La Humanidad ha seguido repitiendo y dramatizando a lo largo de la
historia los mismos errores que provocaron el fracaso de la
Atlántida, como si no hubiéramos aprendido sus lecciones
sobre la arrogancia y la ambición desmedida. Por eso uno de los
nombres de la Tierra es Saras, que significa el planeta de la
repetición, ya que la gente tropieza con la misma piedra una y otra
vez sin aprender de la experiencia.
La Atlántida se describe como una
sociedad poderosa y avanzada que cayó en desgracia debido a su
decadencia moral y a su ambición descontrolada. Es una advertencia
contra la arrogancia y la búsqueda desenfrenada de poder y riqueza,
recordándonos la importancia de mantener un equilibrio en nuestras
aspiraciones y valores. El creerse superior a los demás es una
herencia desgraciada de la Atlántida que aún arrastran
muchos seres humanos.
https://eraoflight.com/2023/08/30/ops-in-egypt-part-3-1/
https://www.disclosurenews.it/light-forces-ops-in-egypt-part-1/
https://finalwakeupcall.info/es/2023/10/28/la-civilizacion-de-la-atlantida/
DEFINICIÓN
La Atlántida o isla de Atlas es
el nombre de una isla mítica mencionada y descrita en los diálogos
Timeo y Critias
del filósofo griego Platón donde la isla aparece como una
potencia militar que existió nueve mil años antes de la época del
legislador ateniense Solón, quien, según Platón, es
la fuente del relato. Se encontraba más allá de las Columnas de
Hércules y se la describe como más grande que Libia y
Asia Menor juntas.
El poderío de la Atlántida fue tal que llegó
a dominar el suroeste de Europa y el norte del África,
hasta ser detenida por la ciudad de Atenas. En ese mismo
momento una catástrofe, que no se describe, hizo desaparecer a la
vez la isla y los ejércitos rivales, en un solo día y una noche
terrible. El mar donde estuviera la Atlántida se tornó
innavegable a causa de los bajíos, en tanto que Atenas y los
pueblos de Grecia olvidaron el suceso, pues sólo unos pocos
sobrevivieron.
Los reinos de la Atlántida formaban una
confederación gobernada a través de leyes, las cuales se
encontraban escritas en una columna de oricalco, en el templo de
Poseidón. Las principales leyes eran aquellas que disponían
que los distintos reyes debían ayudarse mutuamente, no atacarse unos
a otros, y tomar por consenso las decisiones concernientes a la
guerra, y otras actividades comunes, y bajo la dirección de la
estirpe de Atlas. Cada cinco y seis años, los reyes se
reunían para tomar acuerdos y para juzgar y sancionar a quienes de
entre ellos habían incumplido las normas que los vinculaban.
La justicia y la virtud eran propios del
gobierno de la Atlántida, pero cuando se redujo la naturaleza
divina de los reyes descendientes de Poseidón, la soberbia y
las ansias de dominio se volvieron características de los atlantes.
Según el Timeo, comenzaron una política de expansión que
los llevó a controlar los pueblos de Libia hasta Egipto
y de Europa, hasta Tirrenia. Cuando trataron de someter
a Grecia y Egipto, fueron derrotados por los
atenienses.
https://es.wikipedia.org/wiki/Atl%C3%A1ntida
LECCIONES
La Atlántida se describe como una
sociedad que cayó en la corrupción y la decadencia moral, lo que
finalmente condujo a su destrucción. Esta parte de la historia puede
servir como una advertencia sobre los peligros de la corrupción y la
pérdida de valores éticos en una sociedad. La historia de la
Atlántida destaca la importancia de mantener altos estándares
éticos y morales en la sociedad. La corrupción y la decadencia
moral pueden socavar la estabilidad y el éxito de una civilización
a largo plazo.
La búsqueda excesiva de poder, riqueza y
dominio, como se describe en la Atlántida, puede llevar a la
corrupción y a la pérdida de valores. Esto puede servir como una
advertencia para la sociedad actual sobre la necesidad de equilibrar
el progreso material con los principios éticos y morales.
La historia de la Atlántida ilustra
cómo pueden colapsar incluso las sociedades poderosas y avanzadas si
no se abordan problemas como la corrupción y la decadencia. Esto nos
recuerda que ninguna civilización está exenta de desafíos y que
debemos mantener una vigilancia constante sobre nuestra integridad
ética.
