El municipio de Águilas será de los más disputados en las próximas elecciones locales de 2007 a tenor del número de candidaturas que se van perfilando a nueve meses de los comicios. Tanto el PP como el PSOE mantienen “de facto” abiertas sus listas pese a que todavía se barajen prácticamente seguros como cabezas, al actual alcalde, Juan Ramírez Soto, y al todavía portavoz socialista, Ramón Román.
Los movimientos subterráneos en ambos partidos hacen presagiar que la suerte no está echada del todo y que la enorme cantidad de intereses que se precipitan sobre este municipio intentan llevar el agua a su molino con las diferentes combinaciones y titulares a conveniencia que pueden procurar unos resultados no rotundos por parte de una sola formación ante, al menos, las seis alternativas ya en liza. Surgirán otras más, sin olvidar que algo harán aquí los inmigrantes.
Puede también, pues, haber cambios de última hora por el riesgo de que el nuevo fiscal anticorrupción del TSJ se termine querellando contra el primer edil por su concurso en el tema de La Zarrichera (esta misma semana un escoltado Ramírez se ha reunido a almorzar con el abogado del Estado en la Audiencia Nacional y asiduo veraneante en la localidad, Francisco Ruiz Risueño, ex diputado y ex senador de la UCD por Albacete) o se terminen desvelando las razones de los presuntos contactos oficiosos del actual líder de la Oposición con el especulador Trinitario Casanova, ex presidente del Águilas C. F., hoy presidido por otro especulador y tomatero, Alfonso García, fundador del MIRA, el oportunista partido coaligado con el PP, que posibilita el actual gobierno de Juan Ramírez para que le recalifique todas sus bancales agrícolas más próximos al mar gracias a controlar esta, parece desde fuera que algo pervertida, formación política el área local de Urbanismo.
En Izquierda Unida, coalición de izquierdas que siempre saca una casi simbólica representación de dos escaños en el municipio de Águilas, la renovación está abierta ante las reticencias de continuidad de su actual concejal-portavoz, Miguel Carrasco, lo que haría viable el acceso de un hombre o mujer joven en la línea del actual coordinador regional y concejal del ayuntamiento de Lorca, José Antonio Pujante, precisamente por esa precipitación de intereses ante las expectativas de teórico fuerte negocio inmobiliario en casi todo el término del municipio aguileño entre 2007-2010.(Casanova ha declarado a la televisión local que volverá a invertir en Águilas cuando se den las garantías jurídicas suficientes como para asegurar una rentabilidad a plazo).
Tímidamente se habla del cineasta Benito Rabal (hijo del recordado actor nacido en la pedanía de la Cuesta de Gos) como el mejor reclamo para remontar una opción con más posibilidades y hasta alternativa de poder si cuadra una coalición postelectoral con el socialismo ético de Román.
A partir de aquí, grupos ocasionales (algunos parece movidos y/o financiados por las mafias de la especulación) tratan de situarse en una posición de ventaja negociadora suficiente con resultantes minorías mayoritarias como para poder negociar recalificaciones selectivas sin más, tras infligir, o no, serias mermas en el escrutinio a los partidos convencionales, especialmente al PSOE, con demagógicos reclamos localistas, que sólo juegan a favor del beneficio a corto plazo de tan sólo unos pocos y emulando la política desarrollista fomentada por San Esteban con la grosera utilización de un alcalde bajo mínimos intelectuales y los más listos/discretos en la trastienda.
No en vano, se especula que, tras el concurso de algunas de estas oportunas candidaturas, estaría la mano financiera de la propia pirámide de intereses que viene sosteniendo al ya muy sospechoso presidente Valcárcel. (No ha pasado las vacaciones de verano en su chalé de la Torre de la Horadada, Alicante, según sus vecinos más próximos, y se investiga qué potentado le ha procurado un cobijo más seguro ante la irritación con él de algunos de los indeseables que lo han financiado desde 1996 por no ceder del todo a sus ambiciosas pretensiones, por el riesgo de acabar ante el juez y tener que abandonar el cargo).
