para el gerente de Ucom, José Bonmatí; y el empresario Pedro Sánchez, 
que fue quien firmó un primer precontrato en noviembre de 2002 con 
Proinvitosa, ya que tenía interés en instalar un centro logístico del 
transporte", ambos por el presunto delito de fraude; y el entonces 
oficial de la Policía Local, Alfonso Canales, por infidelidad en la 
custodia de documentos y omisión de perseguir delitos cuatro años.
El
 caso Totem saltó a la luz pública en noviembre de 2007 cuando la 
Guardia Civil destapó una trama de pago de comisiones millonarias a 
cambio de licencias municipales para construir en Totana lo que sería el
 mayor complejo residencial del municipio.
En este caso, el que 
fuera también alcalde de Totana, Juan Morales, precedesor de Martínez 
Andreo, se convirtió en el primer ex regidor de la Región de Murcia que,
 con sentencia firme condenatoria, iba a la cárcel por las actuaciones 
urbanísticas corruptas realizadas durante su mandado en Totana y de las 
que pudo lucrarse.
Según el escrito de 
acusación del fiscal, antes del verano del año 2006 se decidió en el 
Consistorio la realización de obras en diferentes colegios públicos, 
entre los que se encontraba la construcción de dos aulas en el centro 
'San José'.
Para ello, era preceptiva la incoación del expediente 
de contratación pública. El entonces concejal de Obras e 
Infraestructuras, José Martínez Andreo, contactó con el empresario Pedro
 José Martínez, que ostentaba la representación legal de la empresa 
'Ucom 2005 S.L.', que firmaría con el Ayuntamiento un convenio 
urbanístico para la construcción de infraestructuras municipales, 
haciéndose cargo los promotores del pago del coste de las mismas, entre 
las que se decide incluir las obras de un colegio.
En este acuerdo
 se fijó en su redacción que los promotores propietarios de los terrenos
 tenían que abonar al Ayuntamiento la cantidad de 6,1 millones de euros,
 que se destinará a la construcción de infraestructuras municipales, 
entre las que se decide incluir por el concejal acusado las obras del 
colegio 'San José'.
El fiscal explica que Martínez Andreo "era 
conocedor de que existía ya un presupuesto de la citada obra que 
ascendía a la cantidad de 109.327 euros", y le adjudicó la misma a la 
mencionada empresa, considerándola incluida en las obras a realizar 
dentro del convenio urbanístico que aún "ni siquiera se había firmado".
Durante
 el curso de las obras, el fiscal recuerda que el partido político 
municipal en la oposición denunció públicamente la posible adjudicación 
irregular. Por ello, los acusados Martínez Andreo y Martínez Ruiz 
"comprueban que, efectivamente, podrían haber incurrido en alguna 
ilegalidad en la adjudicación de la obra y se conciertan para tratar de 
ocultar la irregular adjudicación".
En concreto, el fiscal cree 
que los acusados, con el fin de tratar de desligar las obras del colegio
 con el convenio urbanístico firmado, consiguen que se modifique el 
contenido del apartado en el que se decía "a su vez los promotores 
asumían la realización y/ o pago del coste de las infraestructuras", 
eliminando la expresión "la realización y/o" por la expresión "pago".
En
 segundo lugar, el fiscal atribuye a los acusados que se "inventaron" la
 "burda tesis de que tales obras se iban a realizar de forma gratuita 
por la empresa adjudicataria", cuando existía ya partida presupuestaria.
El
 Fiscal sostiene que los acusados, tras comprobar que el asunto se había
 judicializado, procedieron en agosto de 2007, de común acuerdo con la 
secretaria municipal, a redactar un documento al que denominaron 
"convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Totana y Ucom para la
 realización de unas obras de ampliación del colegio San José".
Entre
 los firmantes se encontraba Martínez Andreo que, aunque ya no era 
alcalde, lo firmó en la condición que ya no tenía de concejal de obras e
 infraestructuras públicas, facultad de la que en cualquier caso carecía
 cuando era concejal, al no tener delegada tal competencia por el 
anterior alcalde".
Asimismo, entre los firmantes estaba Martínez 
Ruiz y la secretaria municipal, que fue quien asesoró en su redacción, 
plasmando en el mismo la tesis de la "gratuidad" de las obras, 
"inventándose que el objeto del mismo era regular la donación gratuita 
de la mercantil Ucom al Ayuntamiento para la realización de las obras de
 dos aulas en el colegio San José"..
Así, "asumiendo la empresa el
 total importe, firmándolo en un primer momento el día 13 de agosto de 
2007, poniéndole fecha 16 de abril de 2007". No obstante, al percatarse 
José Martínez Ruiz de la fecha que habían puesto, "rompieron las tres 
copias realizadas y redactaron y firmaron al día siguiente otras tres 
modificando la fecha y poniéndole 16 de abril de 2006".
Todo, 
según el fiscal, con la finalidad de dar apariencia de que ese supuesto 
acuerdo de gratuidad de las obras "había sido de fecha muy anterior, 
incluso, al comienzo de las mismas, y de esta forma engañar al juzgado 
con el fin de que se archivase la denuncia por la adjudicación previa de
 las obras sin expediente de contratación".
En segundo lugar, el 
fiscal explica que Pedro Sánchez se concertó con Pedro José Martínez 
Ruiz y, "con un fin claramente especulativo, firmaron el 18 de enero un 
contrato privado de venta del primero al segundo de una parcela", pese a
 que eran conocedores de la existencia de una cláusula del derecho de la
 empresa municipal Proinvitosa a recuperar la parcela al precio original
 de venta.
Martínez Andreo, en su condición de concejal del 
ayuntamiento, "era perfectamente conocedor desde el principio de la 
maniobra", según el fiscal.