Dos semanas después de presentar públicamente las 110 medidas con las
que el partido socialista anunciaba su presentación a las elecciones
del 28 de Abril, junto con su eslogan electoral (“Haz que pase”) entre
las que no aparecía, sorprendentemente, ninguna referencia al problema
de Cataluña, algo que provocaba una larga y persistente polémica, este lunes se ha hecho público el programa electoral completo que ocupa 290
páginas y en el que se incluye no solo el tema territorial sino el
desarrollo de otros temas como la energía, la educación, la Memoria
histórica, prevención integral del suicidio o medidas para combatir la
despoblación de la España vacía…
En ese documento aparece por primera vez cual es, en estos momentos,
la política oficial del partido frente a la situación catalana y, sobre
todo, frente a la etapa que se abre después de las elecciones generales
en la que ya se ha producido distintas ofertas de pactos electorales por
parte del independentismo catalán, especialmente de Esquerra
Republicana de Catalunya y Junts X Catalunya.
Estos últimos, avalados
por un escrito de los dirigentes del partido que se encuentran en
prisión y que están siendo juzgados por el Tribunal Supremo: Jordi
Sánchez, Joaquín Forn, Josep Rull y Jordi Turull .
En ese programa electoral, el PSOE se compromete a dar un “nuevo
impulso al autogobierno”, sin ninguna referencia a la
“plurinacionalidad” del Estado español que fue el caballo de batalla
dentro del partido para quienes pensaban que se había ido demasiado
lejos aunque esa apuesta a favor de la nación de naciones fue una de las
batallas dentro de la lucha por el liderazgo del partido.
Ese “nuevo impulso al autogobierno” dentro de la Constitución es la
base de trabajo con la que piensa abordar el PSOE el contencioso
catalán, frente a las exigencias del independentismo que ya han aclarado
que la etapa del autogobierno ya ha pasado y que Cataluña, tras el
Referéndum del 1 de Octubre y de la DUI (Declaración unilateral de
independencia) está en otro estatus político , tesis defendida tanto por
Esquerra como por Puigdemont, aunque el partido de Oriol insiste en
rechazar la unilateralidad.
“Ni desde el derecho de autodeterminación,
ni desde un estado de excepción territorial con carácter permanente a
través del artículo 155 de la Constitución puede construirse el futuro”,
señala el documento programático que, en ningún momento, hace
referencia al llamado derecho de autodeterminación ni por supuesto a un
Referéndum de independencia.
En ningún párrafo se habla de una reforma de la Constitución para
avanzar hacia un Estado federal, como sí defendían en su oferta para las
elecciones de 2015 y 2016. El texto hecho público se limita a recordar
que su postura está recogida en las Declaraciones de Granada (2013) y de
Barcelona (2017) en las que sí se apuesta como solución definitiva por
la reforma constitucional y el Estado federal para “avanzar hasta
reconocer plenamente su carácter plurinacional”.
“Si nuestras propuestas
(se refiere a la plurinacionalidad) hubieran sido aplicadas no nos
encontraríamos en la situación actual pero en cualquier caso el modelo
territorial del PSOE continua siendo el único modelo viable para superar
la crisis”.
Los socialistas defienden que la España real reconoce “la diversidad
en la unidad” y a las comunidades autónomas como “los principales
garantes de la cohesión social”. Pero asegura que aspira a un
“funcionamiento más integrado del modelo, de forma que la mayoría de la
población de todos los territorios se sienta partícipe”.
“La España de
las autonomías debe seguir avanzando hacia un modelo de Estado cada vez
más capaz de integrar la pluralidad y en el que la solidaridad, la
igualdad y la solidaridad sean valores compatibles”. Pero, a la vez,
sostienen “reivindicamos el papel del Gobierno central en la efectividad
de la igualdad y la cohesión, desde la lealtad al ejercicio de las
funciones que la Constitución habilita a las comunidades autónomas”.
(*) Periodista y economista
No hay comentarios:
Publicar un comentario