El 21 de junio pasado la UTE Aria
International y Acciona Infraestructuras plantean ante la dirección
general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar del ministerio de
Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente solicitud de concesión de
ocupación del dominio público marítimo terrestre para «la regeneración
de la Bahía de Portmán», para restauración ambiental de la bahía de
Portmán siguiendo el proyecto aprobado por el ministerio de Medio
Ambiente, septiembre de 2011.
Además, realizaría ´actividades
complementarias´ para «llevar a cabo el dragado integral de la bahía y
las operaciones de valorización de los sedimentos a extraer necesarias
para hacer viable el proyecto en su totalidad o en parte». En paralelo,
plantea ante la dirección general de Industria, Energía y Minas de la
Comunidad autónoma «la calificación y posterior autorización para el
aprovechamiento del yacimiento no natural de la Bahía de Portmán como
recurso de la sección B».
Con esta solicitud «desea ejercitar su
derecho preferente para el aprovechamiento (€) para la realización de la
Propuesta de Actuaciones Complementarias y Proyecto de Regeneración y
Adecuación Ambiental de la Bahía de Portmán para llevar a cabo el
dragado integral de la bahía y las operaciones de valorización de los
sedimentos a extraer necesarias para hacer viable el proyecto en su
totalidad o en parte». Supone una concesión minera de 1.262.126 m2,
764.183 m2 sobre el nivel de mar (casi toda la bahía) y 497.943 m2
sumergidos frente a ella.
Quieren la concesión minera de
explotación del yacimiento que se declarase y, dentro del proyecto de
explotación, extraerían los estériles. No parece clara la rentabilidad
financiera del proyecto: hablan de la recuperación total de la bahía.
Para hacer rentable la explotación extraerían todos los residuos
depositados en la bahía, hasta recuperar la línea de la zona
marítimo-terrestre de 1957, con los calados que había en la bahía en ese
año (más los posibles de esos 497.943 m2 bajo el mar frente a la
bahía).
El proyecto recoge extraer 4,4 millones de toneladas/año
de concentrados de hierro. Diversas fuentes consultadas (documentación
de Peñarroya; informes de Cedex, IGME, IEO, UPCT, UM...) indican que no
es probable que exista en la bahía esa cantidad de mineral de hierro. No
alcanzaría 1 Mt. de magnetita.
La UTE dice que ha realizado once
sondeos en la bahía, presenta el análisis de uno de ellos con unos
contenidos en % Fe todo uno entre 45,5 y 22,7. Máximo del 45,5 % de Fe
todo uno, en la parte superior. Últimamente Peñarroya no extraía la
magnetita, ni la quería presente en ´las tierras´ que se enviaban al
lavadero, pero hasta medidos de la década de 1960 sí la extraía. Es
decir, hay poca magnetita en los estériles que aterran la bahía de
Portmán como para hacer rentable una explotación minera que generase
esos quinientos puestos de trabajo directos de los que hablan.
Hablan
de extraer dos productos valorizables: 1. Concentrado de hierro
vendible (0,88 millones de toneladas/año). 2. ´Arena limpia´ (0,25
millones de toneladas/año) para utilizar en la playa recuperada. También
dice que generarían estériles sucios «los residuos sólidos 1,45
millones de toneladas/año que serán espesados para su vertido en
condiciones seguras en las instalaciones previstas en el proyecto».
Recoge sin cuantificar que «los efluentes líquidos se gestionarán
adecuadamente previo vertido a dominio público». Sería un líquido espeso
(aunque no se adicionen productos químicos) pero con una oxidación
aérea debido al manejo de los estériles, resuspensión y quizás remolido
de los mismos, etc. Algo que recuerda a lo que vertía Peñarroya cuando
una legislación ambiental menos exigente y una situación política no
democrática permitían ese estado de cosas. Parece poco probable que
pueda ocurrir hoy con la legislación ambiental aplicable: CARM,
Administración central, UE, ONU, €
Dice: «La deposición de dichos
residuos se llevará a cabo no sólo en la Corta San José, como prevé el
proyecto, sino utilizando igualmente la Corta Gloria». No es seguro que
quepa en las cortas San José-Gloria Este la cantidad a generar en el
proceso de recuperación de toda la bahía. Además, hay que conseguir los
permisos de vertido, tanto de propietarios como de las Administraciones
competentes.
¿Por qué no se reúne la comisión de seguimiento que
se estableció en el convenio de colaboración firmado en enero de 2006
entre el ministerio de Medio Ambiente, el presidente de la CARM y el
alcalde de La Unión? No se ha reunido desde febrero de 2011, a pesar de
que lo reclaman los colectivos sociales que han venido participando en
todo el proceso. La comisión de seguimiento debía haber sido informada
de tan importantes cuestiones que se han producido a lo largo de este
tiempo. El representante de los colectivos vecinales y ecologistas
podría conseguir información relevante de los temas.
Otra duda:
¿Por qué es mejor regenerar la bahía en un procedimiento administrativo
de explotación minera con el añadido de recuperarla en lugar de hacerlo
desde un proyecto de restauración ambiental ya aprobado?