El sindicato procurará hacer un diagnóstico "correcto y riguroso" sobre el origen de esta situación, que en palabras de Ferrer, "es una crisis del modelo económico imperante en los países desarrollados, inspirado en el neoliberalismo, que basa su crecimiento evitando la regulación en el mercado".
A esto, el secretario de Acción Sindical añadió que la especulación, por otro lado, ha generado un "descontrol de materias primas y del petróleo, que afecta a nuestra economía".
Por otro lado, como lamentó Ferrer, "se sigue sin apostar por la industria y la tecnología, así como por el crecimiento educativo y formativo", continuando con un crecimiento basado en el ladrillo y en el consumo.
En ese terreno, el sindicato planteó cuestiones que se abordarán en este Consejo, como la exigencia a los poderes públicos, de proteger a los desempleados, "porque los trabajadores no son responsables".
Asimismo, advirtió de que "no son justificables los intentos de destrucción de empleo masivos", para lo que la organización demanda "mayor rigor" en el control en los Expedientes de Regulación de Empleo.
En este periodo, en palabras de Ferrer, es "necesario" mejorar la capacidad adquisitiva de los salarios, por lo que, rechazando la idea de que los salarios "sean los paganos de esta situación", el sindicato desarrollará un campaña explicativa para los trabajadores.
Desde UGT "oímos cantos de sirenas de la otra parte del Atlántico, que hablan de un apoyo a las empresas", pero sin dejar de tener en cuenta esta opción, como defendió Ferrer, "continuaremos exigiendo responsabilidad a los empresarios, con el fin de proteger el empleo".
A preguntas de los medios acerca de un posible recrudecimiento de la crisis económica, Ferrer adelantó que esas previsiones pueden cambiar, al tiempo que concibió la crisis en un marco "difícil de cuantificar", donde lo que interesa a la sociedad no son los aciertos en diagnósticos, sino situar el origen para aportar medidas.
En lo referente al inicio de la situación económica, el secretario de Acción Sindical sentenció que si viene de fuera, "no podemos pretender que las soluciones lleguen de aquí, sino trasladarlo a la Unión Europea mediante la Confederación Europea de Sindicatos".
UGT, a través de la Confederación, viene reclamando un cambio en las políticas del Banco Central Europeo que, a juicio de Ferrer, tras el "frustrante" pasado Consejo de ministros de Economía y Finanzas, "no puede seguir empecinado en mantener altos tipos de interés", sino que, al contrario, "debería estar contribuyendo en la senda del crecimiento".
Por último, Ferrer propuso relanzar las políticas industriales y tecnológicas a nivel nacional, y en caso de que fuera necesario, se trasladarían al ámbito europeo "puesto que para salir de esta crisis, debemos hacerlo con políticas industriales basadas en la mejora del empleo, evitando así, que las familias de los trabajadores paguen las consecuencias".