MURCIA.- Ecologistas en  Acción pide que se actúe con responsabilidad y que no se siga usando  el agua para enfrentar a dos territorios con el único fin de obtener  más votos, manteniendo además una postura distinta en cada una de  las comunidades autónomas, según una nota de este colectivo.
 Esta asociación  recuerda que la gestión del agua "no puede ser establecida por los  estatutos  de autonomía sino por los Planes Hidrológicos de cada una de las  cuencas,  tal y como establece la legislación".
 "Ecologistas en Acción  Región Murciana pide a los principales partidos políticos de la  Región de Murcia que actúen con responsabilidad y dejen de utilizar  el agua con meros fines electorales. Además, exigen que dejen de  enfrentar  a las gentes de diferentes regiones utilizando argumentos simplistas  sin sentido ni ninguna base, llegando a la hipócrita situación actual  en que un mismo partido político defiende una postura en una región  y otra en la región vecina.
 Ecologistas destaca  varios  puntos clave sobre el trasvase Tajo-Segura, que normalmente se omiten  para no contradecir la propaganda populista asociada a la “Campaña  del Agua”: 
 1º.    La  Ley del Trasvase Tajo Segura, de 1971, sólo otorga derechos de  “agua excedentaria”. Esa cantidad de “agua excedentaria”   en la cuenca del Tajo depende de la cantidad de agua que hay (cuando  haya sequía “sobrará” poco o nada) y del gasto de agua  en la propia cuenca del Tajo, que aumentará con el crecimiento de la  población y desarrollo socioeconómico. Esto nos augura un futuro con  pocas “excedencias” de agua en la cuenca del Tajo. Además,  cuando hay sequía, la sufren las dos cuencas al mismo tiempo, la del  Tajo y la del Segura, por lo que cuando más “falta” agua  en la Región de Murcia es cuando menos “sobra” en la Cuenca  del Tajo.
2º.    En  realidad, la caducidad del trasvase probablemente se impondrá  por sí misma a largo plazo, marcada por dos fenómenos  incontrolables:  la dinámica natural (cambio climático) y la social (aumento de las  demandas en la cuenca del Tajo y aumento de la conflictividad social).  Discutir sobre la caducidad del trasvase en el ámbito de los Estatutos  de Autonomía puede generar réditos electoralistas a corto plazo, pero  no tiene ningún sentido por que el agua ha de planificarse en los Planes   de Cuenca, de ámbito muy diferente al de las Comunidades Autónomas,  planes que justamente ahora se hallan en elaboración, tanto en la cuenca   del Tajo como en la cuenca del Segura.
3º.    Mientras  perdemos el tiempo con luchas territoriales electoralistas, estamos  perdiendo la oportunidad de adelantarnos y adaptarnos a un posible  futuro  con recursos hídricos cada vez más escasos tanto en el Segura  como en el Tajo, y con un trasvase cada vez más virtual o marginal  que real, por el cambio climático y por las propias demandas internas  de la cuenca del Tajo. Para evitar que la Región de Murcia sea cada  vez más vulnerable frente a procesos que no puede controlar, debemos  replantearnos nuestro propio modelo interno de gestión del agua y de  desarrollo socioeconómico, y optar por medidas de gestión de la demanda. Hay   que replantear la gestión del agua en la Región de Murcia para ir  optando por actividades socieconómicas menos intensivas en agua pero  que generen alto valor añadido, reducir el regadío murciano y  concentrarlo  en calidad, en los que tengan mayores beneficios ambientales y sociales,   y por supuesto hacer una profunda auditoría del regadío para excluir  los perímetros ilegales y sin derechos de riego. Todo esto acompañado  de toda una batería de medidas de gestión de la demanda, que hay que  discutir y aprobar en el nuevo Plan de la Demarcación del Segura. 
4º.    En  vez de promover enfrentamientos sin sentido entre Comunidades Autónomas,   es necesario generar un espacio nuevo de discusión, análisis de la  realidad y elaboración de una senda hacia una mayor sostenibilidad  en el uso del agua tanto en el Tajo como en el Segura, espacio que  no es el de las arengas electorales de unos y otros. Este espacio ya  existe y es el de la elaboración de los Planes de la Demarcación del  Tajo y la Demarcación del Segura. Se debe crear una Comisión Mixta,  donde se integren y coordinen la elaboración de ambos planes, y donde  participemos todos, incluyendo grupos ecologistas,  colectivos ciudadanos, científicos...  de forma que se puedan presentar propuestas para el trasvase Tajo-Segura   que sean socialmente asumibles en ambas cuencas, ambientalmente  deseables  y económicamente viables, lo que además requerirá plantear medidas  a corto, medio y largo plazo, y teniendo en cuenta cual es la situación  actual.
En resumen, ni  Castilla  La Mancha puede ponerle caducidad al trasvase, ni la Región de Murcia  puede blindar el mismo en sus respectivos estatutos de autonomía.  Los ciudadanos estamos hartos de ver cómo se usa este tema con fines  puramente electoralistas, haciendo propaganda simplista y populista,  y enfrentando a las regiones de una manera irresponsable. 
Mientras  tanto, la gestión del agua es bastante precaria en una región que  dice tener sed, mientras sus autoridades no ha cesado autorizar  planes y proyectos con usos del agua tan insostenibles como los campos  de golf asociados a complejos residenciales, así como crecimientos  urbanísticos artificiosos e irreales basados en la especulación  inmobiliaria,  todo ello al mismo tiempo que gran parte de la explotación de las aguas  subterráneas sigue al margen de la legalidad y la planificación.
 Ecologistas en Acción  de la Región Murciana exige por lo tanto que se busque la vía de la  planificación  y gestión sostenible de este recurso en ambas cuencas, y ello por  la vía del diálogo y el encuentro, con la máxima participación pública,  y que se deje de potenciar un enfrentamiento irresponsable entre  territorios,  que sólo beneficia a las urnas".