"Hemos llegado al final de un largo viaje. El pueblo estadounidense ha hablado y lo ha hecho con claridad", expresó McCain desde Phoenix, en Arizona. "Obama ha conseguido algo grande para sí mismo y para su país".McCain dijo que admiraba la capacidad de Obama de generar esperanza en los sectores postergados de la sociedad.El recuento hasta las 04.30 GMT en las elecciones presidenciales celebradas en EE.UU. adjudica la victoria al demócrata Barack Obama con 338 votos electorales en 23 estados, mientras el republicano John McCain obtiene 157 votos en 18 estados. Un 51% de los votos frente al 49%, a falta de escrutar el resultado de varios Estados del oeste.
La elección de Obama, el primer negro electo presidente de Estados Unidos, es histórica, en un país donde los negros no tenían derecho al voto hace apenas un medio siglo.
Obama, de 47 años y en su primer período como legislador por Illinois, será investido como presidente el 20 de enero del 2009.
Obama llevó a los demócratas a una victoria electoral aplastante que amplió las mayorías del partido en ambas cámaras del Congreso e implica un fuerte repudio a los ocho años de liderazgo del presidente republicano George W. Bush.
El triunfo de Obama, hijo de un padre negro proveniente de Kenia y de una madre blanca de Kansas, marca un hito en la historia de Estados Unidos. La victoria se da 45 años después del apogeo del movimiento por los derechos civiles liderado por Martin Luther King.
Obama, un desconocido político local hasta 2004, superó a su rival republicano en Florida, Pensilvania y Ohio, un estado clave en el que el aspirante que llegó a la Casa Blanca se ha impuesto desde 1964.
La mayoría del voto hispano, según las encuestas a pie de urna, se ha inclinado a favor de Obama, mientras que la totalidad del voto afroamericano, que representa un 13% del total en Florida, ha apoyado abrumadoramente al candidato demócrata.
Mientras la comunidad cubano-americana se ha inclinado en el sur de Florida por McCain, los electores puertorriqueños que viven en torno a Orlando han votado mayoritariamente por Obama.
Barack
Obama ganó pues en Washington D.F. y Pensylvania, Connecticut, Delaware, Illinois, Maine, Maryland, Massachusetts, Nueva Jersey, Vermont, Virgina, New Hampshire, Michigan, Wisconsin, Rhode Island, Minesota, Nueva York, Nuevo México, Iowa, Florida, Nevada, Colorado y el crucial estado de Ohio.
John
McCain venció por su parte en Kentucky, Carolina del Sur, Oklahoma, Tennessee, Alabama, Wyoming, Dakota del Norte, Virginia Occidental, Luisiana, Utah y Missisipi.
El vencedor en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el demócrata Barack Obama, ha arrasado en el noreste del país y ha obtenido una victoria prácticamente unánime en la capital federal, Washington, con el 93 por ciento de los votos. Asimismo, ha conseguido una muy amplia victoria en los Estados de Illinois (del que es senador), Hawaii (donde nació) y California.
Los datos oficiales difundidos por la CNN indican que Obama ya ha asegurado 338 votos electorales (casi 62 millones de votos, el 52 por ciento) tras el escrutinio del 94 por ciento de los votos en el conjunto de la nación, frente a los 163 (casi 55 millones de votos, el 47 por ciento) de su rival, el republicano John McCain.
Las cifras son particularmente contundentes en algunos Estados. En el noreste, Obama obtiene el 67 por ciento de los votos en Vermont, el 62 por ciento en Massachusetts, el 60 por ciento en Connecticut, el 63 por ciento en Rhode Island, el 62 por ciento en Delaware, el 61 por ciento en Maryland, el 57 por ciento en Nueva Jersey, el 58 por ciento en Maine y el 62 por ciento en Nueva York. Los datos más demoledores se registraron en el distrito de Columbia, donde se encuentra Washington, con un 93 por ciento de los votos.
Obama ha conseguido también un resultado aplastante en el Estado del que aún es senador, Illinois, con un 61 por ciento de los votos. En Hawaii, donde nació en 1961, el candidato demócrata ha obtenido el 72 por ciento de los votos. En California el porcentaje de votos para el presidente electo ha sido del 61 por ciento.
Destacan, además, las diferencias conseguidas por Obama en Estados que anteriormente estaban en poder de los republicanos, como en Nuevo México, con quince puntos porcentuales; Utah, con doce puntos a favor, o Iowa, con nueve.
Los republicanos han obtenido victorias destacadas, con alrededor de 20 puntos porcentuales de diferencia a su favor, en Estados como Arkansas, Kentucky, Wyoming, Oklahoma, Utah, Idaho y Alaska (62 por ciento frente a 36 para Obama), donde ejerce de gobernadora la candidata republicana a la Vicepresidencia, Sarah Palin. En Arizona, el Estado del que McCain es senador, la victoria de éste ha sido de nueve puntos (54 a 45 por ciento).
Obama, obtuvo en las elecciones de ayer un amplio apoyo de las mujeres y de las personas menores de 44 años, sobre todo de las menores de 30 años de edad, según revelan los sondeos efectuados en todo el país.
