QUITO.- Rafael Correa fue reelegido hoy presidente de Ecuador
con un margen suficiente para evitar tener que presentarse a una segunda
vuelta, según los sondeos a pie de urna.
Correa recibió el 61% del voto, frente al 21% del exbanquero
Guillermo Lasso, según un estudio de Opinión Pública, mientras que según
la empresa Cedatos, Correa obtuvo el 61,5% y Lasso el 20%.
El estudio de la empresa Opinión Pública señaló que el mandatario obtuvo 61% de los sufragios, contra 21% del derechista Lasso. A su vez, Cedatos-Gallup estableció que Correa logró el 61,5% de los votos frente a 20,9% del banquero.
Un tercer "exit poll" del Centro de Investigaciones y Estudios Especializados (CIESS) reveló que Correa ganó con 58,8%, frente 23,10% de Lasso.
Las encuestas de Opinión Pública y CIEES fueron difundidas por la televisión púiblica y medios bajo control del Estado, mientras que la Cedatos-Gallup fue divulgada por los diarios El Comercio, El Universo y la televisora Ecuavisa.
Para evitar un balotaje el mandatario requería del 50% más uno de los sufragios válidos (sin blancos ni nulos) o un 40% de éstos y una diferencia de al menos 10 puntos sobre el segundo.
Correa conoció los resultados en el palacio presidencial de Carondelet, donde dio muestras de euforia y recibió abrazos de felicitación de numerosos colaboradores, familiares y amigos. Posteriormente salió al balcón para saludar a una muchedumbre que se agolpó en la plaza.
El mandatario, electo en 2007, fue confirmado como presidente en 2009 en comicios anticipados tras la promulgación de una nueva Constitución, como hiciera previamente su aliado el líder venezolano Hugo Chávez.
Lasso había manifestado al votar en Guayaquil (suroeste) que mantenía fe en que obtendría un buen resultado, y señaló que llevaría su propio conteo de votos.
"Estamos (...) con gran fe en que el pueblo sabrá tomar la mejor decisión", señaló el banquero de 57 años. "Nuestras reacciones se darán cuando exista una tendencia definitiva del conteo oficial", agregó.
Las urnas cerrraron después de diez horas a las 17.00 locales (22.00 GMT), y en un primer balance los observadores de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) dieron "un parte de normalidad", aunque con algunos retrasos en la instalación de puestos de votación.
"Voté por el presidente porque los demás solo ofrecen cosas al paso y después no cumplen", dijo Mariano Chicaiza en el poblado indígena de Cangahua (norte).
Correa, un economista de 49 años con una popularidad en torno al 80%, prometió radicalizar su proyecto, que califica como revolución ciudadana.
Los ecuatorianos también eligieron a sus representantes al Congreso, pero las encuestas a boca de urna solo fueron autorizados para las presidenciales. Según una encuesta de la firma CMS difundida la noche del sábado, Correa obtendría con su movimiento Alianza País (AP) una mayoría absoluta con entre 60% y 65% de los escaños.
Actualmente AP tiene el principal bloque, pero no alcanza a ser mayoría, por lo que Correa se planteó como objetivo consolidar su fuerza en el Legislativo para sacar adelante proyectos pendientes y otros con los que éste crítico del neoliberalismo dice que hará "irreversible" su revolución ciudadana.
De hecho, durante la campaña advirtió que no descartaba un adelanto de elecciones generales, como prevé la Carta Magna, en caso de un bloqueo parlamentario de la oposición.
La falta de una mayoría legislativa no le ha permitido al gobierno ver aprobadas normas como la ley de comunicación, que plantea un nuevo reparto de frecuencias y más regulaciones.
Esa ley es impulsada por el oficialismo en el marco de una pugna que Correa mantiene con un sector de la prensa privada, por lo que fue acusado por ONGs internacionales de violar la libertad de expresión.
En contrapartida, en agosto el mandatario le concedió asilo al fundador del portal WikiLeaks, Julian Assange, quien está alojado desde junio en la embajada de Quito en Londres para evitar una posible extradición a Estados Unidos, donde se le indaga por presunto espionaje tras haber filtrado información secreta.
Correa también se propone desarrollar la minería a gran escala, una cuestión que se vislumbra conflictiva por el rechazo de sectores indígenas.
El jefe de Estado anticipó que si es reelecto este será su último mandato.
Correa ha sido una de las voces fuertes de la izquierda latinoamericana, es el que más ha durado en el cargo desde 1996. En ese período Ecuador -de 15,5 millones de habitantes- tuvo ocho gobernantes (tres de ellos derrocados).
Su gran aceptación es el resultado de la estabilidad política y económica y de los proyectos sociales y de infraestructura que ha desarrollado con los fondos del petróleo.
