MURCIA.- El llamado Comité de Resistencia, integrado por los sindicatos CCOO,  UGT y Sterm, creado tras la ruptura de las negociaciones con el Gobierno  murciano tras la modificación de la Ley de Medidas Extraordinarias, más  conocida como el 'tijeretazo', volverá a protestar por las calles de  Murcia en lo que será su décima manifestación, prevista para el día 17,  porque "estas medidas no son las que llevarán a una salida de la crisis,  que recae en los empleados públicos".
   Así lo han anunciado en rueda de prensa los representantes de  CCOO, Sterm y FSP-UGT, Pedro Manuel Vicente, Toni Carrasco y José López,  respectivamente, quienes han precisado que la marcha hará su recorrido  habitual, teniendo como punto de inicio la Plaza Fuensanta, a las 20.00  horas, para acabar en Floridablanca.
   Y es que, tras la aprobación de dicha ley, el presidente murciano,  Ramón Luis Valcárcel, "dejó entrever un plan oculto del PP, el copago  en los servicios de sanidad y educación porque, dijo, disfrutan de ellos  muy alegremente".
   "Esto se ha plasmado en un nuevo plan de reequilibrio en el que se  introduce el anunciado copago con unas nuevas tasas que suponen unos  ingresos para la Comunidad de 15 millones de euros" mediante "tasas  impuestas en matrículas para las escuelas de idiomas o para acceder a  ciclos formativos", ha denunciado públicamente Vicente.
   Bajo el lema 'Los servicios públicos son de todos y no se toca. No  vamos a permitir su deterioro', los sindicatos han dejado claro que las  circunstancias con relación al inicio de las protestas en diciembre  "han empeorado".
   Según ha expuesto desde CCOO Pedro Manuel Vicente, "hay más  desempleo, menos recursos salariales y sociales, pérdida del Estado de  Bienestar y empobrecimiento de la sociedad murciana"; un panorama que ha  descrito como "desolador", porque "desaparece la inversión pública o se  pospone y se agravan las circunstancias que motivaron las  manifestaciones en 2010".
   En definitiva, "hay un nuevo ataque de los servicios públicos y se  deteriora la calidad de los servicios sanitarios, educativos y de  dependencia", ha alertado Vicente, quien ha considerado que de este  modo, "se buscan otras cosas y no una salida de la crisis, porque ponen  en marcha medidas fiscales que afectan a las rentas más bajas".
   En esta línea, ha recordado que la Ley de recortes "suponía un  empobrecimiento de todos", a lo que hay que unir el llamado plan de  reequilibrio que, en su opinión, "supone una concreción más brutal en  cuanto a los recortes anteriores, con un nuevo deterioro en calidad de  los servicios públicos, fundamentalmente en sanidad, educación y  servicios sociales, y destrucción de empleo".
   Dicho plan, que abarca desde 2011 a 2013, también conlleva, ha  vaticinado Vicente, "recortes de plantillas y pérdida del poder  adquisitivo para toda la ciudadanía, ya que se continúa con la  destrucción de empleo".
   Se recoge, ha puntualizado, "que habrá un descenso de 10 millones  de euros en gastos y un aumento de la jornada en el sector docente con  pérdida de puestos de trabajo del sector público".
   La reducción de plantilla "vendrá en el segundo semestre del año" y  se manifiesta en el hecho de que no es que se vayan a despedir a los  profesores, sino que no se contratarán en el sector docente. "Habrá que  dejar de contratar", ha lamentado Vicente, quien ha puesto de manifiesto  "el principio sangrante que se aplica: distinto salario para igual  trabajo".
   Al hilo, ha explicado que "personal del sector de la función  pública que desempeña el mismo trabajo de los del SMS tendrán distinto  salario, olvidándose de la homologación salarial".
   En el caso de los liberados sindicales, Vicente ha cifrado en  siete millones de euros lo que se reducirán los gastos. "Según dice el  Gobierno murciano, esos siete millones suponen la pérdida de 150 puestos  de trabajo".
   Si se estudia, por tanto, dicha propuesta en el sector docente,  "se habla de un ahorro de 27,5 millones en el segundo semestre de 2011  que se traducirá en la no contratación de 1.800 profesores".
   Además de estos "recortes sociales", Vicente ha declarado que "se  producirán otras vías de ahorro, como la aplicación adecuada de las  ratios que implicará una menor contratación, al igual que ocurrirá con  la no cobertura de situaciones de baja y la disminución de 10 millones  de ahorro por el incremento de la jornada de trabajo". 
   El Plan de reequilibrio financiero recoge "una previsión en gastos  superior a 144 millones y la de ingresos, a través de nuevas tasas y  tipos impositivos, que será bastante inferior gravando de nuevo a las  rentas más bajas".
   Por ello, no ha dudado en afirmar que este plan "fortalece  nuestras protestas y nos anima a seguir pidiendo a la sociedad murciana  su participación en la manifestación", porque "se nos penaliza con  tasas".
   Otra de esas tasas, según ha subrayado, es la referente al ámbito  de los servicios sociales, "por la expedición de títulos de familia  numerosas y certificados de minusvalía, entre otros, previendo recaudar  2,2 millones de euros".
   A su juicio, "es contradictorio hablar de cambio de modelo  productivo, porque significa más inversión en educación, investigación,  pero lo que se hace es aminorar la inversión y penalizar con tasas".
   Por su parte, Toni Carrasco, representantes de Sterm, ha señalado  que el mensaje que se quiere transmitir es que "no hemos olvidado lo que  hemos hechos hasta ahora, y no podemos dejar pasar el tiempo".  "Seguimos en alerta porque tras el verano vendrán más recortes", ha  concluido.