LAS PALMAS.- Los eurodiputados del PP Gabriel Mato, Esther Herranz y Pablo Zalba  criticaron que la Comisión Europea siga ignorando las advertencias de la  Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) sobre las  irregularidades por impago que protagoniza Marruecos con la importación  de tomate.
  
Lamentaron que la Comisión de Comercio Internacional  del Parlamento Europeo, celebrada ayer en Bruselas, se conociera el  nuevo acuerdo de Asociación entre Marruecos y la UE, sin que se haya  adoptado ninguna medida para prevenir esos incumplimientos.
A  través de un comunicado el PP ha insistido en que la OLAF ha hecho  públicos los problemas e irregularidades que se registran en las  importaciones de tomates marroquíes, al mismo tiempo que pone sobre la  mesa que se ha evitado el pago de derechos adicionales exigibles y ha  recomendado la reforma del reglamento vigente.
Para Mato, Herranz y  Zalba es necesario que se solucionen los problemas detectados en el  acuerdo que está aún en vigor, teniendo en cuenta que hasta ahora no han  sido corregidos y que la nueva propuesta que se debate tampoco los  subsana.
El PP apuesta por los acuerdos internacionales de la UE  con países terceros y mucho más con los de su entorno, como es el caso  de Marruecos, pero los eurodiputados insistieron en que es necesario que  dichos acuerdos sean "justos, ecuánimes y que cumplan unas mínimas  garantías", y que defiendan los intereses de los ciudadanos europeos  consumidores, productores y contribuyentes.
Por Gabriel Mato  resulta "inaceptable" que se firme un nuevo acuerdo aún más favorable  para Marruecos cuando el vigente se incumple de forma reiterada tanto en  precios de referencia como en contingentes.
Al respecto, recordó  que en diciembre de 2010 entraron en la UE más de 80.000 toneladas de  tomate marroquí cuando el cupo fijado se situaba sólo en 31.000.
Ante  esta situación, critica que, en la reunión de ayer, el presidente de la  Comisión de Comercio Internacional, el socialista portugués Vital  Moreira, no cediese el turno de palabra a todos los eurodiputados que lo  habían solicitado, como es el caso de los miembros de la Comisión de  Agricultura y Desarrollo Rural.
Mato precisó que la Comisión de  Comercio Internacional debería tener en cuenta el posicionamiento de la  Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural, que ha expresado su "rotunda  negativa" a un acuerdo que, tal y como se plantea, perjudica seriamente  a los intereses del sector hortofrutícola de Canarias, Andalucía,  Murcia y de otras regiones europeas.
Asimismo, alertó que la  Comisión Europea no ha realizado ningún informe previo de evaluación del  nuevo acuerdo, en el que, añadió, quedaría patente los perjuicios que  conlleva para el campo español, que podría desembocar en un abandono de  las producciones y un aumento del desempleo "en un momento especialmente  difícil".
Por su parte, Pablo Zalba apuntó que el contexto actual  es muy diferente al del año 2009, cuando se negoció el vigente Acuerdo  de Asociación entre Marruecos y la UE, y explicó que la situación de  Europa y de España es "mucho más dramática", especialmente en el sector  agrícola, al mismo tiempo que la situación de Marruecos ha cambiado en  muchos aspectos.
Zalba dijo que el PP no está en contra del  acuerdo comercial, pero que en él es necesario "potenciar un comercio  equilibrado que garantice el desarrollo de ambas partes, Europa y  Marruecos".
Para ello apostó por "acuerdos recíprocos, que  garanticen el cumplimiento de unos mínimos estándares sociales,  medioambientales y fitosanitarios" porque hay que garantizar la  seguridad alimentaria en Europa.