MURCIA.- El departamento de Cirugía, Pediatría,
Obstetricia y Ginecología de la Universidad de Murcia (UMU), que dirige
el prestigioso doctor Pascual Parrilla, considera que la admisión de 300 alumnos en
las facultades de Medicina de esa entidad publica y de la privada
católica San Antonio "supone una inversión que los contribuyentes
murcianos no se pueden permitir, y menos en tiempo de crisis".
En
un comunicado, añade que no le parece adecuado destinar recursos
públicos para una institución privada, aunque respeta la libertad de la
UCAM "de querer abrir o emprender negocios o crear instituciones en el
ámbito privado".
Los profesores de este departamento indican que
"en este caso se entremezclan los ámbitos público y privado" y no
consideran suficiente justificación decir que la UCAM realiza
contraprestaciones a cambio de las prácticas de sus alumnos en
hospitales públicos, "cuando aquellas son irrisorias".
También considera que los alumnos de Medicina de la UMU son "los
mejores de la Región de Murcia" y deben tener "a su disposición los
recursos que merecen y no deberían ser engañados".
Advierte de que ya se han producido "colisiones" en algunas áreas y hospitales y que será "más inevitable en aquellas disciplinas en las que los servicios sanitarios –como el caso de la Pediatría y de la Obstetricia- son ya deficitarios para dar prácticas de calidad a los estudiantes de la Universidad de Murcia".
El departamento dirigido por Pascual Parrilla, quizá la voz más autorizada dentro de la sanidad regional, también critica el alto número de plazas tanto en la universidad pública como en la privada: "Admitir cada curso académico a 300 alumnos entre las dos Facultades de Medicina es una inversión que los contribuyentes murcianos no se pueden permitir, y menos en tiempos de crisis. En el ámbito privado cada cual puede hacer la inversión que le parezca más conveniente, aunque ésta sea ruinosa; pero en el ámbito público se pone en juego el dinero y el bienestar de todos".
Para solucionar esta crisis, se aboga por una disminución del número de estudiantes de esta carrera en ambas instituciones y que la UCAM llegue a un concierto con hospitales y centros sanitarios "de su mismo ámbito privado", lo que llevaría "a una situación lógica, sostenible y justa para con los ciudadanos de nuestra Región".
La UCAM se justifica
Advierte de que ya se han producido "colisiones" en algunas áreas y hospitales y que será "más inevitable en aquellas disciplinas en las que los servicios sanitarios –como el caso de la Pediatría y de la Obstetricia- son ya deficitarios para dar prácticas de calidad a los estudiantes de la Universidad de Murcia".
El departamento dirigido por Pascual Parrilla, quizá la voz más autorizada dentro de la sanidad regional, también critica el alto número de plazas tanto en la universidad pública como en la privada: "Admitir cada curso académico a 300 alumnos entre las dos Facultades de Medicina es una inversión que los contribuyentes murcianos no se pueden permitir, y menos en tiempos de crisis. En el ámbito privado cada cual puede hacer la inversión que le parezca más conveniente, aunque ésta sea ruinosa; pero en el ámbito público se pone en juego el dinero y el bienestar de todos".
Para solucionar esta crisis, se aboga por una disminución del número de estudiantes de esta carrera en ambas instituciones y que la UCAM llegue a un concierto con hospitales y centros sanitarios "de su mismo ámbito privado", lo que llevaría "a una situación lógica, sostenible y justa para con los ciudadanos de nuestra Región".
La UCAM se justifica
"Respecto de las declaraciones sobre las prácticas de los alumnos de
Medicina realizadas por el profesor Pascual Parrilla, vaya por delante
el más profundo reconocimiento y admiración a él como profesional de la
sanidad", dice la UCAM en un comunicado justificativo.
"Cosa distinta es compartir su opinión política y su pretensión de preservar ciertos privilegios a costa del sistema público de salud, que es de todos.
Todos los alumnos de Medicina, independientemente de la universidad de la que procedan, tienen derecho al acceso a la formación que se les pueda dar en centros sanitarios públicos, ya que todos son hijos de contribuyentes, con cuyos fondos se financian esos centros; la aportación de los padres de los alumnos de la privada también es para mantener el hospital y la universidad donde trabaja el profesor Parrilla. Por cierto, dada su defensa de exclusividad que pide para sus alumnos, cabe suponer que él la practica, y que no trabaja, además, en hospitales privados.
Es obligación de las administraciones públicas coordinar de forma adecuada las prácticas, para que sean de máxima calidad para todos los futuros médicos, y de las distintas universidades proporcionarle la información cierta y necesaria para facilitarle esa labor. Plazas hay suficientes, por lo que el camino no es la demagogia ni la confrontación, sino planificar y coordinar".
"Cosa distinta es compartir su opinión política y su pretensión de preservar ciertos privilegios a costa del sistema público de salud, que es de todos.
Todos los alumnos de Medicina, independientemente de la universidad de la que procedan, tienen derecho al acceso a la formación que se les pueda dar en centros sanitarios públicos, ya que todos son hijos de contribuyentes, con cuyos fondos se financian esos centros; la aportación de los padres de los alumnos de la privada también es para mantener el hospital y la universidad donde trabaja el profesor Parrilla. Por cierto, dada su defensa de exclusividad que pide para sus alumnos, cabe suponer que él la practica, y que no trabaja, además, en hospitales privados.
Es obligación de las administraciones públicas coordinar de forma adecuada las prácticas, para que sean de máxima calidad para todos los futuros médicos, y de las distintas universidades proporcionarle la información cierta y necesaria para facilitarle esa labor. Plazas hay suficientes, por lo que el camino no es la demagogia ni la confrontación, sino planificar y coordinar".
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