MURCIA.- El barrio de La Paz apareció hoy con pintadas anónimas en
contra del PP y del alcalde, Miguel Ángel Cámara, que defendió la
reconstrucción del polígono y el proyecto presentado por el promotor
José López Rejas con diseño de Ricardo Bofill. En varios bloques, pero
también en el Centro Municipal y en la iglesia parroquial, se pueden
ver, en letras negras, mensajes como 'Cámara, ¿dónde están nuestras
casas?' y 'PP-Corruptos', relata 'La verdad'.
La presidenta de la Asociación de Propietarios
de La Paz, Bienvenida Meroño, condenó ayer este tipo de actos
vandálicos y lamentó que mientras en La Glorieta el Gobierno municipal y
los partidos de la oposición se tiran la pelota sobre la rehabilitación
de La Paz los vecinos sufren las consecuencias.
«Lo que tendrían que hacer todos es poner de su parte para
que se intervenga de una vez en el barrio», reclamó Meroño. «La gente de
La Paz tenía la ilusión de que se iba a regenerar, y ahora ya nadie nos
dice nada, mientras la única realidad es que el barrio está fatal, que
los bloques están que se caen, que nos están entrando ocupas en las
viviendas dando portazos. Los vecinos ya no sabemos qué más hacer,
porque parece como si aquí no pasara nada», critica.
Por su parte, IU-Verdes ha presentado una moción al Pleno
de la Junta Municipal Este de Murcia, que engloba los barrios de La Paz,
La Fama y Vistabella, en la que solicita el traslado de las
instalaciones de la escuela infantil La Paz al colegio público que lleva
el mismo nombre, donde «existen espacios suficientes para albergar
ambos servicios». La formación ha destacado la «celeridad» del PP «para
derribar una infraestructura municipal, amparado en las promesas de un
empresario, y la falta de soluciones a la actual situación de
precariedad que presentan las aulas prefabricadas situadas al hilo de la
avenida Juana Jugan». Según el vocal de IU-Verdes en la citada Junta,
Alfonso Martínez, en el espacio que ocupa el colegio público, que tiene
una baja ocupación, se puede instalar el centro de educación infantil
Ignacio Tornel, edil de IU-Verdes, señaló que el alcalde
«había asegurado una nueva vida a los vecinos y después de diez años
solo ha ejecutado el derribo de una escuela infantil histórica,
arraigada en el barrio, levantada por sus vecinos, para desproveer al
barrio de un centro de interés que le relacionaba con el resto de
Murcia».
De otro lado, el servicio de Inspección de la Concejalía de
Calidad Urbana, a raíz de la denuncia de la socialista Mar Rosa,
aconseja «revisar las estructuras de hormigón de las pérgolas instaladas
en el barrio, procediendo a la limpieza del óxido de las armaduras y
aumentando la sección de los pilares hasta una altura de 1,80 metros».
Los desperfectos, no obstante, son «los propios de la edad de los
elementos y el escaso recubrimiento».
No hay comentarios:
Publicar un comentario