VALENCIA.- María Isabel Campuzano Martínez (Madrid, 1960) ha logrado, en pocos días, convertirse en el foco de atención del ejecutivo murciano que preside Fernando López Miras como nueva consejera de Educación y Cultura, se escribe hoy en la edición valenciana de La Vanguardia.
Entre otros motivos por una carta hecha pública -llena de faltas de ortografía- para explicar su proyecto político con el mismo ideario que Vox, por su negativa a ponerse la vacuna contra la covid y por la amenaza que, según los sindicatos, supone para el sector de la educación pública.
Pero todas las fuentes consultadas subrayan que nadie debería sorprenderse, pues las manifestaciones que ha hecho como consejera ya las había hecho como diputada de Vox en la Asamblea de Murcia.
"Mabel", como la conocen todos, se incorporó al gobierno tras ayudar a hacer fracasar la moción de censura del PSRM y Cs; y en las pocas entrevistas que ha realizado desde entonces ha dejado claras algunas de las intenciones que han levantando en pie de guerra al sector educativo.
María Isabel Campuzano es licenciada en Historia del Arte y Técnico en Medicina Nuclear; campos en los que nunca ha llegado a ejercer. Hasta no hace mucho era la número dos de Vox en Murcia; pero fue expulsada del partido, junto a otros dos compañeros (que también votaron contra la moción de censura) por hacer un uso de los recursos del grupo parlamentario que no gustaron a la dirección nacional.
Hija de un padre socialista, que llegó a estar al frente de la agrupación del PSRM de la agrupación de Cartagena, nació en Madrid pero siendo pequeña se trasladó a la ciudad murciana. Tiene siete hermanos, dos de estos militantes de Podemos y otro Guardia Civil.
Católica practicante, fue directora de la Oficina Municipal de Información al Consumidor del Ayuntamiento de Fuente Álamo y puso en marcha el Hotel La Torreta de Totana: el municipio donde conoció a su esposo.
Antes de ser consejera del ejecutivo murciano, ya se había mostrado muy crítica con el sector educativo público de Murcia, partidaria del "veto parental", contraria a la Ley Celaá y contraria a poner la vacuna contra la covid.
Este último aspecto es relevante. Esta semana ha vuelto a reiterar su negativa a la vacuna. Pero ella mismo ha reconocido, en una entrevista a El Español, que su marido se contagió el 8 de marzo en el acto que celebró Vox en Vistalegre y estuvo ingresado muy grave durante dos semanas en el Hospital Morales Meseguer de Murcia. En esa misma entrevista dice: "No soy negacionista, soy preguntacionista".
Su posición crítica contra la vacunación y la estrategia del Gobierno Español contra la covid la ha escenificado varias veces en la asamblea regional de Murcia. En youtube se pueden ver algunos vídeos.
Nada más ser elegida consejera, su perfil fue duramente criticado por los sectores educativos de Murcia tras hacer pública una carta, fechada el 3 de abril, llena de faltas de ortografía en la que explica cuáles son sus planes de futuro como responsable del área de Educación y Cultura del ejecutivo murciano.
El movimiento Docentes Unidos de Murcia corrigió la carta y la lanzó por las redes sociales. En esta carta señala que "mantenemos la defensa de la libertad de los padres para decidir la educación de los hijos, y aquí entra no solo lo que llamamos el pin parental, sino muy especialmente la defensa que debemos organizar frente a los ataques a esta libertad que supone la ley Celaá".
Respecto a los sindicatos del sector educativo, en esta carta apunta que "quiero dejar bien claro que me parece indignante que se quieran apropiar de la educación pública como si ésta fuese una propiedad de la izquierda". La carta finaliza señalando que "yo sigo pensando y defendiendo lo mismo que antes de entrar en Vox y después de ser expulsada de Vox".
Lo cierto es que esta carta, al margen de las faltas de ortografía, supone, para los sindicatos, un "ataque a la escuela pública". Así lo han manifestado CC.OO. y U.G.T; además del colectivos Docentes Unidos. Susana, miembro de este movimiento, señala a este diario que "su visión de la educación es todo lo contrario a lo que debe ser la enseñanza pública".
Mabel Campuzano ha polarizado la acción del ejecutivo de López Miras. Fuentes de la asamblea murciana señalan que, de momento, el presidente no va a activar ninguna iniciativa en favor del "veto parental" hasta que no pasen las elecciones de Madrid del 4 de mayo.
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