CARTAGENA.- Los concejales del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Cartagena, Manuel
 Padín, Ana Rama y Alfredo Nieto han comparecido hoy, en la Sala de 
Prensa del Palacio Consistorial, en rueda de prensa para explicar la 
posición de esta formación política ante el estado en el que hoy se 
encuentra el acuerdo que firmó el Gobierno de Cartagena con Ciudadanos 
para apoyar los presupuestos municipales de 2017.
 El portavoz de la 
formación naranja ha comenzado explicando las razones por las que su 
Grupo incluyó la rebaja del agua en el acuerdo para los presupuestos, 
"antes de que comenzara esta legislatura, ya teníamos una propuesta 
viable para bajar inmediatamente el precio del recibo del agua, estaba 
estimada en poco más del 7 por ciento, pero con reuniones, mesas del 
agua de todo tipo y demás, ha pasado un año y medio sin que esto ocurra,
 un año y medio en el que los cartageneros no han podido ahorrar miles 
de euros, el hartazgo de la sociedad era palpable y creímos útil y 
necesario forzar la reducción a cambio de nuestro voto favorable a los 
presupuestos".
El punto segundo del acuerdo exige que la propuesta de la rebaja se 
envíe al Consejo Asesor Regional de Precios acompañada de todos los 
informes que sean necesarios para garantizar su viabilidad legal, entre 
ellos, los del servicio de Infraestructuras, el económico, el de la 
asesoría jurídica y el de Intervención; si alguno de estos informes 
resultara desfavorable, el Gobierno municipal se ha comprometido a 
estudiar nuevamente por los mismos técnicos municipales la propuesta de 
la concesionaria.
"Esta condición en ningún momento impedía al Gobierno seguir con su 
trabajo de fiscalización y control de Hidrogea", ha aclarado el portavoz
 de Ciudadanos, que ha revelado que el primer borrador del acuerdo 
contenía un plazo de tres meses para que el Gobierno local remitiera la 
rebaja al Consejo Asesor Regional de Precios, "pero fue modificado por 
el propio Ejecutivo reduciéndolo a un plazo de 30 días, fueron ellos, no
 nosotros". 
El portavoz de la formación naranja, Manuel Padín, ha 
recordado que el pacto fue firmado por los portavoces de los grupos 
municipales que conforman el Ejecutivo local, PSOE y MC, y que el motivo
 por el que se retrasó hasta el mismo día del pleno donde se aprobaron 
las cuentas municipales, fue porque "no estábamos dispuestos a seguir 
adelante sin la firma del alcalde de Cartagena, José López, y de la 
vicealcaldesa Ana Belén Castejón".
"En el texto, Ciudadanos se comprometía a apoyar los presupuestos 
municipales de 2017 a cambio de la inclusión de ocho enmiendas que en 
total representan más de un millón de euros en inversiones estratégicas 
para el municipio, y el compromiso de bajar el precio del agua a la 
mayor brevedad posible", ha señalado Manuel Padín.
 Añade que añade que "ése 
fue el compromiso y se trata de un hecho consumado, los presupuestos se 
han aprobado con nuestras enmiendas y ahora es el Gobierno de Cartagena 
el que tiene que cumplir su parte, y enviar la propuesta de rebaja, de 
lo contrario tendrá que dar las explicaciones pertinentes; son los que 
gobiernan los que tienen que rendir cuentas y cumplir su palabra, son 
los dos partidos que gobiernan Cartagena los responsables de entenderse 
entre ellos para bajar el precio del agua, y no debería ser difícil 
cuando están gobernando juntos".
Padín ha asegurado que está siendo informado de los hechos relativos a
 la reducción del precio del agua directamente por la concejal de 
Hacienda, Isabel García, y que tras sus últimas conversaciones "me quedó
 claro que los informes estaban desarrollándose, que iban a ser 
favorables, sé por la interventora municipal que su informe no ve ningún
 problema, y sé que el alcalde tiene mucho interés en bajar el precio 
del agua, así que no sé, no entiendo qué está pasando para que no pueda 
convocarse lo antes posible una Junta de Gobierno para llevar el asunto;
 nosotros no somos gobierno, si lo fuéramos el recibo del agua habría 
bajado hace mucho tiempo y estaríamos controlando cada céntimo que 
maneja la concesionaria, pero no lo somos". 
En cualquier caso, el edil 
de Ciudadanos espera que ocurra pronto, "nadie dice que no se esté 
haciendo, salvo por un grupo de la oposición, que debería hacer examen 
de conciencia y dejar de ver la paja en el ojo ajeno, y empezar a ver la
 viga en el suyo".
El portavoz confía en que tanto el alcalde de Cartagena como la 
vicealcaldesa cumplan con su palabra y saquen una propuesta de rebaja en
 el precio del agua con todas las garantías a la mayor brevedad 
posible". 
"Según nuestros cálculos, si consideramos que la revisión 
debió haberse enviado a la Comunidad, como muy tarde, el 24 de febrero, y
 teniendo en cuenta un plazo prudente de deliberación en el Consejo de 
Precios, hemos perdido 17 días sin los nuevos precios, y por tanto, los 
cartageneros han dejado de ahorrar 119.000 euros por esta incomprensible
 tardanza", ha señalado Padín.
A preguntas de los periodistas sobre lo que hará Ciudadanos si el 
Ayuntamiento no rebaja el agua, Manuel Padín ha querido dejar claro que 
"de ninguna manera vamos a vincular nuestro voto en la aprobación 
definitiva de las cuentas a la estimación o no de una alegaciones, la 
valoración de estas reclamaciones se hará de manera independiente, no 
vamos mercantilizar ni a chantajear con esto, nosotros no actuamos 
mediante venganzas ni coacciones, sino valorando cada cosa en su 
momento, con rigor y objetividad,  y por eso hemos pedido recientemente 
al gerente del Consejo de Administración de la Sociedad Casco Antiguo, 
Antonio García, que inste al alcalde a convocar el Consejo para abordar 
las cuestiones relativas a dos alegaciones relacionadas con las parcelas
 de El Molinete".
Padín también ha explicado, a requerimiento de los periodistas, que 
su Grupo Municipal no ha establecido ninguna posición con respecto al 
previsible relevo en la Alcaldía de Cartagena.
 "Ciudadanos no ha tomado 
ninguna postura, sopesaremos la decisión cuando llegue el momento, y 
haremos lo que sea mejor para la ciudadanía, sin pensar en los sillones,
 y haremos lo más coherente; cuando llegue el momento habrá que hacer 
balance de nuestro estado económico, de la gestión municipal, del estado
 de salud de la gobernabilidad, escuchar a los ciudadanos, pero lo que 
está claro es que es más difícil entenderse con un Gobierno que no 
cumpliera su palabra, el movimiento se demuestra andando y tenemos claro
 qué hacer con aquéllos en los que no podemos confiar".