MADRID.- La Costa Mediterránea es la zona que ha registrado en España los mayores ajustes en el precio de la vivienda, con un descenso del 6,7 por ciento en febrero, según se desprende del índice de Tasaciones Inmobiliarias (Tinsa).
De esta forma, los ajustes acumulados desde los precios máximos alcanzados antes de la crisis oscilan desde el 27,2 por ciento registrado en la Costa Mediterránea hasta el del 16,1 por ciento registrado en el resto de municipios.
Por su parte, en el mes de febrero se ha producido un recorte del 5,4 por ciento en las áreas metropolitanas, y en las capitales y en las grandes ciudades un descenso del 5,2 por ciento.
Por contra, los descensos más moderados se registraron en Baleares y Canarias, donde la vivienda bajó un leve 0,8 por ciento en el segundo mes del año en comparación a un año antes. En el resto de municipios, la caída de precios de los pisos fue del 3,3 por ciento y, por tanto, también inferior a la media nacional.
A nivel nacional, el precio medio de la vivienda descendió una media del 4,5 por ciento el pasado mes de febrero en comparación con el mismo mes de 2010, con lo que acumula un ajuste del 19,5 por ciento desde el inicio de la crisis.
La caída del precio de los pisos mantiene así su tendencia en los dos primeros meses de 2011, después de que cerrara el ejercicio anterior con una reducción del 3,9 por ciento, dado que en enero se anotó una caída del 5 por ciento.
Tinsa considera que el mercado de la vivienda ha superado el efecto que en 2010 le produjeron los cambios fiscales para verse influenciado por nuevos factores "que cobrarán protagonismo en los próximos meses", como son el repunto de la inflación y el incremento de los tipos de interés.
Para la firma de tasación, la inflación, de mantenerse en la actual tasa, podría producir una tendencia plana o de ligero descenso del valor nominal de los inmuebles, "una bajada más acusada del precio de la vivienda en términos reales".
En cuanto a los tipos de interés, considera que, de confirmarse su aumento, se traducirá en un aumento del esfuerzo financiero que las familias realizan para comprar una vivienda, "o sencillamente para continuar pagando el crédito hipotecario".
2 comentarios:
Si es que hasta los ingleses que vinieron a la sombra del ladrillo se quieren volver a su país, con lo que hay mucha más vivienda en el mercado, y mucho menos comprador. Listillos, que sois unos listillos.
Estos son los resultados de la codicia sin límites, adorando al becerro de la especulación.
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