Según las encuestas, difundidas por la CNN, la participación femenina fue claramente superior a la masculina (53 frente a 47 por ciento). Entre las mujeres, el 56 por ciento votó a Obama y el 43 por ciento al candidato republicano, John McCain. Entre los hombres los porcentajes son de 49 y 48 por ciento respectivamente.
En cuanto a los tramos de edad, el comprendido entre los 18 y los 29 años (con una participación del 18 por ciento respecto al total) votó en un 66 por ciento a favor de Obama, frente al 32 por ciento para McCain. El tramo entre 30 y 44 años (29 por ciento de participación) votó a Obama en un 52 por ciento, frente a un 46 por ciento que lo hizo en favor de su rival.
La mayor participación se registró entre las personas de 45 a 64 años, con un 37 por ciento. En este tramo de edad ambos candidatos obtuvieron el 49 por ciento de los votos. Por último, los votantes mayores de 65 años (16 por ciento del total de los participantes) apoyaron claramente a McCain, con un 53 por ciento frente al 45 de Obama.
El voto latino ha sido una de las claves de la victoria del candidato demócrata en la Casa Blanca, Barack Obama, ya que, según el sondeo a pie de urna realizado por la cadena CNN el 66% de este sector del electorado votó a su favor, frente al 31% que lo hizo por el candidato republicano, John McCain.
Este respaldo es, según la cadena, once puntos mayor que el que recibió el candidato demócrata John Kerry en las elecciones de 2004, cuando el 55% de los latinos votaron a su favor frente al 44% que lo hizo por el presidente George W. Bush.
Así, los latinos han sido los responsables de la victoria de Obama en estados como Nuevo México y contribuyó en gran medida en Nevada y Colorado. Según la CNN, en Nuevo México, los latinos representaron el 41% del electorado y votaron por Obama por un 69% frente al 30% para McCain. El candidato republicano recibió el respaldo principalmente de los blancos de este estado, con el 56% de sus votos frente al 42% para Obama.
En el caso de Colorado, los latinos suponían el 13% del electorado y votaron en un 64% por Obama frente a 34% para su rival, mientras que en Nevada este grupo representaba el 16% del electorado y un 78% se decantó por el candidato demócrata frente al 20% para McCain.
Obama se dirige al país"Si hay alguien por ahí que todavía duda de que cualquier cosa es posible en EEUU... O alguien que todavía cuestiona el poder de nuestra democracia, la respuesta está en esta noche", comenzó diciendo el primer presidente negro de Estados Unidos, desde el Grant Park, de Chicago, a las 5.10 GMT.
"El cambio ha llegado a América", proclamó.
"Habrá algún revés y vuelta a empezar, pero siempre seremos honestos con los desafíos a los que nos enfrentamos", aseguró.
"El nuevo amanecer del liderazgo americano está a nuestro alcance", prosiguió Obama, que insistió en el mensaje de "esperanza" que ha encabezado su candidatura.
El discurso de Obama fue uno de los mejores en su carrera, comparable sólo al que le impulsó al escenario nacional y a la primera línea del Partido Demócrata en la convención de 2004.
Reconoció que habrá retrocesos y desacuerdos, pero se comprometió a “hablar siempre con sinceridad”.
Además, recordando los momentos más violentos del movimiento de los derechos civiles dirigido por Martin Luther King en los 60, enlazó su victoria con la larga historia desde la esclavitud hasta la libertad. Su triunfo es la coronación de ese camino.
"Esta es la respuesta de cientos de personas que han hecho cola durante horas en los colegios electorales para poder votar porque pensaban que esta vez sería distinto", dijo Obama ante la multitud que escuchaba emocionada al sucesor de George W. Bush.
"El mensaje que hemos lanzado hoy al mundo es que no somos una serie de estados azules o rojos, de demócratas o republicanos, sino que somos los Estados Unidos de América", manifestó Obama.
"Nunca he sido el candidato favorito para este cargo, no empezamos con mucho dinero ni con muchos apoyos. Nuestra campaña no se diseño en los salones de Washington, sino a través de las pequeñas donaciones y la movilizacion juvenil, entre otras, y hemos conseguido demostrar que 200 años después, el Gobierno de la gente y para la gente no ha desaparecido de la tierra, esta es vuestra victoria", declaró.
"Lo que empezó hace 21 meses hoy se hace realidad (...) invoquemos un nuevo espíritu de sacrifico, donde nos esforcemos de cuidarnos nosotros mismos y a los demás".
"Ha tardado mucho en llegar, pero esta noche, debido a lo que hemos hecho en este día, en este momento definitorio, el cambio ha llegado a Estados Unidos", dijo Obama.
"El camino que tenemos por delante será largo. Nuestro ascenso será empinado. Puede que no lleguemos allí en un año o incluso en un mandato, pero Estados Unidos, nunca he tenido tantas esperanzas como esta noche de que llegaremos allí", declaró ante 125.000 seguidores.
También quiso homenajear a las mujeres que han sido discriminadas durante la historia del país por su sexo y también a todos aquellos que han sido rechazados por el color de su piel. "Este es nuestro momento. El nuevo amanecer del liderazgo americano está a nuestro alcance", explicó.
"Gracias, que Dios os bendiga y que Dios bendiga América", fueron las últimas palabras de Obama antes de poner fin a su primer discurso como nuevo presidente de Estados Unidos.