Además,
los
atlantes tenían la costumbre de vivir al lado del mar, igual que en
la sociedad actual, y esto los expuso a maremotos. Esto
recuerda la vulnerabilidad de una
civilización ante los desastres naturales. En resumen, la historia
de la Atlántida
nos insta a reflexionar sobre la importancia de la ética, la moral y
la responsabilidad en la sociedad, así como a considerar las
consecuencias de la corrupción y la decadencia a
largo plazo.
ARROGANCIA
Como suele ocurrir con la gente que tiene
demasiada riqueza y poder, los atlantes también querían más. En su
ansia de poder, esta civilización avanzada declaró la guerra a
todos los pueblos del Mediterráneo. Como era de esperar, apenas
encontró resistencia la poderosa fuerza naval de los atlantes.
Conquistaron y esclavizaron a la mayoría de sus vecinos,
tecnológicamente inferiores. Pero en su arrogancia, los atlantes
subestimaron a una ciudad griega.
Según Platón, los habitantes de la
Atlántida se volvieron corruptos y decadentes. Descendieron a
la inmoralidad, la avaricia y la lucha por el poder. Se embarcaron en
campañas militares agresivas y expansionistas, conquistando
territorios cercanos, y tratando de subyugar a otras naciones.
Además, los atlantes desobedecieron las leyes divinas y desafiaron
el orden cósmico.
Los atlantes se volvieron racistas,
supremacistas e imperialistas, y pretendieron conquistar el mundo por
la fuerza para imponer un gobierno mundial. Se distinguían de los
demás pueblos porque usaban una boina de color verde y
hablablaban el elengoa que es un idioma protovasco,
padre del antiguo idioma ibérico.
Eran clasistas porque estaban divididos en un
sistema de castas, como en la antigua India, donde los de
arriba tenían todos los privilegios y los de abajo eran esclavos.
Los escritos de Blavatsky describen a los atlantes como
personas de piel morena y como los antepasados de los modernos
pueblos mongoles e indígenas americanos.
AVANCES
La Atlántida era una isla enorme, “más
grande que Libia y Asia juntas”. Estaba poblada por una raza de
semidioses, dirigidos por poderosos reyes, cuyo linaje se remontaba
nada menos que a Poseidón, el poderoso dios de los mares y
océanos. Los atlantes aprovecharon al máximo esta conexión.
Crearon una civilización sofisticada y construyeron enormes ciudades
en una época en la que el resto del mundo aún estaba en el
Neolítico. A ello contribuyó que vivían en una auténtica
cornucopia, con abundantes recursos, sobre todo metales: plata, oro
y, especialmente, oricalco, el metal dorado-rojizo más preciado
compuesto de una aleación de cobre, zinc y otros metales.
Según Lev, la civilización de la
Atlántida estaba muy por delante de la actual, se desplazaban en lo
que hoy llamamos aerodeslizadores, como coches voladores, que
funcionaban con energía celeste, sin necesidad de carreteras, como
ocurre hoy en día. Se erradicaron todas las enfermedades, pero
comenzó su caída cuando violaron las leyes fundamentales de la
naturaleza, y esta es una lección muy sabia para todos nosotros para
no continuar en direcciones específicas como la genética, es decir,
el trasplante de órganos criados a partir de animales, con graves
consecuencias, lo que llevó a la caída de la Atlántida.
El periodo dorado de la Atlántida fue
el nivel más alto de conciencia de luz jamás alcanzado en el
planeta Tierra y en cualquier otra civilización avanzada; más alto
que Lemuria y que Mu, y más alto que el de Rama
e Ignacia. Hasta el día de hoy, el periodo de civilización
de la Atlántida es desconocido en la historia de la Tierra
porque la literatura sobre el tema en los archivos de la biblioteca
de Alejandría fue destruida hace 2.300 años.
GUERRA CIVIL
La Atlántida estaba gobernada por doce sumos
sacerdotes que fueron invitados de diferentes planetas del Universo.
Ellos supervisaron el proyecto del ser humano perfecto. Sin embargo,
el excocreador oscuro podría enfrentarlos entre sí. Se desató una
lucha por el poder que condujo a la destrucción de toda la
civilización, en una disputa que se convirtió rápidamente en una
guerra espacial. Utilizaron ampliamente el poder climático,
tectónico, de vacío, de plasma y de otros tipos de armas y
elementales. Los sacerdotes oscuros suprimieron activamente la
conciencia de las personas mediante dispositivos de control mental.
En la Atlántida, una función
importante la desempeñaba el Servofototrón, un cristal de
fuego artificial, acelerador de la transición cuántica, mediante el
cual los cocreadores planeaban elevar la densidad de la Tierra de 3-D
a 4-D y más. Al comienzo del conflicto civil, los sacerdotes oscuros
casi lo capturan un momento antes del lanzamiento, pero los
sacerdotes de la luz lograron desactivar la instalación a tiempo.
