LORCA.- El concejal responsable de la empresa de
Limpieza Municipal (Limusa), Fulgencio Gil Jódar, ha informado que el
Ayuntamiento de Lorca, a través de Limusa, ha establecido un dispositivo
especial de limpieza que se va a llevar a cabo durante los meses de
verano en las playas del litoral lorquino. Se trata de un operativo que
implementa las labores ordinarias de choque que se han realizado para la
retirada de los residuos acumulados durante el invierno.
Gil ha
explicado que una docena de operarios de la empresa municipal trabajan
entre mayo y septiembre para que las ocho playas de Lorca estén en
perfecto estado de uso por los bañistas. Durante julio y agosto la
limpieza de la arena se lleva a cabo tres veces por semana con la ayuda
de una máquina limpiaplayas en Calnegre y El Siscar.
En el resto
del litoral, Baño de la Doncella y calas de Garrobillo, se procede a
realizar una limpieza a diario manualmente. Por otro lado, el
Ayuntamiento de Lorca también ha reparado y adecuado los caminos de
entrada a dichas playas y durante la época estival se llevarán a cabo
tareas de revisión de las vías de acceso y, si fuese necesario, se
realizarán nuevas tareas de acondicionamiento, según ha anunciado.
El
edil ha señalado que en todo el perímetro de las zonas de baño, Limusa
ha puesto a disposición de los usuarios 30 contenedores de 90 litros de
capacidad, y otros seis contenedores de 6.000 litros con los que dar
cabida a la mayor generación de residuos sólidos urbanos en esta época
del año en la franja de litoral con actividad turística.
Las
tareas que se realizan van desde el vaciado de papeleras y contenedores,
el arado y cribado de las playas accesibles, la limpieza manual del
arenal donde no acceden las máquinas, hasta la recogida manual de
residuos en la orilla.
Gil Jódar ha indicado que antes de los
meses centrales del verano, la mercantil pública realiza las tareas de
limpieza de choque y la retirada de residuos acumulados durante la época
invernal, tanto en las playas de Ramonete, Puntas de Calnegre,
Calnegre, Baño de la Doncella, como en las de Garrobillo que cuentan con
acceso, La Galera, Cala Blanca, Los Hierros, y Playa Larga.
Las
playas del municipio son uno de los escasos reductos naturales sin
explotar de la costa accesible mediterránea. Además del arenal, la
empresa municipal también coloca los elementos turísticos, como son las
papeleras de madera, las pasarelas y la caseta y torre de vigilancia
para Protección Civil.
Se suman a estas infraestructuras dos
lavapiés, uno en Calnegre y otro en Puntas; y contenedores para la
recogida selectiva que permiten a los usuarios depositar por separado la
basura orgánica, el papel y cartón, el vidrio y los envases y
plásticos.
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