GRANADA.- Un equipo de expertos del Instituto Andaluz de Geofísica se ha  desplazado hasta la localidad murciana de Lorca para evaluar los daños  provocados por el terremoto en las edificaciones, en cuya construcción  "puede que no se haya tenido en cuenta" el efecto de resonancia de los  seísmos y esto "ha podido provocar daños adicionales".
   El director del Instituto Andaluz  de Geofísica (IAG), Jesús Ibáñez, ha explicado que la parte baja de  Lorca se encuentra sobre una zona de relleno hecha de grava y arena. En  estos casos suele ocurrir que la onda sísmica se amplifica y entra en un  proceso de resonancia bajo el terreno "y de ahí los daños". "A la hora  de construir hay que tener en cuenta este efecto y han podido no  hacerlo", añade. 
   Pese a todo, Ibáñez asegura que "es muy pronto" para sacar  conclusiones sobre este movimiento sísmico, aunque el equipo de expertos  de IAG lleva toda la jornada del jueves tomando datos y cuantificando  el grado de afección de las edificaciones para poder "introducir  modificaciones que permitan resolverlo en un futuro".
   En principio, el IAG se ha desplazado a la zona movido por un  interés científico y las conclusiones de sus trabajos quedarán a  disposición de las administraciones competentes por si estuvieran  interesadas en conocerlas y aplicar soluciones. 
   Preguntado por la posibilidad de que se produzcan nuevas réplicas  en las próximas horas, Ibáñez ha preferido no aventurarse porque "no  podemos saberlo con seguridad".
    Según ha precisado, la réplica "no es más que el mecanismo que  tiene el terremoto de perder energía", por lo que todo dependerá de la  capacidad del sistema tectónico que hay debajo de Lorca para  desprenderse de esta energía.
Un 40% de los edificios están afectados
El Gobierno murciano dice que, de momento, sólo unos 92 edificios están afectados por el terremoto. El 44% de los 524 edificios no tendrían daños estructurales mientras que el 17% de ellos sí, prohibiéndose el paso a los mismos.
El consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, José  Ballesta, ha asegurado que son ya 542 las edificaciones evaluados, "lo  que supone aproximadamente el 40 por ciento de los edificios que hay en  Lorca". De ellos, explicó el consejero del ramo en rueda de prensa, el  44 por ciento estaría en código verde, es decir que estos edificios no  tienen daños estructurales. 
   El 38 por ciento en nivel amarillo, lo que significa que son  edificios que no tienen problemas estructurales, pero que tienen algún  tipo de peligrosidad y que con tratamiento pasarían al nivel verde;  mientras que el 17 por ciento --unos 92 edificios-- está código rojo,  tiene problemas y se prohíbe su paso, "lo que no significa que haya que  derribarlos".
   Así lo ha señalado el consejero tras una primera evaluación de los  edificios del municipio, que se ha dividido en 26 áreas, cada una de  ellas visitadas por cinco profesionales --el 70% voluntarios--,  movilizado a unas 200 personas, señaló, "que se van renovando". 
   De momento hay 19 áreas estudiadas, indicó Ballesta, "los equipos  trabajan de manera continúa" y en unas horas o en los próximos días se  podrá conocer más. Al tiempo que apuntó que todos los servicios de luz,  agua y teléfono están restablecidos. 
    Así como que se han revisado todos los edificios de viviendas sociales y que las tres áreas están en código amarillo.
 
