En su discurso durante el acto institucional del Día de la Ciudad celebrado en el Teatro Romea, con motivo de la conmemoración del aniversario de la creación del Concejo de Murcia por parte del Rey Alfonso X El Sabio el 14 de mayo de 1266, el alcalde ha reivindicado "una Murcia moderna, abierta y cosmopolita, llena de vida y oportunidades, alegre y dinámica", por la que tanto la Corporación como él mismo seguirán trabajando "con energía y determinación, con fuerza e ilusión, porque nos mueve un sentimiento que sale de lo más profundo de nuestro ser".
"Esforcémonos por mantener vivas unas formas de convivencia y civilización, en una época de abolición de espacios de encuentro, de trincheras ideológicas y de bandos aguerridos", ha reclamado Ballesta, quien ha animado a mantener "ese peculiar humanismo murciano en el cual convergen todos nuestros particularismos y que tan característico es de la auténtica identidad murciana".
La identidad de "una ciudad cuya fundación en el siglo IX tiene de particular, con respecto a otras que presumen de identidad y reclaman deudas históricas, que nuestra historia empezó antes que la de ellos", ha recordado el alcalde, que ha señalado que seguirá trabajando por Murcia "con energía y determinación".
"Nos inunda
un sano orgullo de pertenecer a una tierra con historia", ha recalcado
el alcalde.
En ese sentido, Ballesta ha puesto en valor
"nuestro pasado y nuestras tradiciones, que no son un capricho ni una
falseada construcción intelectual, sino nuestro legítimo derecho a
sentirnos inmersos en el fecundo aliento con que el espíritu del pueblo
llano y soberano de Murcia cobró forma y carácter a lo largo de estos
doce siglos".
"Tenemos por tanto los murcianos actuales el
indeclinable deber de mirar con valentía e ilusión el futuro y los retos
que nos trae. Debemos desterrar de nuestra querida Murcia el
desencanto, los complejos de inferioridad, el fatalismo histórico, el
derrotismo y las rencillas aldeanas y provincianas", ha señalado
Ballesta en su discurso, que ha comenzado parafraseando al ilustre
pintor murciano Ramón Gaya, quien dijo que "cada vez que entro en
Murcia, se me rompen los años de distancia".
El acto institucional del Día de la Ciudad, que llenó de público el
Teatro Romea, engalanado para la ocasión, ha contado con la presencia de
la delegada del Gobierno en la Región de Murcia, Mariola Guevara; el
consejero de Presidencia, Portavocía y Acción Exterior, Marcos Ortuño;
la Corporación Municipal; el vicepresidente primero de la Asamblea
Regional, Miguel Ángel Miralles; el rector de la Universidad de Murcia,
José Luján: así como los presidentes de las juntas municipales de
Murcia, los cargos festeros; las Reinas de la Huerta y los Caballeros y
Damas de la Corte de la Virgen de la Fuensanta.
El alcalde ha
hecho entrega de los honores y distinciones del Ayuntamiento de Murcia
este año 2024, concedidos por acuerdo unánime del Pleno de la
Corporación Municipal. En ese sentido, Ballesta ha agradecido a los
grupos políticos municipales (PP, PSOE y Vox) "el alto sentido
institucional que han demostrado en el otorgamiento de honores y
distinciones".
Al urólogo José Meseguer Huertos, "que inició
una saga de médicos murcianos que llega hasta nuestros días", se le ha
concedido la Medalla de Oro de la Ciudad a título póstumo, por labor
sanitaria como cirujano en el Hospital Provincial y por haber fundado la
delegación provincial de Cruz Roja. Recogió la distinción su
tataranieto Francisco José Meseguer Peña.
También recibió la
Medalla de Oro el Cuerpo Nacional de Policía, representada en el acto
institucional por su Jefe Superior en Murcia, Ignacio del Olmo. La
distinción viene a reconocer los 200 años de servicio de este cuerpo
policial, "garantizando el bien y la seguridad pública", según Ballesta.
José Rubio, presidente de la Federación de Colombicultura de la
Región de Murcia, recogió la Medalla de Oro concedida a la organización,
"que hunde sus raíces en la propia historia de Murcia, pues fueron los
moradores árabes quienes introdujeron el gusto por el vuelo de las
palomas".
Otro reconocimiento póstumo
fue para Ricardo Codorníu y Stárico, conocido como 'El Apóstol del
Árbol'. Nacido en Cartagena, es desde hoy Hijo Adoptivo de la Ciudad de
Murcia.
"Un adelantado, un visionario, con la misión de dejar un mundo
mejor", ha recordado el alcalde de Murcia, quien ha destacado su trabajo
en la reforestación de Sierra Espuña, el diseño del Parque Ruiz Hidalgo
junto a El Malecón y la plantación del ficus de Santo Domingo, un
emblema de la ciudad.
"Además, fue un hombre intrínsecamente
bueno", ha resaltado el alcalde.
María del Pilar Cáceres Hernández-Ros, bisnieta
mayor de Ricardo Codorníu, recogió el título en su nombre.
Por su parte, son Hijos Predilectos de Murcia Gloria Alemán Picatoste,
"reflejo de la personalidad inquieta, luchadora, solidaria, elegante y
distinguida de la mujer murciana; Pedro López Martínez 'El Cardoso',
"maestro del trovo, defensor de las tradiciones y el folclore de la
transmisión oral; y Francisca Magaña Fuentes 'Paca La Machacanta', quien
a lo largo de su vida "ha desplegado toda su creatividad entre guisos y
arroces, dedicada a la gastronomía más tradicional desde su restaurante
situado en la vereda de la Barca del Saladar de Beniaján.
El
acto institucional, en el que ha tenido un protagonismo especial el
Escudo original de Murcia, ha contado con la música del Orfeón Fernández
Caballero y una representación de la Orquesta de Jóvenes de la Ciudad,
que interpretaron el Himno Nacional, coplas murcianas y el Himno a
Murcia, para poner colofón a la gala.