MURCIA.-La tala de palmeras afectadas por el 'picudo rojo' (Rhynchophorus ferrugineus) en la Región de Murcia se incrementó un 477,7% en tres años, al pasar de las 270 palmeras arrancadas en 2006 a las 1.560 palmeras que se estima se destruirán este año, según datos de la Consejería de Agricultura y Agua, que apuntan que en 2008, a fecha de septiembre, ya se habían cortado 885 palmeras. En 2007, se talaron en la Región 1.171 palmeras a causa de este coleóptero drioftórido.
El director general de Modernización de Explotaciones y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón (en la imagen), explicó que, a tenor de estas cifras, "en tres años se van a destruir en la Región más de 3.000 palmeras", y avanzó que, "de mantenerse la tendencia actual, el próximo año se tendrán que cortar 2.300".
En lo que va de año, los municipios con más actuaciones por culpa de esta plaga fueron Cartagena, con 622, seguida de Los Alcázares (237), Murcia (390) y San Javier (301), aunque García Lidón reconoció que "la mayor preocupación la tenemos con Los Alcázares y San Javier porque se va en incremento".
García Lidón calificó la situación actual de "grave" y destacó la "rápida intervención" que desde su departamento se presta una vez se detectan los casos, priorizando aquellas actuaciones que suponen, además, un riesgo para la población por la caída de las grandes hojas de la palmera o del propio ejemplar, como el caso registrado en el colegio de la Ciudad del Aire, en San Javier.
Igualmente, se pone especial hincapié en los casos que afectan a palmerales históricos o muy arraigados en el paisaje de las ciudades o los municipios, pero García Lidón reconoció que "pese a todos los esfuerzos, a que estamos actuando como es debido, no sé a dónde vamos a llegar, aunque estamos resistiendo".
Y es que la moratoria de un año de cuarentena en el país de origen, y otro año en el país de entrada, decretado por la Unión Europea "acaba de expirar", apuntó García Lidón, quien comentó que actualmente existe una incertidumbre sobre qué va a pasar "en algo que no afecta exclusivamente a España o Portugal, sino que está también causando problemas importantes en la Costa Azul francesa, en Sicilia y otros lugares de Italia, en Grecia y en las islas del Mediterráneo".
"Esto demuestra que se actuó a la ligera y que la Administración central dejó desguarecida la entrada de productos a España y nuestras fronteras", subrayó García Lidón, para quien "lo mejor es que no entraran, como ocurre en Canarias, que tiene cerrada la entrada de palmeras foráneas importadas, aunque ellos pueden hacerlo por tener un régimen especial".
De hecho, parece que la palmera canaria (Phoenix canariensis) es la favorita del 'picudo rojo', ya que en la Región de Murcia el 95,5 por ciento de las infestaciones fue a esta variedad, mientras que el 4,1% afectó a la palmera datilera (Phoenix Dactylifera). No obstante, García Lidón desveló que "este año se han detectado los primeros ataques a palmera washingtonia (Washingtonia filifera), a la que recurre cuando ya no queda otra".
García Lidón detalló, además, que el 'picudo rojo' no ataca a cualquier palmera, ya que "prefiere las palmera macho" en el 80% de los casos, y que en la Región los focos "suelen detectarse en septiembre-octubre". Su propagación está relacionada con la lluvia y con los días ventosos, así como tienen una doble característica: grandes urbanizaciones y al lado de las carreteras.
A su vez, el director general de Modernización de Explotaciones y Capacitación Agraria recalcó que su departamento está luchando "con toda la artillería" contra esta plaga, no solo con la tala de los ejemplares dañados, sino con tratamientos preventivos y actuaciones fitosanitarias en palmeras con una baja infestación.
En todo ello, se lleva invertido ya más de dos millones de euros, una cuantía que financiada al 50 por ciento entre Comunidad Autónoma y Gobierno central, y que "estamos estirando al máximo, sacándole el máximo rendimiento y efectividad".
Igualmente, García Lidón destacó las actuaciones novedosas aplicadas en la Región, como la endoterapia, que consiste en unas inyecciones con insecticida que se aplicaron, por ejemplo, en el paseo marítimo de Puerto de Mazarrón; o el tratamiento biológico con nematodos entomopatógenos, esto es, un organismo microscópico que parasita el 'picudo rojo' hasta causarle la muerte, y que se aplicó con éxito en Lorca y en Murcia.
Además, en colaboración con la Universidad de Alicante, se realizará un ensayo, en la zona del Arsenal de Cartagena, para el tratamiento con 'Beauveria bassiana', un hongo depredador que causa la muerte del 90% de los insectos en 14 días y del cien por cien en 24, aunque su principal ventaja es el carácter preventivo al proteger a la planta del picudo rojo durante cuatro meses, el doble de tiempo que los compuestos químicos.
También se efectuaron tratamientos preventivos con imidacloprid como sustancia activa en palmeras históricas y en las zonas aledañas a los focos detectados, como en el Balneario de Archena, así como cirugía arbórea en palmeras históricas dañadas, como en Héroes de Cavite en Cartagena y en Santa María de Gracia en Murcia.
Precisamente, una de las actuaciones inmediatas una vez detectado un foco es fijar un área de protección de 5 kilómetros de radio alrededor de la zona infestada, así como un área de especial vigilancia, a modo de corona circular, de entre cinco y 10 kilómetros.
Otras medidas obligatorias para ayuntamientos, viveros, comerciantes, particulares y otros entes públicos son comunicar los focos detectados, realizar las medidas fitosanitarias fijadas por el Servicio de Sanidad Vegetal, facilitar el acceso al personal acreditado por la Consejería de Agricultura y Agua, y conservar durante cinco años los documentos de adquisición y movimiento de las palmeras.
Los síntomas para detectar si una palmera está afectada por el picudo rojo son, entre otros, palmas caídas, desplome de la copa, palmas en punta de flecha, galerías en la base, ojo comido o desplazado, orificios en tabalas, fibra descompuesta y exudaciones rojizas, pupas en la base de las palmas podadas, así como larvas en los tejidos internos.
Como prevención, se recomienda demorar la poda a los meses invernales, por ser los de menor vuelo de estos insectos, evitar podar las palmeras en verde, el cepillado y quitar las púas, así como la poda excesiva. También es aconsejable hay que pintar los cortes una vez se practique la poda y no quemar los restos.