CARTAGENA.-  El diputado del Grupo Mixto José Antonio 
Pujante ha acusado este viernes al presidente de la Comunidad, Ramón 
Luis Valcárcel, y a su Gobierno, en su intervención en el Debate del 
Estado de la Región, de "mirar cínicamente hacia otro lado" y no darse 
cuenta de la verdadera situación de la Región.
   Pujante le ha advertido que la crisis no es "un designio divino ni
 un mal que sobrevive porque sí", responde a políticas concretas, "a 
políticas neoliberales de desregularización financiera, de apuesta por 
la especulación urbanística íntimamente ligada al poder financiero".
   En este sentido, ha recordado la desregularización inmobiliaria 
con la Ley del Suelo de Aznar "del todo urbanizable, más 
desregularización y connivencia financiera da como resultado a desastre 
económico en España y en la Región de Murcia".
   De hecho, ha defendido, "el pozo negro de las entidades 
financieras se debe al atracón de impagos de préstamos al ladrillo 
especulativo", así como la construcción para garantizar el derecho 
constitucional de acceso a la vivienda, "no para especular". 
   Algo que, ha indicado, "ahora tiene consecuencias judiciales" y ha
 hecho mención al caso Umbra que, más allá de las consecuencias penales 
que pueda tener, "es ejemplo una forma de hacer urbanismo inaceptable".
   "Aunque la máxima expresión simbólica de esta forma de actuar es 
la huida del ex alcalde y ex diputado del PP Juan Morales con el cruce 
de declaraciones del delegado del Gobierno y la Justicia", ha recordado.
   Pero lo que, a juicio de Pujante, resulta "bochornoso" es el 
mantenimiento el alcalde de Fortuna, "condenado por comprar votos para 
usted y su partido, por la Audiencia Provincial, y que ni dimite ni es 
cesado".
   El diputado del Grupo Mixto ha señalado al Gobierno regional como 
responsables "del pozo en el que nos encontramos", a pesar de que 
insistan en apelar a la "herencia recibida". El Gobierno regional junto 
con el de Mariano Rajoy que con más contrarreformas laborales, más 
recortes sociales, más dinero a los bancos "nos conducen al abismo".
   Ha opinado que los planes de Reequilibrio "no han obtenido los 
resultados deseados, al contrario, han deprimido aún más la economía 
regional" y los ajustes en servicios esenciales como la sanidad, la 
educación y los servicios sociales "fracturan la sociedad liquidando la 
débil cohesión social".
   Pujante ha hecho una foto a la situación regional ha destacado que
 la tasa de paro regional está casi en el 27 por ciento, con más de 
200.000 parados (en 2007 había 57.000, un 8,27%) y con perspectivas de 
crecimiento. 
   Además, está por encima del 50 por ciento entre jóvenes menores de
 25 años, y en el primer trimestre, según la EPA, un 16 por ciento de 
los hogares murcianos tienen todos sus miembros en paro (50.000 familias
 sin ingresos salariales) y un 33 por ciento con la mitad de los activos
 parados.
   A esto hay que añadir que en los últimos cinco años se han 
producido más de 16.0000 ejecuciones hipotecarias y hay una previsión de
 2.000 más; así como que ha aumentado la población en riesgo de pobreza y
 exclusión.
   Por ello ha rechazado la vía de los recortes sociales "se puede y 
se debe gastar mejor" y ha propuesto la "reducción en gastos corrientes,
 ahorro energético, compra centralizada o en salarios altos cargos, 
entre otros" pero no en sanidad, educación y servicios sociales.
   De igual forma, ha propuesto subir los impuestos a los que más 
ganan y tienen, porque "las reducciones salariales, el despido de 
empleados públicos y privados reducen el consumo y por ende la actividad
 económica".
   Pujante no ha olvidado en su discurso a Lorca y las consecuencias 
del terremoto, que asoló la ciudad hace algo más de un año. En aquel 
momento, ha recordado, en plena campaña electoral autonómica y local, 
marcó el discurso de la campaña y la agenda política posterior. Todo 
ello en un contexto de crisis económica.
   "Pese a la crisis era necesario dar una respuesta que, más allá de
 las actuaciones inmediatas, fuese generosa y solidaria a fin de 
recuperarla íntegramente", ha reclamado, pero "un año después Lorca está
 profundamente herida, no sólo en lo material sino en su orgullo y 
confianza en las instituciones".
   Ha destacado que "se prometieron 1.650 millones de euros, pero el 
Plan Lorca se ha diluido como un azucarillo". A su juicio, las 
actuaciones "son aisladas, no hay planificación y se actúa a salto de 
mata".
   A pesar de que, ha advertido, "aquí no vale el argumento de la 
crisis porque estamos en una situación de emergencia y es necesario 
actuar con contundencia y determinación".
   Finalmente ha acusado al presidente Valcárcel de "hacerle mucho 
daño a Lorca al no asumir sus compromisos y responsabilidades de pago en
 su momento".
 
 
