MADRID.- La sucesión de Díaz Ferrán al frente de la CEOE será finalmente cosa de dos, el presidente de la patronal andaluza (CEA), Santiago Herrero, y el de Fomento del Trabajo, Joan Rosell, tal y como ha desvelado el presidente de Ametic, Jesús Banegas, durante su intervención en el desayuno 'Nueva Economía Fórum'.
Según anunció, Herrero encabezará la candidatura conjunta que ambos han pactado para presidir la CEOE, en la que se descarta una adhesión de última hora al proyecto de Rosell.
Banegas señaló que ha decidido poner todos sus apoyos al servicio de "una candidatura que sea capaz de relanzar la CEOE y contribuir decisivamente a que España supere la crisis", a lo que añadió: "Estimo que debe encabezarla mi amigo Santiago Herrero".
Tras cerrarse el plazo para la presentación de candidaturas el pasado día 14, los apoyos conseguidos por Herrero sumaban 44, frente a los 33 logrados por Banegas --Rosell contó con 241 avales--, con lo que esta opción ya se vislumbraba.
Banegas aseguró que esta candidatura conjunta "no es un apaño ni un reparto de poder", sino que responde a la "idea compartida" de que es necesario "obtener una clara mayoría de votos" para acometer los cambios que demanda la patronal.
Aunque el presidente de Ametic avanzó que los detalles de esta candidatura se perfilarán mañana en una rueda de prensa conjunta con Herrero, concretó que si su proyecto es elegido, habrá una reducción en el número de vicepresidentes --actualmente 21 cargos-- y "cada uno se concentrará en aquellas tareas en las que tiene competencia demostrada".
Además, reiteró, como en anteriores ocasiones, que la CEOE debe ser independiente, hasta el punto de sufragar sus gastos sin contar con subvenciones, y debe recuperar el prestigio perdido, poner fin al "estado declinante" de la CEOE y volver a ser el "eje vertebrador" de los empresarios, entre los que también incluyó a los trabajadores autónomos.
Preguntado por si baraja una posible alianza con Rosell, a la que el presidente de Fomento del Trabajo invitó, siempre bajo su presidencia, Banegas la descartó: "Santiago y yo vamos a ir sin duda alguna juntos el día 21 a las elecciones de la CEOE".
A partir de ahí, el presidente de Ametic acusó a Rosell y su entorno de falta de transparencia y de dudosa independencia. Así, denunció "distorsiones en el proceso de elección producidas por la grave inferencia del actual aparato en favor de un candidato que han llamado oficial", en alusión a Rosell.
"Ello pone de manifiesto una tendencia al oscurantismo que confirma que la renovación de la CEOE es hoy más necesaria que nunca", apostilló, antes de añadir: "Ha llegado un punto en el que hay que decir basta".
Asimismo, Banegas puso en duda que Rosell pueda compatibilizar sus intereses como patrono de los empresarios catalanes y como presidente de la CEOE. "Debe ser complicado defender esas dos cosas a la vez, un interés particular y otro general", recalcó.
Además, a raíz del supuesto impago de las cuotas de la CEOE por parte de Fomento del Trabajo, Banegas garantizó que Ametic ha cumplido con sus aportaciones y avanzó que el proyecto compartido con Herrero impulsará medidas de transparencia en la patronal para que estas situaciones "ni se planteen" en el futuro.
Por otra parte, preguntado por cómo valora el 'plantón' de la patronal madrileña CEIM, que tras prestar su apoyo inicialmente a la candidatura de Banegas, selló su adhesión a Rosell hace dos días, el presidente de Ametic se limitó a respetar la decisión y a defender la autonomía de todas las organizaciones.
Respecto a la situación de la economía española, apostó por propiciar una "metamorfosis" del sistema productivo para dar entrada a dos nuevos protagonistas: la innovación y la internacionalización de las empresas.
Respecto a la reforma de las pensiones, no entró a valorar los acuerdos perfilados en el seno del Pacto de Toledo, pero consideró que de no concretarse, "el Gobierno debería hacer lo que tiene que hacer", gobernar.
En el plano laboral, Banegas propuso "modernizar" el sistema de protección por desempleo, dar más peso a las empresas privadas de colocación, establecer un contrato único indefinido con indemnización por despido progresiva, atajar el absentismo laboral y desjudicializar las relaciones laborales.