
Ni las rebajas han conseguido, pues, animar la actividad en los comercios, que están acusando la crisis económica desde hace meses.
La confianza de los consumidores, tanto en la economía en general como en sus propias finanzas personales, se ha desplomado a causa del frenazo económico, y las tiendas de los cascos urbanos de la Región lo están notando, hasta el punto de que en los últimos meses han tenido que echar la persiana cerca de mil comercios, y se espera que lo hagan casi otros mil en los próximos meses.
El consejero de Consumo, José Pablo Ruiz Abellán (en la imagen), como si tuviera una bola de cristal o fuese el novamás de la predicción económica mundial, recomendó ayer a los propietarios de estos negocios que, en la medida de lo posible, «traten de esperar hasta la campaña de Navidad; es prudente que intenten aguantar unos meses», aconsejó, desde la más osada de las ignorancias, a estos pequeños empresarios inmersos en la más completa incertidumbre.
1 comentario:
Yo, mis calzoncillos los he tenido que remendar.
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