No deja de ser curioso que el expedientado grupo de concejales socialistas, con el ex secretario local del PSRM y promotor inmobiliario Pedro Gil, (de siempre poco de fiar), al frente, se haya agrupado en torno a las prometedoras siglas MAS (Movimiento Aguileño Socialdemócrata) para intentar confundir al electorado local con un mensaje envenenado, y de todas falso, por esconder claras intenciones de apoyo a la especulación consagrada por Ramírez y García en el municipio aguileño.
Gil intentará cambiar su eventual apoyo en el consistorio por prebendas en el reparto del nuevo pastel urbanístico, esgrimiendo su control sobre algún determinado medio cercano de comunicación audiovisual, como televisión L´Aguilica y la estación local de la SER. Se sabe que cuenta con bastante dinero, de procedencia aún por acreditar, para desarrollar una fuerte campaña, que no tiene más objeto que rebajar las posibilidades del PSRM al tratar de dispersar un voto de centro-izquierda en fase de fuerte concentración entre los sectores más exigentes.
Frente a esta burda maniobra de división del voto progresista con fines inconfesables, el ex alcalde y ex diputado regional socialista, el inolvidable por eficaz y honrado, Manuel Carrasco, renuncia a concurrir esta vez con su anterior lista independiente, de nulo resultado práctico, conocida como UDCAP, y volverá su apoyo público al candidato o candidata del PSRM integrando su candidatura como antaño para contrarrestar a un Gil que quiso jubilarlo.
Porque en el PSRM también cuecen habas. Tras ser postulado por terceros sin aparente éxito el militante Antonio Alcolea (ahora aspira al contrapeso de la secretaría local del PSOE para controlar desde el partido al candidato/candidata y/o eventual alcalde/alcaldesa), suena ahora el nombre de la aguileña y jefa de la Demarcación de Costas, Francisca Baraza, miembro de la ejecutiva regional del PSRM, como candidata alternativa a Román si así lo decide una asamblea local convocada al efecto por la nueva ejecutiva aguileña que ha de sustituir a la actual gestora. El tema es muy complejo porque un error sobre sensibilidad local puede dar con todo al traste.
En la sede socialista de Princesa, la última palabra es de Pedro Saura, convenientemente asesorado por José Ramón Jara, al tratarse Águilas de un municipio emblemático para la contra política urbanístico-ambiental de Zapatero, cuya esposa, Sonsoles, lo habría visitado en julio para bucear en sus fondos marinos y prometido una posterior estancia acompañada del presidente del Gobierno.(En Águilas reside ahora gran parte del año, su asesor y ex director general de la Agencia Europea de Medio Ambiente, Domingo Jiménez Beltrán, y en sus inmediaciones parece poseer una casa su asesor económico, Miguel Sebastián). Para los socialistas es un símbolo del cambio y jugarán a gobernar al precio que sea en una población hoy al albur de las mafias.
El problema parece radicar en la infiltración en las filas socialistas locales de los intereses espurios del conocido terrateniente alhameño, Tomás Fuertes, a través de elementos próximos al tomatero Paco López, quien habría vendido, o al menos firmado una opción de compra, sus tierras de labor (las más próximas al casco urbano) al prominente especulador y chacinero. Como ahora actual mayor propietario de terrenos en el entorno urbano de Águilas, Fuertes trata como ninguno de mover sus peones entre las formaciones que han anunciado su concurrencia, al objeto de ver, si no favorecidos, sí, al menos, no obstaculizados sus intereses por el nuevo Ayuntamiento que salga de las urnas. Es el principal pero sin menospreciar los muy consolidados de un joven y conocido notario en activo, que ha heredado bastantes terrenos cercanos al mar en lo mejor de la ya, muy urbanizada de años por su empresa familiar, playa del Hornillo.
