GRANADA.- Los trabajadores de CajaGranada tienen previsto celebrar una asamblea este sábado en la capital granadina para decidir nuevas estrategias y nuevas movilizaciones en contra de la propuesta para la segunda reestructuración laboral, que contemplan la extinción de 530 contratos --nuevo recorte  que se suma a los 120 del ERE en vigor hasta las 650 extinciones--, el  cierre de 120 oficinas, una reducción salarial del cinco por ciento  durante dos años, y la suspensión rotatoria durante dos años de 800  contratos durante tres meses cada uno, entre otras medidas.
   Fuentes sindicales han indicado que entre esas  movilizaciones y nuevas acciones que llevarán a cabo "no se descarta  ninguna medida, e incluso la más extrema de convocar una huelga general  en el seno de la entidad".
   Las fuentes han explicado que el pasado miércoles se han  concentrado los trabajadores de BMN en Murcia y en Palma de Mallorca,  que han efectuado paros de diez minutos en contra de dicha propuesta, en  unas acciones que han tenido una "respuesta masiva" por parte de los  empleados, según las fuentes.
   Asimismo, las fuentes precisan que este próximo sábado se  celebrará una asamblea en Granada a la que acudirán los 2.000  trabajadores de CajaGranada y donde éstos "tomarán decisiones y  aportarán ideas y nuevas estrategias de movilización, sin descartar la  huelga", con nuevas acciones en contra de la propuesta planteada por la  dirección de la entidad.
   "Aunque la negociación sigue abierta, no vamos a negociar nada   que suponga despidos de la plantilla, y menos de carácter forzoso", han  agregado las fuentes, que destacan la importancia de la asamblea del  sábado, donde "los trabajadores de CajaGranada adoptarán una posición  ante este conflicto".
   El grupo BMN (Banco Mare Nostrum), formado por CajaGranada,  Cajamurcia, Caixa Penedés y Sa Nostra, ha planteado a las centrales  sindicales su propuesta para la segunda reestructuración laboral  necesaria para cumplir los requisitos apuntados por el Gobierno, que  contemplan la extinción de 530 contratos --nuevo recorte que se suma a  los 120 del ERE en vigor hasta las 650 extinciones--, el cierre de 120  oficinas, una reducción salarial del cinco por ciento durante dos años, y  la suspensión rotatoria durante dos años de 800 contratos durante tres  meses cada uno, entre otras medidas.
   Según la propuesta planteada por la dirección de BMN en la reunión  mantenida con los sindicatos, este plan de  reestructuración tiene por finalidad "adecuar el volumen de plantilla a  las necesidades reales de BMN, adecuar los costes de personal a las  posibilidades reales del banco, teniendo en cuenta la coyuntura  económica en la que nos encontramos y armonizar las condiciones  laborales, conforme a los compromisos adquiridos por ambas partes en el  pacto laboral de 2010 y en el protocolo de intenciones de 2011". 
   Esta negociación "deberá estar cerrada antes del 31 de marzo".    
   El plan de reestructuración contiene una serie de medidas de  carácter "coyuntural" para "dar respuesta a la necesidad de liberar  recursos económicos hasta que se devuelvan las ayudas públicas", y otras  con un carácter "permanente o estructural", para "alcanzar los datos de  eficiencia y eficacia necesarios para operar en el mercado e igualdad  de condiciones que el resto de entidades bancarias".
 
