BARCELONA.- La recuperación de la economía no se está reflejando en un crecimiento claro de las retribuciones de los empleados, según el informe sobre la evolución de los salarios que
elabora cada año la consultora ICSA Grupo y EADA Business School, según la versión de La Vanguardia.
A
diferencia de los directivos y los mandos intermedios, cuyos ingresos
aumentan, los de los trabajadores en posiciones más bajas siguen
estancados. No obstante, los avances, en los grupos que se dan, van a un
ritmo menor que el PIB, que ha crecido en los últimos cuatro años en el
entorno del 3% anual.
Así, concluyen los autores, el reparto de la riqueza que se está generando no se está repartiendo de manera equitativa.
El estudio, fruto del análisis de 80.000 datos
salariales en toda España, fija la retribución media de los empleados
del 2018 en 22.819 euros anuales brutos, un 0,11% más que el año
anterior. Este aumento se concreta en sólo 26 euros.
En cambio, los
mandos intermedios mejoran sus salarios en un 2,65% hasta un promedio de
41.597 euros (1.072 euros más) y los directivos un 2,48%, hasta 81.059
euros, lo que supone un incremento de 1.962 euros.
“Es preocupante que
un crecimiento continuado durante cuatro años no consiga mejorar las
retribuciones y aún estemos por encima de los tres millones de parados”,
lamentó ayer Ernest Poveda, presidente ICSA, durante la presentación del informe.
En la misma línea, el profesor de EADA Jordi Costa añadió
que “se pueden pedir sacrificios a los trabajadores cuando las cosas
van mal, pero cuando van bien se debe trasladar la riqueza”.
Si se considera la inflación desde el año previo al inicio
de la crisis, el 2007, el informe muestra cómo los empleados todavía no
han recuperado el poder adquisitivo que tenían. Mientras que los
salarios han acumulado un crecimiento en estos diez años de un 16,50%,
el coste de la vida ha aumentado un 16,80%, tres décimas más.
En cambio,
las retribuciones de los mandos intermedios han crecido un 19,26%
(+2,46%) y las de los directivos un 17,98% (+1,18%).
La evolución dispar de las retribuciones
obedece en gran medida, según Poveda y Costa, a que se aplican
diferentes modelos. Los directivos y los mandos intermedios cuentan con
variables según resultados u objetivos que han impulsado una mayor
subida que a los empleados, que suelen indexar sus sueldos al IPC.
Para
corregir esta situación, defienden extender los factores variables al
conjunto de trabajadores, lo que requiere, destacaron, un cambio de
mentalidad en los sindicatos y en el empresariado. Fruto de estas
diferencias la distancia entre los distintos colectivos es mayor en las
empresas de gran tamaño.
El comercio y el turismo son los peores remunerados en los tres niveles
salariales. En el extremo opuesto se sitúan la banca y los seguros,
encabezando la lista en todas las categorías. Madrid, Catalunya y
Navarra –por este orden– son las comunidades con salarios más altos
entre el personal directivo y mandos intermedios. Los empleados mejor
pagados están en Navarra, Madrid y Catalunya.