ÚLTIMA HORA
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha ganado con el 57,05 por ciento de los votos las elecciones presidenciales que se han celebrado este domingo en el país andino, según los datos preliminares del conteo rápido del Consejo Nacional Electoral (CNE)
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, fue reelegido
este domingo para un segundo mandato de cuatro años, según tres
encuestas a boca de urna que señalan un triunfo arrasador del mandatario
socialista sobre su principal rival, el banquero Guillermo Lasso.
Los sondeos de firmas privadas le dan a Correa entre 58,8% y 61,5% de
los votos, lo que de confirmarse asegura su reelección en primera
vuelta.El estudio de la empresa Opinión Pública señaló que el mandatario obtuvo 61% de los sufragios, contra 21% del derechista Lasso. A su vez, Cedatos-Gallup estableció que Correa logró el 61,5% de los votos frente a 20,9% del banquero.
Un tercer "exit poll" del Centro de Investigaciones y Estudios Especializados (CIESS) reveló que Correa ganó con 58,8%, frente 23,10% de Lasso.
Las encuestas de Opinión Pública y CIEES fueron difundidas por la televisión púiblica y medios bajo control del Estado, mientras que la Cedatos-Gallup fue divulgada por los diarios El Comercio, El Universo y la televisora Ecuavisa.
Para evitar un balotaje el mandatario requería del 50% más uno de los sufragios válidos (sin blancos ni nulos) o un 40% de éstos y una diferencia de al menos 10 puntos sobre el segundo.
Correa conoció los resultados en el palacio presidencial de Carondelet, donde dio muestras de euforia y recibió abrazos de felicitación de numerosos colaboradores, familiares y amigos. Posteriormente salió al balcón para saludar a una muchedumbre que se agolpó en la plaza.
El mandatario, electo en 2007, fue confirmado como presidente en 2009 en comicios anticipados tras la promulgación de una nueva Constitución, como hiciera previamente su aliado el líder venezolano Hugo Chávez.
Lasso había manifestado al votar en Guayaquil (suroeste) que mantenía fe en que obtendría un buen resultado, y señaló que llevaría su propio conteo de votos.
"Estamos (...) con gran fe en que el pueblo sabrá tomar la mejor decisión", señaló el banquero de 57 años. "Nuestras reacciones se darán cuando exista una tendencia definitiva del conteo oficial", agregó.
Las urnas cerrraron después de diez horas a las 17.00 locales (22.00 GMT), y en un primer balance los observadores de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) dieron "un parte de normalidad", aunque con algunos retrasos en la instalación de puestos de votación.
"Voté por el presidente porque los demás solo ofrecen cosas al paso y después no cumplen", dijo Mariano Chicaiza en el poblado indígena de Cangahua (norte).
Correa, un economista de 49 años con una popularidad en torno al 80%, prometió radicalizar su proyecto, que califica como revolución ciudadana.
Los ecuatorianos también eligieron a sus representantes al Congreso, pero las encuestas a boca de urna solo fueron autorizados para las presidenciales. Según una encuesta de la firma CMS difundida la noche del sábado, Correa obtendría con su movimiento Alianza País (AP) una mayoría absoluta con entre 60% y 65% de los escaños.
Actualmente AP tiene el principal bloque, pero no alcanza a ser mayoría, por lo que Correa se planteó como objetivo consolidar su fuerza en el Legislativo para sacar adelante proyectos pendientes y otros con los que éste crítico del neoliberalismo dice que hará "irreversible" su revolución ciudadana.
De hecho, durante la campaña advirtió que no descartaba un adelanto de elecciones generales, como prevé la Carta Magna, en caso de un bloqueo parlamentario de la oposición.
La falta de una mayoría legislativa no le ha permitido al gobierno ver aprobadas normas como la ley de comunicación, que plantea un nuevo reparto de frecuencias y más regulaciones.
Esa ley es impulsada por el oficialismo en el marco de una pugna que Correa mantiene con un sector de la prensa privada, por lo que fue acusado por ONGs internacionales de violar la libertad de expresión.
En contrapartida, en agosto el mandatario le concedió asilo al fundador del portal WikiLeaks, Julian Assange, quien está alojado desde junio en la embajada de Quito en Londres para evitar una posible extradición a Estados Unidos, donde se le indaga por presunto espionaje tras haber filtrado información secreta.
Correa también se propone desarrollar la minería a gran escala, una cuestión que se vislumbra conflictiva por el rechazo de sectores indígenas.
El jefe de Estado anticipó que si es reelecto este será su último mandato.
Correa ha sido una de las voces fuertes de la izquierda latinoamericana, es el que más ha durado en el cargo desde 1996. En ese período Ecuador -de 15,5 millones de habitantes- tuvo ocho gobernantes (tres de ellos derrocados).
Su gran aceptación es el resultado de la estabilidad política y económica y de los proyectos sociales y de infraestructura que ha desarrollado con los fondos del petróleo.
ÚLTIMA HORA
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha ganado con el 57,05 por ciento de los votos las elecciones presidenciales que se han celebrado este domingo en el país andino, según los datos preliminares del conteo rápido del Consejo Nacional Electoral (CNE)