Lo máximo que lograron los atlantes fue la
activación de seis de doce hélices de su ADN, el 51% del potencial
cerebral y algo de alta tecnología cuántica, nuclear y cósmica.
Pero descendieron de ese nivel cuando comenzó una decadencia moral y
espiritual masiva, y se utilizaron habilidades y conocimientos para
el mal y el exterminio mutuo. Como resultado de ello se produjo una
rápida destrucción de la cuarta raza.
Los cocreadores se quedaron sin nada, y era
necesario encontrar nuevas formas de salvar la Tierra y renacer un
ser humano perfecto. Decidieron hacer otro intento, teniendo en
cuenta todos los errores y la mala experiencia en la Atlántida.
Así nació el gran concepto del antiguo Egipto. Lo
reflexionaron durante mucho tiempo y prepararon cuidadosamente un
nuevo proyecto, así como los criterios de selección. En el
experimento participaron únicamente entidades cósmicas superiores,
sólo en un país, y no a escala mundial, como sucedió en la
Atlántida.
ENERGÍA
Cuando comenzó la desaparición, también se
hundió bajo el nivel del mar el templo que contenía los cristales
que daban energía Estos cristales siguen activos, dados los
numerosos y misteriosos accidentes de barcos y vuelos en el triángulo
de las Bermudas, causados
por fallos de navegación debidos a interferencia en la lectura de la
brújula por la energía emitida por los cristales.
En toda la Atlántida, las redes de energía de
cristal, llamadas ‘Posers’, se colocaban en triángulo y
se conectaban mediante una varilla de aleación de oro y cobre bajo
una cúpula esférica que podía angularse para recibir ondas
específicas de energía estelar, solar y gravitatoria.
Éste era el sistema utilizado para suministrar
energía a hogares, oficinas, medios de comunicación, teatros,
fábricas, centros médicos, escuelas y empresas. El sistema Poser
se instalaba en cada estructura y funcionaba a través de cristales
receptores de diferentes tamaños.
ANILLOS CONCÉNTRICOS
Según la descripción de Platón, la
capital central de la Atlántida era una ciudad llamada
Atlantis, situada en el centro de la isla y
rodeada por anillos concéntricos de agua y tierra. La ciudad estaba
diseñada de manera magnífica y era un centro de poder y
civilización. Platón la describió como una ciudad grande y
hermosa, con templos, palacios y canales artificiales.
En España, en 1673, el cronista José
Pellicer de Ossau identifica la Atlántida con la
Península Ibérica, asociando a los atlantes con Tartesos.
Por su parte, en 1922, el arqueólogo alemán Adolf Schulten
retomó y popularizó la idea de que Tartessos fue la
Atlántida, hipótesis que tomó de los historiadores
españoles Francisco Fernández y González y su hijo, Juan
Fernández Amador de los Ríos (1919). Esta teoría también la
sostenía el escritor Fernando Sánchez Dragó.
Anillos concéntricos se han hallado en el Coto
de Doñana en España, en el ojo del Sahara o
estructura Ricart en Mauritania, y dicen que hasta la
antigua ciudad azteca de Tenochtitlán tenía una estructura
parecida, y hasta la ciudad de Cartago tenía forma circular,
pero ello no quiere decir que ninguna de ellas fuera la capital de la
Atlántida, sino más bien una imitación de ella.
Hasta el diseño arquitectónico de la ciudad
del Vaticano dicen que reproduce un antiguo gran templo de la
Atlántida mediante una información extraída de la línea
del tiempo. Nos sorprendería descubrir la gran cantidad de diseños
arquitectónicos actuales que imitan a los que existían en la
Atlántida. Hasta la Torre del Oro en Sevilla
podría ser la copia de una estructura muy antigua.
La descripción de la ciudad incluye detalles
sobre la disposición de los edificios y los canales, así como sobre
la riqueza y el esplendor de la ciudad. Platón afirmó que la
Atlántida estaba gobernada por reyes que descendían de
Poseidón, el dios del mar en la mitología griega. También
mencionó que la ciudad estaba llena de tesoros y riquezas, y que sus
habitantes eran conocidos por su sabiduría y virtud. Sin embargo,
según la narración de Platón, la Atlántida cayó en
desgracia finalmente debido a su decadencia moral y ambición
desmedida. La ciudad fue destruida en un cataclismo natural,
sumergiéndose en el océano Atlántico y desapareciendo para
siempre.
