MADRID.- España revisará de forma pionera el papel de la mal llamada Armada Invencible (en realidad es la Gran Armada enviada con planes de invasión a Inglaterra por Felipe II en 1588) con un Congreso científico internacional. Participan especialistas tanto británicos como irlandeses y españoles y constata cómo se han roto las barreras entre las historiografías, gracias al esfuerzo común. El Museo Nacional de Arqueología Subacuática (Arqua) de Cartagena será sede de este importante evento entre el 22 y el 27 de abril. Su director, Iván Negueruela, coordina el encuentro, cuenta hoy Abc.
Titulado «La Armada Española de 1588 y la Contra Armada Inglesa de 1589. El conflicto naval entre España e Inglaterra, 1580-1607», aportará una visión renovada y científica. Para el académico Hugo O’Donnell y Duque de Estrada, que preside el comité científico y ha dirigido la Historia Militar de España, es una cita «fundamental porque estamos hablando de un esfuerzo común consecuencia de un fenómeno y de una inquietud de ambos mundos culturales, el anglosajón y el hispánico, entre los que, a partir de ese momento, puede decirse que deja de existir de una manera general esa barrera y esa incomunicación secular entre investigadores y fuentes de ambos orígenes».
¿Cuándo cambiaron las tornas? Coincidiendo con la exposición de 1988 en el Museo Nacional Marítimo de Greenwich. O’Donnell participó en aquella muestra e indica que «desde 1988, y potenciada por la Armada Española, se viene desarrollando una gran labor tras haberse conseguido que en aquella exposición sobre la Armada, absurdamente llamada Invencible, la historiografía anglosajona, y nuestra propia historiografía diesen un vuelco en sus apreciaciones y tópicos, apoyados por un deseo revisionista existente en ambos ámbitos. El tratamiento del episodio y la exhibición británica de objetos de aquél año estuvo presidida, en contra de muchos pronósticos, por el rigor en el análisis y la fidelidad a la historia».
Contra la leyenda negra
Fue obra un gran equipo que ha visto morir a José Alcalá-Zamora, José Ignacio González-Aller, José Luis Casado y Alberto Linés. Por ello, O’Donnell ha buscado el relevo entre historiadores como Enrique García Hernán y Manuel Gracia Rivas.
«Al otro lado, Geoffrey Parker, Colin Martin, Declan Downey, Patrick
Williams… siguen en la brecha de la objetividad histórica, tan alejada
de una supuesta incapacidad organizativa española, del providencialismo
ciego y ultramontano y de una inferioridad cultural y moral inexistentes
en que se sustentaban manidos pero muy arraigados prejuicios».
De
hecho, Colin Martin, uno de los senior de la
investigación arqueológica de la Armada, pronunciará una conferencia. En
una antigua
entrevista con Abc, ya mostraba su pasión inacabable: «No habrá jamás nada como la gran Armada»
Historiadores y arqueólogos vuelven a estar unidos frente a la Armada y la investigación de sus restos. «Ya pasó el tiempo del raquero y del saqueador de pecios y también del cronista áulico -señala O’Donnell-, y se abre una etapa de colaboración inexcusable a la hora de ampliar nuestros conocimientos y de desmitificar».
Historiadores y arqueólogos vuelven a estar unidos frente a la Armada y la investigación de sus restos. «Ya pasó el tiempo del raquero y del saqueador de pecios y también del cronista áulico -señala O’Donnell-, y se abre una etapa de colaboración inexcusable a la hora de ampliar nuestros conocimientos y de desmitificar».
Para el
académico de la Historia, España debería ser más proactiva en la
arqueología subacuática: «Me consta que no sería tan difícil, dada la voluntad que existe entre las autoridades académicas irlandesas de reconstruir una historia que
nos es común, con respeto hacia los hechos, los protagonistas y los
restos que nos dejaron. Hablo con conocimiento de causa, porque me
relaciono con ellas con frecuencia».
Ya solo falta que el Minsiterio de Cultura, organizador del encuentro, dé un paso más en la buena dirección.
Ya solo falta que el Minsiterio de Cultura, organizador del encuentro, dé un paso más en la buena dirección.