En total, se prevé actuar sobre más de 710 hectáreas de zonas altamente degradadas por la antigua actividad minera en La Unión y Cartagena.
La inversión prevista alcanzará los 110,8 millones de euros, según la actualización de esta hoja de ruta anunciada el pasado 18 de abril por la vicepresidenta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, lo que supone un incremento de más de 70 millones de euros respecto al presupuesto inicial, lo que garantizará la máxima ejecución posible.
La restauración hidrológico-forestal intervendrá sobre 430 hectáreas y complementa la restauración ambiental de otras 285,5 hectáreas, correspondientes a las instalaciones mineras abandonadas. Esta última actuación cuenta con la DIA favorable desde noviembre de 2023 y está previsto que las obras en El Llano del Beal comiencen antes del verano.
Estos proyectos en la Sierra Minera, a ejecutar con la Dirección General de Biodiversidad, Bosques y Desertificación del MITECO, se complementan con las actuaciones que esta unidad ha diseñado para el Cinturón Verde en la cuenca sur y que estarán conectadas a través de la intervención ejecutada por la Confederación Hidrográfica del Segura en las ramblas mineras.
En su conjunto, estas actuaciones revisten una gran importancia no sólo para el Mar Menor, sino para la mejora de la calidad de vida de las personas al reducirse la carga contaminante y mejorar el entorno paisajístico, desde las cumbres hasta las zonas urbanas ubicadas junto a la laguna.
Restauración e integración paisajísticas
Los trabajos contemplan la realización de accesos a las instalaciones de residuos mineros abandonados, así como la modificación de la topografía del terreno mediante la apertura de bermas en talud; la restauración del perfil de los taludes degradados; la restauración de terrenos llanos mediante subsolados y los movimientos de tierra.
El MITECO también procederá a la fitoestabilización de los suelos mediante aporte de capa de tierra vegetal procedente de otras áreas, con posterior plantación y siembra de especies vegetales adaptadas al clima y al tipo de terrenos existente en la zona.
En el proyecto se contempla también la recuperación de suelos degradados mediante el empleo de tecnosoles, además de ejecutar pasos salvacunetas y arquetas.
Un pilar importante de la actuación será la corrección hidrológica de cauces, obras transversales a los cauces (diques, albarradas y trampas de sedimentos) y obras de protección hidrológica (caballones, zanjas o acequias).
En cuanto a la restauración del paisaje forestal y su integración paisajística, la Dirección General de Biodiversidad, Bosques y Desertificación del MITECO aplicará tratamientos silvícolas, complementados con la eliminación de especies exóticas, en las áreas donde se mantiene el arbolado y la vegetación, funcionando así como sumideros de carbono.
La fitoestabilización, las plantaciones de arbolado y matorral mediante ahoyado, la siembra manual e hidrosiembras de especies herbáceas y la eliminación de especies invasoras son otras de las actuaciones incluidas en este proyecto.
Finalmente, el MITECO utilizará biorrollos para estabilizar los taludes, escolleras en taludes para sujetar o soportar el corrimiento de tierras, y el sellado y vallado de pozos de ventilación.