EL ESCORIAL.- El Ministerio de Fomento confía en que la
fórmula que finalmente se apruebe para rescatar a las autopistas en
quiebra no tenga impacto en los recursos públicos ni en el déficit y
garantice la viabilidad de estas infraestructuras.
Así lo aseguró el secretario general de Infraestructuras del
Ministerio, Manuel Niño, durante su participación en los cursos de
verano que organiza la Universidad Complutense de Madrid.
Niño ha recordado que el Gobierno trabaja desde 2012 en solventar
el problema de estas vías y ha subrayado que el interés principal del
Ejecutivo es que no perjudique "el bolsillo de los españoles".
"Deseamos que sea una solución que cumpla estas condiciones, que
no tenga impacto en el déficit público y que las empresas concesionarias
de las vías, con la fórmula que se pueda arbitrar, hagan que estas
autopistas sean viables", declaró el alto cargo de Fomento.
El secretario general de Infraestructuras recordó que la situación
de esta decena de autopistas deriva, por un lado, de la crisis
económica, que ha supuesto "una reducción en el tráfico superior al 40%
respecto al que se había previsto en los estudios iniciales" y, por
otro, a "un encarecimiento de las expropiaciones".
La fórmula para rescatar estas vías diseñada por el Ministerio de
Fomento y el de Hacienda, actualmente pendiente de aprobación, pasa por
integrarlas en una empresa nacional de autopistas. Previamente se
realizará una quita del 50% en la deuda financiera de unos 3.800
millones de euros que soportan y se convertirá el pasivo restante en un
bono a treinta años.
Las vías actualmente quebradas, todas ellas en concurso de
acreedores, son las cuatro radiales de Madrid, la Madrid-Toledo, la
Ocaña-La Roda, la Cartagena-Vera, la Circunvalación de Alicante y la que
une Madrid y el aeropuerto de Barajas.
Estas nueve autopistas sumaron una intensidad media diaria de
tráfico de 5.751 vehículos entre los pasados meses de enero y junio, lo
que arroja un descenso del 4,6% en comparación con el mismo periodo de
2013, según los datos de Fomento.
No obstante, cuatro de estas vías lograron cerrar el semestre con
aumentos en el número de usuarios. Se trata de la que une
Cartagena-Vera, que elevó su tráfico un 3,48% hasta junio, la AP-36, que
lo incrementó un 5,33%, la que une Madrid y el aeropuerto de Barajas
(+0,7%) y la circunvalación de Alicante (+0,02%).
En el lado de las caídas se mantienen las radiales de Madrid y la
vía que une la capital con Toledo. Así, el tráfico de la R-2
Madrid-Guadalajara cayó un 8,26% en la primera mitad del año, el de la
R-3 Madrid-Arganda, un 8,4%, el de la R-5 Madrid-Navalcarnero, un 5%, y
el de la R-4 Madrid-Ocaña, un 3,22%.
En el caso de la autopista AP-5 Madrid-Toledo, cerró el semestre
con un desplome del tráfico del 6,72%, de forma que registró un exiguo
volumen medio de 751 vehículos al día.
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