Zoido
 ha comparecido en el Congreso, a petición de PSOE y Unidos Podemos, 
para informar sobre este suceso, y ha relatado de forma cronológica los 
hechos que se registraron en el informe policial sobre el caso de este 
joven que fue hallado muerto en su celda el 29 de diciembre.
 El
 documento policial que Zoido ha leído ante los diputados señala que 
Bouderbala fue trasladado a un módulo, junto con otros 11 internos, al 
ser considerado uno de los responsables de un motín. 
Sin embargo, no se 
precisa por qué no recibió atención de los responsables del centro, ni a
 la hora de la cena ni durante la noche, ya que según el auto judicial, 
el joven no salió de su celda desde las tres de la tarde, hasta que fue 
hallado muerto a la mañana siguiente.
 Zoido
 ha señalado durante su intervención que los internos no cuentan con 
vigilancia en las habitaciones, tal y como ocurre en el resto de CIEs y 
ha apuntado que se acude en ayuda del inmigrante en el caso de que sea 
solicitada por él mismo a través de una llamada. 
Es decir, que mientras 
el interno está en su habitación, sólo cuenta con las cámaras de 
vigilancia instaladas en los pasillos del centro.
Son
 esas mismas cámaras las que recogieron que nadie se acercó a la celda 
de Bouderbala durante las 15 horas que transcurrieron desde que fue 
trasladado a su habitación y cuando fue descubierto su cuerpo a la 
mañana siguiente, y las mismas imágenes por las que el juez decidió el 
archivo provisional de la causa abierta por este suceso, al considerar 
probado que no hubo testigos ni implicados en la muerte del inmigrante.
 "Se
 constató que desde el ingreso del interno no se abrió la puerta de la 
habitación, ni entró nadie en la misma", ha declarado el ministro, para 
añadir que tampoco se gravó "movimiento" en el módulo. "Se descarta la 
participación de otras personas más allá de su decisión personal de poner 
fin a su vida", señala el auto del juez, que ha leído Zoido ante los 
diputados.
Niega lesiones previas a su muerte
El
 ministro ha compartido en su intervención este informe y también el del
 forense que especifica que el cuerpo presentaba "sólo lesiones 
autoinfringidas, sin lesiones de violencia externa". 
Zoido respondía así
 a las informaciones que señalaban que el fallecido se había 
autolesionado anteriormente y que había sido víctima de la violencia de 
los miembros de la Unidad de Intervención Policial (UIP) asignados para 
garantizar la seguridad del centro.
 "Esto
 es lo que sucedió, aunque se haya querido insinuar otras cosas, con 
acusaciones graves", ha declarado el titular del Interior, en referencia
 a las críticas realizadas por parte de la oposición durante su turno de
 intervención en la sesión.
 Algunas
 de esas críticas han llegado a través de la portavoz adjunta de Unidos 
Podemos en la Cámara Baja, Ione Belarra, que ha cuestionado al titular 
de Interior sobre su relato de los hechos, asegurando que hay constancia
 de las autolesiones de Bouderbala o que en el centro faltaban 
servicios, como agua potable o calefacción, al contrario de lo que ha 
narrado Zoido.
 Circunstancias excepcionales
Ante
 estas acusaciones, el ministro ha invitado a Belarra a presentar las 
pruebas que tenga de estas denuncias ante los juzgados y ha señalado que
 él sólo tiene la información facilitada por la policía, el forense y el 
juez, y que "no tiene por qué dudar" de su profesionalidad.
 "No
 intento disfrazar la situación", ha asegurado tres la intervención del 
portavoz de Interior de Ciudadanos, Miguel Gutiérrez, que ha criticado 
su gestión en materia de inmigración y cuestionado la decisión de usar 
una cárcel como centro de internamiento de extranjeros. "Fueron 
circunstancias excepcionales", ha señalado.
 Así
 lo ha asegurado durante gran parte de su intervención, en la que negó 
que esta medida fuera ilegal, ya que, según ha indicado, tanto la ley 
española como la europea permite utilizar otros centros como CIE, en 
situaciones como la vivida a finales de noviembre con "la llegada masiva
 de inmigrantes a las costas de Murcia y Almería" y los centros ya 
existentes "completamente colapsados".
 "No hay falta de previsión"
Preguntado
 por su gestión del control migratorio, Zoido ha asegurado que "no hay 
falta de previsión" y que, aunque, a veces, "hay avalanchas, se les está
 dando solución". "La imprevisión no es la causa, le dimos una solución 
extraordinaria a una situación excepcional", ha insistido.
 Estas
 palabras no han gustado al portavoz socialista en esta comisión, David 
Serrada, que ha pedido al ministro de "reflexione" acerca de su 
actuación y se decida a poner "una solución permanente" a estas 
situaciones excepcionales que, a su juicio, "se están convirtiendo en 
permanentes".
 Para su 
homólogo del PNV, Mikel Legarda, Zoido ha primado en este caso el 
internamiento a los derechos de los migrantes. "Esperemos que, si esta 
situación se vuelve a producir, no suceda lo mismo". 
Finalmente, el 
representante del PP, Avelino de Barrionuevo, ha defendido la labor del 
representante del Gobierno asegurando que la solución tomada fue 
"razonable".