Pero su verdadero interés ahora está en completar la costa con alcaldes propios y/o afines. Una vez Lorca en su poder casi por sorpresa, ahora toca controlar el otro municipio donde se encuentra la Marina de Cope y los compromisos inconfesables sobre ella contraídos en su día por el propio presidente para "mayor gloria" de su hermano Carlos y de su tocayo.
Por eso parece que ha sido en Águilas donde Valcárcel ha echado el resto la semana pasada, hasta presentarse en la localidad a negociar directamente con el lider del MASd, Pedro Gil, obviando así a su candidato y alcalde, Juan Ramírez, una vez que el conocido pronunciamiento de la Audiencia Provincial de Murcia puede presuponer ya por donde van a ir pronto los tiros del magistrado-juez de 1ª Instancia con "Charqueles" y el concejal López a la cabeza.
No se descarta, llegado el caso, incluso la prisión preventiva si se prueba el delito de cohecho, ante el posible riesgo de fuga a Suiza del todavía primer edil aguileño, tan imputado como el propio Gil al que ahora busca Valcárcel con falsas promesas de impunidad si se inclina a formar gobierno municipal con el PP y pese a la que se avecina en los tribunales murcianos. Gil sabe que será relativamente valioso hasta que lo trinque un juez y Valcárcel le vuelva a hacer la rosca a su sucesor ¿o sucesora? cara a una alianza posterior con Catalina Lorenzo, y ya sin los tres imputados en presencia municipal por culpa de La Zerrichera.
Valcárcel se encuentra crecido, hasta la desmoralización del fiscal jefe Bernal, por los votos recibidos, creído de que aseguran de sobra su impunidad en el "caso Jenni", y ahora deja sin esperanza de sucesión a medio plazo al diputado autonómico electo Gómez Fayrén. Éste, como alma en pena ante tan inesperados buenos resultados electorales, ha ido "llorando" la semana pasada de despacho en despacho de los poderes económicos, no tan ocultos, que le aseguraron en su día la presidencia de la Comunidad Autónoma a partir de las próximas elecciones generales y una vez Valcárcel dimitiese o posteriormente ser elegido senador por la Asamblea Regional bajo la presión de eventuales dificultades personales en los juzgados en caso contrario. Pero, ¿quién le pone ahora un cascabel a ese gato tan crecido y pendenciero?
Se busca con urgencia una salida políticamente digna... pero para Gómez Fayrén. Se piensa por esos mismos poderes, que presionan sobre Valcárcel, en la presidencia de la Asamblea Regional para que la "espera" no se torne en desesperación y la teórica sucesión, si llega, parezca lo más natural. Alguien le ha tomado el pelo a Antoñico pensando que el desgaste del presidente era mucho mayor del que luego han demostrado las urnas. Ahora toca no dejarlo tirado y buscar una salida honrosa...pero para él. La feliz idea ha venido ¿de la mano de Carlos Egea o de Clemente García? para que Valcárcel no se pueda negar a considerarla.
Esa idea encuentra eco hasta en Adrián Ángel Viudes, verdadera "antena" de Egea en Cartagena, y quien dio la alarma en su día a San Esteban sobre las flaquezas cartageneristas de Celdrán, quien habría ya perdido mucha de la confianza política depositada en él por Valcárcel. Sólo ahí se explica el incendiario discurso del presidente en funciones del Parlamento murciano en el Día de la Región, en pleno corazón de la ciudad de Murcia, al objeto de recoger públicamente velas y contraer méritos suficientes como para tratar de salvar el pescuezo frente al "lobby" de la capital, sabiendo de antemano del potencial "asalto" huertano ya en marcha.
Mientras tanto, surgen nuevos "delfines" para el día en que Valcárcel decida voluntariamente marcharse. El nuevo alcalde de Lorca, Francisco Jódar, se perfila como uno de los posibles sucesores, siempre y cuando su gestión municipal sea brillante y con proyección regional. Ser de Lorca ya es un grado para que la sucesión no lo sea a favor de Murcia o de Cartagena, llegado el caso. Claro que el fiscal Martínez o el ex rector Ballesta, también podrían estar en esa misma situación y son los otros dos nuevos "delfines" señalados por el dedo presidencial para cortar la salida al murciano Gómez Fayrén, y que no llegue por edad y desgaste político, amén de por falta de suficientes apoyos dentro del PP regional.
Pero, ojo, atención ahora a Eduardo Contreras, nuevo diputado autonómico -y por tanto en el bombo de la sucesión-, aparte de alcalde otra vez de Molina de Segura, por goleada frente a uno de los peores recuerdos del pasado socialista murciano, y el que más pronto se ha revuelto contra Saura y su renovación inconclusa dentro del PSRM. Eso pasa cuando el maestro cetrero alimenta cuervos pero cada uno puede picar luego de su propia carnaza. El mismo consejo sirve para mi amigo de Benalúa con los depredadores que lo merodean, hasta de noche, llegados desde las cotas más bajas de la ribera media del río. ¡ Cuidado, te sangran!