BARCELONA.- Los trabajadores de Caixabank, que tenían previsto inicialmente movilizarse el próximo día 22 frente a las Torres Kio, donde está la sede del banco, también lo harán en la avenida Diagonal de Barcelona y en las ciudades del país donde tienen más representación.
¿La razón? El hartazgo de la plantilla, que ha decidido salir a la calle a protestar después de pedir al consejero delegado, Gonzalo Gortázar y al director de recursos humanos, David López, mediante distintas cartas que rebajen la presión comercial para poder alcanzar los objetivos sin desatender a los clientes.
Según informan fuentes sindicales a Economía Digital, enviaron cartas a los dos ejecutivos a principio de año y todavía no han recibido respuesta, por eso han decidido actuar. En ellas pidieron que las salidas por el ERE fueran escalonadas “para evitar el caos” que están viviendo en las oficinas, ya que ahora cuentan con los mismos clientes, pero con menos personal para atenderlos.
Hay que recordar que Gortázar ya adelantó en la presentación de resultados que el objetivo del banco es, que a principio de marzo se hayan producido la mayoría de salidas. El ERE afectó a 6.452 personas y hasta la fecha ya han salido de la entidad 3.900 empleados.
La previsión es que el próximo 1 de marzo lo hagan 555 personas más, de manera que ese mes se habrán completado el 70% de las bajas, y el resto irá saliendo del banco en el segundo semestre.
El propio CEO ha presumido en sus últimas intervenciones de la velocidad a la que han conseguido hacer la integración de Bankia, tanto la del personal, como la de oficinas o la tecnológica, asumiendo que en marzo (cuando se cumpla un año de la fusión) ya estará casi completada.
Pero a la plantilla no le gusta tanto esta velocidad. De hecho, denuncian que la dirección de Caixabank solo ha dado seis meses a los clientes procedentes de Bankia para adaptarse a sus cajeros automáticos y canales digitales. Pues solo durante ese tiempo, desde el 3 de enero y hasta el 30 de junio, habrá un equipo de 1.500 trabajadores ofreciendo esta ayuda en las oficinas.
Un tiempo que consideran insuficiente, según explican, por las quejas que están recibiendo continuamente los que trabajan en una sucursal física. “Hay hasta agresiones”, aseguran, sobre todo de una parte de la clientela a la que se le ha cambiado la forma de relacionarse con su banco “de un día para otro”.
Y en este sentido expresan que los mayores son un grupo importante de afectados, pero no todos. “Hay muchas personas que no están adaptadas a la digitalización”, aseguran. Y a eso se suma que su banco, como el resto de bancos, ha limitado los horarios de atención al público para el pago de recibos o impuestos, penaliza la retirada de efectivo en ventanilla y cobra comisiones por mantenimiento de cuenta si no se tiene más de un producto contratado con el banco, lo que aumenta considerablemente el enfado de los clientes.
Por eso, los trabajadores del banco catalán también exigen a la dirección que rebajen la presión comercial que tienen para vender, porque al final los más afectados están siendo los clientes que acuden a la oficina, a los que no pueden atender bien. Pero también ellos, quienes denuncian que la situación “es insostenible”.
“No entienden la realidad en la que nos encontramos, sea sobrevenida o provocada: integración de oficinas, plantilla pendiente de irse por el ERE, gente que no sabe en qué oficina estará al día siguiente, plantilla a la que no se ha podido enseñar el sistema operativo de Caixabank y se le pide que esté a pleno rendimiento” indican en unas de las misivas.
Por este motivo los sindicatos mayoritarios, CCOO, UGT y SECB, han decidido salir a las calles (como hicieron con el ERE para evitar despidos forzosos) y pedir al banco “coherencia entre los medios que tenemos, la atención al cliente y los objetivos que nos exigen”. Este miso miércoles se han reunido para determinar en cuantas ciudades saldrán a protestar el día 22.
Así, se ha acordado que las movilizaciones también se harán en Valencia, Sevilla, Bilbao, Burgos, Las Palmas, Tenerife, Pamplona, Palma de Mallorca, Murcia y Toledo, además de Madrid y Barcelona, a partir de las 17:30 horas.