MURCIA.- Las familias murcianas que recurrieron a 
Cáritas el pasado año para poder pagar el alquiler de su vivienda se han
 duplicado con respecto al ejercicio anterior, de forma que si en 2011 
se destinó para ello 195.000 euros, en 2012 esta cantidad se vio 
incrementada hasta los 500.000 euros. 
   Así se desprende de la Memoria de Cáritas Diócesis de Cartagena, 
que ha sido presentada este viernes en rueda de prensa por el director, 
José Luis Leante; y el secretario general, Antonio Sánchez, donde se 
pone de manifiesto que aunque el número de personas atendidas solo ha 
aumentado en 1.000, llegando a las 115.000, se prevé que en 2013 "no se 
baje el número de atenciones en virtud de las expectativas de acuerdo 
con la evolución del primer trimestre", por lo que "llega un momento en 
que nuestras infraestructuras, equipos humanos y medios económicos no 
dan para más".
   Por ello, Cáritas ha hecho un llamamiento a la sociedad murciana 
para poder obtener recursos económicos, al tiempo que se refuerce el 
servicio de voluntariado en las Cáritas parroquiales, que actualmente 
está compuesto por 2.125 personas, la mayoría mujeres (1.542).
   En cuanto a la labor de las Administraciones Públicas, Leante 
considera que "tendrán que ser los principales protagonistas de 
solucionar los graves problemas de esta crisis".
   Y es que, aunque la Comunidad "no adeuda" nada en la actualidad a 
Cáritas, desde esta organización se ha lamentado que "no haya el 
correspondiente esfuerzo para ir paliando las grandes deficiencias que 
existen en las familias murcianas".
   "Nos gustaría decir que no hemos crecido, pero en la Memoria hay 
cifras que han crecido con respecto a 2011, nos gustaría decir que las 
administraciones públicas están solucionando todos los problemas que 
tanto hombres, mujeres y niños tienen en Murcia pero no podemos 
decirlo", ha destacado Leante, quien ha argumentado que "no hay el 
correspondiente esfuerzo de las AAPP para ir paliando los grandes 
déficit que se están produciendo en las familias murcianas".
   No obstante, el director de Cáritas Diócesis de Cartagena ha 
dejado claro que "después de tantos años de crisis no hemos tenido que 
cerrar ningún proyecto de integración sociolaboral en las diócesis", 
aunque advierte que se han tenido que derivar en las Cáritas 
parroquiales "mucha atención a sofocar las necesidades urgentes que 
tenían las familias".
   El perfil de pobreza, según Sánchez, es el de un matrimonio mayor 
con hijos a su cargo y nietos, familias de dos miembros en paro y los 
que cobran la ayuda de los 426 euros y tiene tres o cuatro hijos. "El 90
 por ciento de los casos responde a estos tres perfiles", ha apuntado 
Sánchez, para después avisar de que hay familias que "se les están 
agotando ya todas las salidas".
   Respecto la donación de 20 millones de euros que realizó la 
Fundación Amancio Ortega para Cáritas al objeto de poder afrontar las 
necesidades en materia de alimentación, ayuda farmacéutica, servicios de
 vivienda y material escolar, entre otros, Leante ha precisado que "a 
fecha de hoy, los 72.000 euros que llegan semestralmente nos lo hemos 
comido con patatas".
   Y es que, ha alertado, las Cáritas parroquiales "tienen mucha más 
demanda y hemos gastado esos 72.000 euros y alrededor de los 45.000 
euros más que hemos tenido que prever de los fondos de ayuda de 
emergencia para solucionar y atender las ayudas, empleándose un total de
 125.000 euros".
   Durante el pasado año, desde Cáritas Diócesis de Cartagena se 
atendió a más de 115.000 personas, "equilibrándose el número de 
inmigrantes y españoles". Para ello, se invirtió "un 20 por ciento más 
que en 2011, de forma que se atendió casi al mismo número de personas, 
al incrementarse solo en 1.000, pero con mayores recursos", ha comentado
 Sánchez.
   Igualmente, se distribuyeron siete millones de kilos de alimentos,
 a los que habría que sumar los de la campaña de Navidad, mientras que 
Cáritas parroquiales gastaron casi 700.000 euros en compras de alimentos
 para distribuirlos junto a estos siete millones.
   Sánchez ha llamado la atención sobre los 2.800 expedientes 
familiares que se atendieron para que estas personas "puedan vivir en un
 hogar con los servicios básicos, pagar el alquiler, la luz y farmacia".
 Del total, ha continuado, "más de 2.000 estarían en la calle si no 
hubiera sido por la intervención de Cáritas, que estaban amenazadas de 
expulsión de las viviendas".
   Por todo ello, desde Cáritas se ha expresado la sensación de 
"impotencia", porque "no tenemos recursos ni medios para solucionar 
algunos casos tremendos de injusticia, de vidas desechas que quisiéramos
 reconstruir y no podemos".
   Se atendieron a más de 3.200 transeúntes y 190 personas se 
incorporaron a un empleo a través de sus programas, una cifra que 
contrasta con la de 2011, cuando fueron más de 300 las personas que 
encontraron empleo, lo que pone de manifiesto que "se ha deteriorado 
mucho la búsqueda de trabajo", dice Sánchez.
   Se proporcionaron plazas de escuelas infantiles para niños de 
hasta tres años que estaban viviendo en chabolas, derribos o 
infraviviendas y en materia de cooperación al desarrollo, Sánchez ha 
indicado que frente a los 214.000 euros que se destinaron en 2010, el 
pasado año descendió esta cantidad hasta los 37.815, por lo que hacen 
una "llamada desesperada para atender también a los países del Tercer 
Mundo por la pobreza extrema que hay".
   El economato de Lorca atendió a más de 1.300 personas y el de 
Cartagena a 1.574, al tiempo que Proinfancia generó alimentación para 
casi 400 familias con vales de comida canjeables en supermercados con 
los que Cáritas tiene convenio.
 