En el PP, y a pesar de que el aparato de propaganda propio y el sostenido por el dinero del opaco grupo “Hispania” dan por segura y confirmada la candidatura de Ramírez (actualmente siempre con escolta personal en todos sus desplazamientos), este extremo no está nada claro. Dependerá de la suerte política y legal del propio presidente Valcárcel a partir de septiembre (para la Abogacía del Estado en Murcia algo “gordo” va a pasar muy pronto ) y de las conclusiones de la Fiscalía del TSJ tras la investigación a que tiene sometido al actual alcalde de Águilas, formalmente distanciado de su cuñado y también concejal, Juan Pérez, con el que no contaría para una nueva legislatura, al contrario que con la muy eficaz concejal de Cultura, Clara Valverde, su candidata preferida en caso de no poder concurrir él mismo. (Pérez parece estar siendo investigado por la Guardia Civil y la Agencia Tributaria, desde hace meses).
También se baraja el nombre de otra actual concejala y diputada regional, Ana Miñarro, mientras se descarta, por muy compleja en este momento, la opción ideal del actual presidente del PP en Luxemburgo, el aguileño consorte José Ortiz Pintor, brillante eurofuncionario murciano destinado en el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea, por las profundas dudas que le asaltan sobre su propia idoneidad como candidato en este momento de tanto “ruido” político regional. El abandono estratégico de esta candidatura del edil y destacado conservador aguileño, Diego Martínez Parra (aspirante a presidir ahora el PP local), presagia el triunfo de la actual oposición socialista, liderada por Ramón Román, al ser en Águilas la opción más votada en los últimos comicios allí celebrados, las elecciones al Parlamento Europeo en 2005.
El MIRA del breve ex alcalde Alfonso García parece todavía en busca de candidato y se especula que no concurrirá finalmente para no restar votos a un PP dispuesto, en cualquier caso a cambio, a votar a favor de recalificarle los terrenos de la actual sede social y operativa de su empresa agrícola, “Urcisol”, a la entrada de Águilas por la carretera de Lorca, para poder embolsarse los 8.000 millones de pesetas que le ofrece “Eroski” para instalar en ellos un supercentro comercial, a un paso del núcleo de la población, junto a la circunvalación que une las playas colindantes de la provincia de Almería con la ya muy conocida Marina de Cope y la macro urbanización promovida por la empresa asturiana (?) “Dursa” bajo el provocador nombre de “Isla del Fraile” y en terrenos que eran propiedad de este ex alcalde, al igual que los ya recalificados en la “Casica Verde” frente a lo que será el nuevo gran puerto deportivo que debe autorizar, o no, la socialista Baraza desde su actual puesto político en Costas.
Una incógnita a despejar es lo que pretende Asensio Navarro, el bancario del BSCH, y antes del Banco Central presidido por Alfonso Escámez, marqués de Águilas, con su ambigua formación PDIA, sin actual representación en el Ayuntamiento. No se sabe quien lo financia y para qué, pero se intuye que viene, como actualmente el MIRA, a apuntalar y asegurar la continuidad del PP al frente del gobierno municipal (si suficientes aguileños le votan), con o sin Ramírez, para continuar y acrecentar la actual e insostenible política urbanística con el instrumento legal de un nuevo PGOU que legalice finalmente las consecuencias de todos los convenios urbanísticos firmados por el actual alcalde y posibilite la viabilidad legal de las actuaciones previstas en la Marina de Cope e impedir así retro actuaciones posteriores con la nueva ley del Suelo enviada por el Gobierno Zapatero a las Cortes.
En los colindantes municipios litorales almerienses de Cuevas de Almanzora, con alcalde del PP, y Vera, con alcalde del Partido Andalucista, la socialista Junta de Andalucía ya ha comenzado a paralizar provisionalmente nuevas y masivas promociones inmobiliarias de segunda residencia, recurriendo al sistema de asistirse de una decisión judicial al efecto para dar ejemplo de coherencia con el nuevo espíritu normalizador y racionalizador de La Moncloa en cuestiones urbanísticas.