MURCIA.- IU-Verdes ha realizado una dura crítica al gobierno regional por sus políticas públicas en materia de bienestar social al conocer el estudio publicado por la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales en el que denuncia que la Región de Murcia se encuentra a la cola de España en Renta Básica.
Manifiestan que esta asociación es un referente nacional en lo que se
 refiere a estudios e investigaciones relacionadas con el ámbito de la 
política social y los servicios sociales y recuerdan que no es la 
primera vez que Murcia queda a la cola en Renta Básica o en otros 
indicadores sociales como la gestión de la Ley de Dependencia según las 
investigaciones realizadas por esta entidad.
En esta ocasión los datos denuncian que apenas el 3,6% de la 
población murciana bajo el umbral de la pobreza recibe una renta básica,
 siendo la segunda comunidad autónoma con menor tasa de cobertura en 
esta ayuda en 2017, por detrás de Castilla la Mancha, y resaltando 
diferencias extremas entre comunidades, contrastando especialmente con 
el País Vasco, que cubre a las tres cuartas partes de su población en 
riesgo de exclusión (76,3%) y Navarra a dos tercios (66,6%). 
 Así, 
mientras que País Vasco tiene una tasa de 34,72 por mil habitantes 
perceptores de renta básica, o Navarra de 24,75, Murcia la tiene tan 
solo de 3,69.
Desde la formación de izquierdas advierten que esta situación no ha 
surgido de la noche a la mañana, sino que es la consecuencia tanto de 
décadas de gobiernos conservadores de la derecha en la Región de Murcia 
como de los durísimos recortes que han sufrido las inversiones en 
materia de política social, especialmente durante los años de crisis 
económica, a pesar de que en esos momentos eran más necesarias que 
nunca.
La edil lorquina de la formación y miembro de la dirección regional, 
Dori Peñas, ha lamentado que "el gobierno de López Miras ahora, y de 
Pedro Antonio Sánchez, Garre o Valcárcel antes, hayan apostado por 
proyectos megalómanos o vinculados a la especulación urbanística 
desatendiendo las necesidades reales de los ciudadanos más 
desfavorecidos".
Prueba de ello, continúa Peñas, es que "la Consejería de Familia 
destaque un incremento del 8% en el número de beneficiarios de renta 
básica en la Región, obviando que se trata de cifras más que 
insuficientes, tanto en el número de prestaciones concedidas como en el 
importe de las mismas, también de los más bajos de España a pesar del 
último incremento".
Demora en la implementación de la renta básica en la Región.
Desde la formación de izquierdas también denuncian que el gobierno 
regional ha tenido guardado en el cajón del olvido durante años una 
reglamentación necesaria para activar la renta básica, a pesar de estar 
aprobada y de la insistencia de grupos parlamentarios como IU-Verdes 
para su implementación.
Desde IUVRM recuerdan que la renta básica de inserción es una 
prestación "de supervivencia" con el objeto de prestar una ayuda 
económica a personas o unidades familiares para atender sus necesidades 
más básicas como la alimentación, con el fin último de facilitar su 
inserción social. 
Por tanto, consideran que se trata de un recurso 
social imprescindible tanto por su vertiente asistencial de cobertura de
 necesidades básicas como por la inserción social que promueve y que 
debe de ampliarse en una región que, además, posee unas tasas de pobreza
 y exclusión y de pobreza infantil muy por encima de la media nacional.

 
 




