FRANCFORT.- El ministro de Economía y Competitividad, Luis  de Guindos, ha anunciado que las próximas reformas que acometerá el  Gobierno serán en sanidad y educación. Además, ha asegurado que España  "se sobrepondrá" a la crisis económica y que "saldrá reforzada". 
   En una entrevista concedida al diario alemán 'Frankfurter  Allgemeine', De Guindos ha descartado que España  vaya a seguir los pasos de Grecia, Irlanda y Portugal. "Nos  sobrepondremos y saldremos incluso más reforzados sin la ayuda  exterior", ha subrayado. "España es un país que ha cometido muchos  errores en el pasado y ha acumulado desequilibrios, pero ahora estamos  trabajando para corregir dichos problemas", ha indicado De Guindos.
   Para ello, el ministro de Economía ha confirmado que el  Gobierno emprenderá reformas en los "servicios públicos, máxime, en  sanidad y en educación". Esto supondrá, en palabras de De Guindos, "una  racionalización del gasto de las comunidades autónomas". Asimismo, las  reformas tendrán como objetivo "mejorar el funcionamiento de los  mercados" y, por ende, el del "mercado de alquileres, así como la  liberalización del comercio y en los servicios profesionales".
   En este sentido, también ha remarcado la reestructuración del  sector bancario, en el que "los más débiles, desaparecerán". Así pues,  "tendremos un sector financiero más sano con menos bancos, pero más  fuertes", ha sentenciado.
   De Guindos ha sostenido que España "pondrá en orden" las  finanzas públicas. "Hemos heredado un legado muy malo, pero lo  aceptamos, y ahora hemos de hacer lo que no se ha hecho en los últimos  cuatro años en los próximos seis meses", ha defendido De Guindos, que ha  reiterado que España "volverá a ser un socio de confianza en la Unión  Europea (UE).
   No obstante, interpelado por la confianza que profesan los  mercados por el Gobierno de Rajoy, De Guindos ha argüido que cuando los  inversores a "estudien los nuevos presupuestos, responderán de forma  positiva". La prima de riesgo española ha alcanzado su máximo en más de  cinco meses, justo cuando el Ejecutivo ha aprobado los primeros  presupuestos de la legislatura. 
   Al respecto, De Guindos ha achacado esta reacción al temor de  que los presupuestos "socavaran el crecimiento económico", ante lo cual,  "el Gobierno ha de reformar al mismo tiempo el mercado laboral, el  sector bancario y en otras áreas para demostrar en las próximas semanas  que (España) volverá a crecer en el medio plazo".
   Si bien ha admitido que "este año será difícil", De Guindos ha  abogado por que 2012 sea el año en el que se asiente "la base de la  recuperación" y ha rechazado "crear falsas expectativas". 
   "España tiene un problema de financiación. Si los mercados no  reconocen la consolidación (fiscal), todavía pueden incrementar el coste  de las finanzas públicas. Esto podría conllevar dificultades para el  sector privado". Por esta razón, De Guindos considera que "el control  del déficit es esencial" y "la consolidación fiscal inevitable". 
   "El anterior gobierno dejó un déficit del 8,5 por ciento en  lugar del 6 por ciento previsto. Por ello, hemos de emprender un  esfuerzo adicionales y, además, en un contexto de recesión. Sobre todo,  debemos recuperar la confianza en la economía española. Esto no implica  únicamente que tengamos un déficit del 5,3 por ciento este año, sino que  éste sea del 3 por ciento el año próximo. Estamos firmemente  comprometidos con esta meta", ha manifestado De Guindos.
   Sin embargo, estas "medidas extraordinarias en tiempos  extraordinarios" también se encaminarán hacia tres importantes vértebras  de la economía española: la reducción de la tasa de desempleo, "el  verdadero talón de Aquiles", de acuerdo con De Guindos; la economía  sumergida y el crecimiento económico.
        Sobre el último de estos ejes, el ministro de Finanzas ha  vaticinado "una ligera mejora" después de que este año la economía  española se contraiga un 1,5 por ciento. Para revertir esta coyuntura,  De Guindos ha apelado por "suprimir el déficit comercial", "reducir la  inflación por debajo de la media europea" y aumentar la competitividad.  Será el sector servicios y el turístico los que certifiquen tal mejoría  económica, ha apuntado.