Periodista nacido en Murcia, se licenció en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid, donde también ha cursado estudios de Ciencias Políticas y luego de doctorado y postgrado, al igual que en la Universidad Politécnica de Madrid y en el ICADE de la Universidad Pontificia de Comillas.
Profesor asociado en la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Murcia ha estado vinculado, desde hace años, a la Comunidad en medios como "La Economía de la Región de Murcia", "Levante", "La verdad", "Información", "Europa Press", "Antena-3", "Diario-16" y "El Mundo". Además, es fundador y director de los "newsletter" Alicante/Confidencial y Murcia/Confidencial, colaborando actualmente en diversas publicaciones europeas y americanas, en alguna de las cuales ejerce como consejero editorial.
En esta entrevista para "Arco Mediterráneo", recientemente incorporado a la corporación, nos cuenta el funcionamiento de esta iniciativa, la situación de los Medios de Comunicación y su posición sobre los sucesos político-económicos más destacados de la actualidad murciana.
Carmen M. Mulleras/MURCIA
¿Cuándo surgió la idea de crear la “Corporación Azahar Media”?
Hace unos meses, y ante la proliferación de medios independientes en la Comunidad Valenciana y Región de Murcia, uno de ellos, digital, vegamediapress.com, me planteó la idea de agruparnos en un gran centro de beneficios, una especie de paraguas para afrontar conjuntamente cuestiones que nos afectan a todos, tanto en el plano de la gestión, como en la mejora de contenidos, banco de recursos humanos, la implementación de nuevas tecnologías de la información o los aspectos políticos y legales. Todos coincidíamos, además, en que nuestra credibilidad, influencia y frescura tenía mucho que ver con situar a la audiencia por encima del puro beneficio económico, una vez cubiertos los gastos ordinarios de explotación del medio.
Después de pensarlo varios días y aportar algunas ideas, acepté integrar la publicación que dirijo, “Economía Avanzada”, y semanas más tarde su presidencia, entendida esa función como de coordinación de la fase de puesta en marcha durante sus tres primeros años. Con la excepción de esas economías de escala, cada medio integrante conserva su personalidad jurídica y operativa, y una línea editorial propia.
Estamos hablando de un matrimonio de conveniencia por afinidad y necesidad profesional-empresarial. Y, o lo hacemos así, o no sobreviviremos fácilmente ante la presión creciente de los intereses creados y de las mafias, que tratan aquí de hacerse con el poder político comprándolo todo. Por pura higiene democrática yo acepté este reto de poner de acuerdo a quienes no pertenecen a los grandes complejos mediáticos foráneos, e hipotecados por su necesidad de arrojar cada año grandes beneficios para sus accionistas, aún a costa de tener que aplaudir al inepto y cubrir al corrupto simplemente porque corren con todos los gastos de la debida apariencia.
¿Cómo estará organizada?
Nunca de forma jerárquica sino horizontal, con un “primum inter pares” para su representación legal y portavocía, y de forma paritaria por lo que respecta a sus integrantes Todos tienen los mismos derechos y obligaciones. La idea es conformar la “Corporación Azahar Media” a base de unos comités de dirección especializados en los diversos campos que vayan surgiendo y sean susceptibles de alcanzar una autonomía con respecto de los demás. La idea es que sea muy participativa y se trasvasen avances de unos medios a otros y, a la vez, todos avancemos a un tiempo en el servicio debido a la sociedad civil con la mejor calidad en contenidos en función de los recursos de cada cual. Unos podrán reproducir recíprocamente, y sin cargo, todos los de los otros. Pero eso también se puede solucionar si la “Corporación Azahar Media” hace de puente entre algunos de los proyectos mediáticos y sociedades de capital-riesgo ya dispuestas a entrar para hacer viable una idea o sanear otras en marcha sin interferir en su línea editorial, aunque se pueda llegar a participar en la gestión.
Esa unión será muy positiva para todos nosotros pero mucho más para la Opinión Pública porque se garantiza la primacía de medios independientes y que sea mucho más difícil el control absoluto de la información periodística, tal como ocurría en la Región de Murcia hace tan sólo una década a través de una entidad de ahorro. Ese control oculto ya no se puede permitir en una verdadera democracia europea del siglo XXI y existiendo algo como es Internet. Ese juego contra la ciudadanía era un fraude al sistema y había que corregirlo con el ejercicio de una verdadera libertad de prensa y expresión de los periodistas sin bozal.
Qué requisitos serán necesarios para pertenecer a la “Corporación Azahar Media”?
Ser un medio independiente, local, comarcal o regional, honesto, progresista, profesional, libre… y sin fines políticos o económicos. Debe tener una pura vocación de servicio a su entorno social mayoritario o sectorial. Y mostrarse de acuerdo en participar, en función de sus posibilidades, en el mantenimiento para recibir a cambio unas utilidades mucho más valiosas que, tal vez, no podría obtener en solitario. Hay que acreditar, sobre todo, la independencia y la profesionalidad. El resto viene por añadidura si sus editores son coherentes.
Ya han aceptado formar parte medios digitales, convencionales, revistas profesionales, emisoras de radio y televisión. Por lo que respecta a la Región de Murcia tenemos medios de la Vega Media, el Noroeste, Cieza, Lorca, Mazarrón, Águilas y Murcia. Y pronto entrarán otros del Mar Menor, Cartagena y el Altiplano. Estamos escuchando con atención a todos los que se han mostrado interesados en formar parte, y analizando con lupa si tienen algún aspecto incompatible con el espíritu que nos guía a los demás. Se trata de que ningún medio fundamental esté incomodo con otro más accesorio o dudoso. No pueden formar parte, por ejemplo, nada más que pequeños medios privados y en función de una trayectoria alejada de cualquier tipo de pesebres.
