MURCIA.- En la Región de Murcia, la cuenca del Segura espera como 'agua de abril' el trasvase Tajo-Segura anunciado por la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, en los micrófonos de la Cadena SER esta semana y que podría ser aprobado en el primer Consejo de Ministros tras la Semana Santa. El trasvase, clave para la subsistencia del potente regadío murciano, está cerrado desde el verano del año pasado, recuerda hoy también la Cadena SER.
Mientras tanto, siguen regando los agricultores del trasvase con agua desalada y de pozos de emergencia. Esa misma agua desalada ya llega al 90% de hogares en grandes ciudades como Murcia y Molina de Segura donde los vecinos se tratan de acostumbarse al sabor.
Castilla-La Mancha
Por su parte, en Castilla-La Mancha el Gobierno regional ya ha anunciado que recurrirá el nuevo trasvase del Tajo al Segura que podría llegar a primeros de abril. Desde la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha piden la puesta en marcha de las desaladoras del Levante y lamentan que el agua del trasvase sea mucho más barata que la de las desaladoras.
El Gobierno del PSOE lamenta la actitud del PP de Castilla-La Mancha en materia de agua; por su parte, los populares recuerdan que durante la pasada legislatura María Dolores de Cospedal consiguió aumentar la reserva de los embalses de cabecera del río Tajo de 240 a 400 hectómetros cúbicos.
Comunidad Valenciana
En la Comunidad Valenciana reutilización y desalación deben ser los elementos claves para el gobierno de Ximo Puig. Los trasvases existentes deben mantenerse y exigen el cumplimiento estricto de la ley como cuenca receptora, pero en principio descartan nuevas transferencias entre cuencas por inviables y excesivamente costosas económica y medioambientalmente.
Al tiempo se mantiene el esfuerzo continuo para seguir avanzando en la modernización de los regadíos mientras ya se aplican restricciones a los mismos y más que llegarán en cuanto se agoten las aportaciones de los últimos temporales.
Aragón
En Aragón, el eterno debate sobre el agua siempre lleva al temor a un posible trasvase del Ebro. Preocupa que el borrador de pacto nacional del agua de la ministra Tejerina recoja la posibilidad de trasvases, aunque se incluya el matiz de que tiene que haber acuerdo con las cuencas cedentes. Y otra de las polemicas clásicas es la de los embalses,
la mayoría de los partidos politicos en Aragón apoyan la construcción
de pantanos, aunque algunos como el del recrecimiento de Yesa han
triplicado su presupuesto inicial y ya está por encima de los 400
millones, y otros como el de Biuscarrués han sido paralizados por la
Justicia.
Las abundantes precipitaciones de 2018 no acaban con la sequía
El año hidrológico de 2017 terminó el 30 de septiembre con un 15 por ciento de falta de precipitaciones
respecto a los volúmenes normales y, aunque desde entonces, hasta el 14
de marzo de 2018 el nuevo ejercicio (1 de octubre de 2017 a 30 de
septiembre de 2018), se ha superado en un 2 por ciento el volumen normal
de lluvias, la sequía no ha llegado a su fin.
Según concluyen los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), el año hidrológico comenzó
con los meses de octubre y de noviembre muy secos, lo que dio lugar a
que al finalizar noviembre la precipitación acumulada fuera un 58 por
ciento por debajo del valor normal para el conjunto de eso dos meses.
El invierno que terminó el pasado martes ha sido húmedo y el mes de
febrero y marzo han tenido precipitaciones abundantes. El déficit que
iba acumulando el año hidrológico se redujo hasta el 30 por ciento el 20
de febrero. Posteriormente, entre el 27 de febrero al 6 de marzo, a
consecuencia de la borrasca Enma, se registraron precipitaciones intensas en muchas zonas y el déficit se redujo hasta el 10 por ciento.
Con la continua presencia de borrascas, la precipitación acumulada
hasta el 14 de marzo alcanzó 383 litros por metro cuadrado, lo que
supone un 2 por ciento más del valor normal correspondiente, que son 375
litros por metro cuadrado. Los embalses, sin embargo, solo registran un
balance positivo en las cuencas del norte y del noroeste. En el resto
de las cuencas, siguen por debajo de los volúmenes normales en este
periodo.
De este modo, entre el 1 de octubre hasta el 14 de marzo de 2018, se
han superado los valores normales en la franja norte desde el oeste de
Galicia hasta el interior de Catalunya, en extensas zonas del interior
peninsular, de Extremadura, Andalucía, este de Baleares y algunos puntos
de Canarias.
De hecho, en un área que va de Cantabria, País Vasco, algunas zonas
de Asturias, Navarra y La Rioja y otra que alcanza desde Málaga y
Granada hasta Toledo, Ciudad Real y el sur de Madrid ha llovido más de
un 25 por ciento por encima del valor normal.
Sin embargo, siguen sin alcanzar las precipitaciones normales en
extensas áreas de la vertiente mediterránea como Gerona, Comunidad
Valenciana, sur de Aragón, Murcia y Almería, así como en una zona del
este de León y el sur de Canarias.
En estas áreas no han llegado al 75
por ciento del valor normal y no se ha llegado a la mitad de lo normal
de precipitación en el noreste de Gerona, interior de Teruel, área
litoral de las provincias de Valencia y Castellón y en una zona entre
Murcia y Almería.