UBICACIÓN
Platón situó a la Atlántida
más allá de las Columnas de Hércules, que se cree que
corresponden al estrecho de Gibraltar. Sin embargo, no se
proporcionan coordenadas geográficas precisas. A lo largo de los
siglos, ha habido muchas teorías y especulaciones sobre dónde
podría haber estado ubicada, algunas de las cuales sugieren
ubicaciones en el Atlántico, el Mediterráneo o en
otras partes del mundo.
Muchas teorías sugieren que la Atlántida
podría haber estado ubicada en medio del océano Atlántico.
Otras hipótesis han situado la Atlántida en el área del
Triángulo de las Bermudas, mientras que otras la han ubicado
en el Mar Caribe o en el Golfo de México.
Otros han especulado que la Atlántida se
encontraba en la región de la Antártida antes de que se
cubriera de hielo. Esta teoría es muy improbable debido a la falta
de evidencia geológica y climática que respalde tal afirmación, y
a la enorme distancia geográfica que separa a la Antártida
del Atlántico norte.
REVELACIONES
Dolores Cannon habló de la caída de la
Atlántida y del Triángulo de las Bermudas y descubrió
una gran cantidad de información a través de su trabajo pionero en
hipnoterapia y regresión a vidas pasadas. Creía que esta antigua
civilización contenía lecciones cruciales para nuestra sociedad
moderna.
En 1940, Edgar Cayce reveló que la
civilización atlante se regía bajo un gobierno teocrático llamado
Ley del Uno, y tenía una tecnología avanzada basada en
cristales de cuarzo, que a su vez dependía de un gran cristal. Sin
embargo los líderes atlantes abusaron del poder de este gran cristal
que los llevó a la extinción bajo las aguas, y los sobrevivientes
llegaron a Egipto donde guardaron su conocimiento dentro de la
Esfinge.
La ubicación propuesta de esta civilización
perdida abarca desde el Sáhara hasta la Antártida e
innumerables lugares intermedios, pero una ubicación real parece ser
el triángulo de las Bermudas donde se localizaron estructuras
anómalas a dos mil metros de profundidad mediante sonar. Se encontró
una pirámide hecha de algún tipo de cristal. Al parecer, las
autoridades detuvieron las investigaciones posteriores.
En 1977, un científico ruso escribió que no
lejos de las islas Bermudas, en el fondo del océano, el sonar
de un barco pesquero había encontrado una elevación muy parecida a
una pirámide. Se organizó entonces una expedición que descubrió
una montaña piramidal a cuatrocientos metros de profundidad, con una
altura de 150 metros. Oceanógrafos estadounidenses descubrieron
pirámides hace veinte años, la superficie de las estructuras era
lisa y estaban hechas de vidrio o de algún tipo de cristal. Nadie
pudo tomar fotografías, pero triplican el tamaño de la pirámide de
Giza.
AZORES
Hacia fines de la edad media se hablaba de
diversas tierras e islas míticas en las latitudes y longitudes del
archipiélago de las Azores: la Atlántida, la Antilla
(o Ante-Isla), la isla de San Brandán, la isla Brasil,
las Siete Ciudades y las islas Azuis.
https://es.wikipedia.org/wiki/Azores
El hecho es que se descubrieron pirámides
sumergidas en las islas Azores, otras al este de Cuba y
en el misterioso Triángulo de las Bermudas, y hasta en las
islas Canarias, pero tabién hay otra teoría geológica que
la situaría en la meseta mesoatlántica por ser la zona de
menor profundidad. En el Atlántico norte, separa las placas
euroasiática y la norteamericana, mientras que en el Atlántico
Sur separa la africana y sudamericana.
La zona menos profunda en el centro del
Atlántico norte se llama la Dorsal Mesoatlántica. Es una cadena
montañosa submarina que se extiende a lo largo del fondo del océano
Atlántico, dividiendo la cuenca del Atlántico en dos mitades. La
Dorsal Mesoatlántica es un ejemplo de una dorsal oceánica, que es
una formación geológica submarina donde se separan las placas
tectónicas.
A pesar de ser una cadena montañosa, la Dorsal
Mesoatlántica es una de las zonas menos profundas del Atlántico
norte. Esto se debe a que están divergiendo las placas
tectónicas que forman la dorsal, lo que significa que se están
alejando una de la otra. En esta zona, el magma asciende desde el
manto terrestre y crea nueva corteza oceánica, lo que hace que el
lecho marino sea relativamente menos profundo en comparación con las
áreas circundantes.
https://es.wikipedia.org/wiki/Dorsal_mesoatl%C3%A1ntica
(*) Periodista