A largo plazo, ¿cree que existirá una incorporación de medios digitales?
Ahí está todo su futuro. Precisamente el buque insignia de la “Corporación Azahar Media”, aquí va a ser muy pronto un periódico digital continuo, “Murcia 24 horas”, en cuyos contenidos podrán participar periodistas de todos los medios integrados. Va a ser la síntesis diaria de un espíritu común para poder llegar permanentemente a toda la audiencia de la Región y así despertarla, poco a poco, de la anestesia que se le ha venido suministrando para evitar tuviese despejada la mente a favor de poder formar un criterio claro y compartido, que alimentase un debate regional que ahora sí que está en sus comienzos. En ese proceso necesario para oxigenar nuestra democracia regional, creo que el conjunto de medios integrantes de la “Corporación Azahar Media” ya viene jugando un papel pedagógico esencial. Más anestesia sólo se podrá impedir con la proliferación de más medios digitales, contradictorios y de contraste.
¿Qué importancia tienen los medios de comunicación de la Región?
Relativa en el conjunto nacional. Nuestra prensa más convencional, las cuatro o cinco gacetas rebajadas de fuerza por la democracia financiera que las sustenta, se está apagando y no sirve absolutamente para nada en una sociedad avanzada como la que ya tenemos encima. La ciudadanía no perdonará su, más o menos, largo engaño y, precisamente por eso, están condenadas a desaparecer todas en una década ante una prensa digital muy capilar y diversa, que no necesita de esas grandes inversiones que terminan por crear dependencias inconfesables en contra de los derechos constitucionales de la gente a informarse desde la veracidad y la libertad.
Ahora es cuando los medios de comunicación murcianos independientes sí se han convertido en una referencia nacional, precisamente por las condiciones socio-políticas tan adversas en las que ha nacido y se han desarrollado, y que han servido de ejemplo para iniciativas en otras regiones, caso de Andalucía, Castilla-La Mancha, y Comunidad Valenciana, sobre todo.
¿Qué futuro político-económico augura para nuestra Comunidad?
En lo político ya veo en el horizonte una normalización democrática. La izquierda, tras purgar durante una década sus errores anteriores, se está renovando gradual y generacionalmente. Debe llegar en mejor condición a las elecciones autonómicas y municipales de 2007 porque todavía carece de liderazgo. Pero no debe ser frenada en la regeneración interior por los fantasmas de su pasado; si sucumbe, está perdida. Su electorado natural, y el proveniente del centro más progresista, están esperando gestos de verdadero cambio interior para otorgarle definitivamente su apoyo electoral. La vanguardia social le está haciendo gran parte de un trabajo de oposición pero espera correspondencia sin titubeos o miedos a los poderes no democráticos. Debe demostrar más coraje en la Asamblea Regional e infundir confianza a la inversión productiva. Le queda sudar mucho más la camiseta y ser determinante con la corrupción propia.
La derecha está, precisamente, arruinada por la corrupción, se ha vuelto extrema y está sentenciada por la sociedad civil. Entregada sin condiciones al ladrillo y a la especulación, secante de la economía y el empleo de calidad, corre ahora hacia atrás movida por la tendencia imparable de las encuestas electorales. Lleva perdidos veinte o treinta puntos a favor de sus adversarios. Está pendiente de la Fiscalía y seca de propuestas políticas interesantes para llegar al año 2010. Se ha “ahogado” en el agua para todos y se ha estrellado frente al “Murcia no se vende”. Es de compadecer su líder (?), desprestigiado por faltar reiteradamente a la verdad, y que ya no dice nada a nadie con un poco de criterio y sentido común. Sabe que tiene perdida la mayoría absoluta y que va a perder la relativa a manos de una verdadera derecha democrática contraria a las mafias y al fraude.
En lo económico creo que sólo falta por pasar un último tren al futuro. Si no lo cogemos, hay que decir que la globalización también excluye territorios que no tienen nada que aportar a una economía mundializada. Nos quedamos clavados y empobrecidos. Ahí están los cierres de fábricas en sectores que han dejado de ser competitivos; curtidos y textil, por ejemplo. Y una balanza exterior murciana, que lleva ya muchos meses con una tasa de cobertura muy deficitaria. Lo demás, es un “vamos a contar mentiras” para no alarmar a la gente ni plantearle un esfuerzo individual en formación si aspira a alcanzar el futuro y a tener un sitio en la terciarización, que sustituye a la agricultura y a una industria sin I+D+i.
Y en el caso concreto de Águilas y Lorca?
Lo emprendedores y políticos lo fían todo demasiado a la Construcción y al turismo residencial. No piensan en el activo que es su riqueza natural, para explotarla a precio de bien escaso. Los políticos de ambos partidos también juegan demasiado al corto plazo y a un beneficio rápido de quienes les financian desde el ladrillo. El futuro está en la diferenciación de la oferta y en el valor añadido que seamos capaces de agregarle. No, desde luego, en los convenios urbanísticos, que sólo sirven para corromper y crear la falsa sensación de que hemos asegurado el empleo de por vida. Eso es hoy puro espejismo y los políticos no debieran jugar en Águilas y Lorca con las ilusiones de la gente. No hay más verdad, hoy como nunca, que el esfuerzo individual con tino, para superarse.
¿Qué significará para publicaciones como Arco Mediterráneo, y demás medios informativos, formar parte de este proyecto?
Ofrecer un mejor producto y asegurar, aún más, su libertad e independencia.