MURCIA.- "La televisión autonómica 7RM en su actual etapa se ha
convertido
de hecho en una televisión local mantenida con presupuesto público, con una
programación propia de una televisión de pueblo
más que de una Comunidad Autónoma, y con presencia de pequeños
anunciantes, aunque subvencionada a través de los impuestos de todos los murcianos, en una clara competencia desleal por desproporcionada", según denuncian algunos de los concesionarios de frecuencias de televisión digital terrestre en la Región de Murcia.
Según los denunciantes, "el canal
autonómico se ha sumergido e interferido en
el tipo de contenidos y en el mercado que sólo las pequeñas televisiones
de los pueblos y ciudades
murcianas consideraban hasta ahora".
"Su presupuesto, que
alcanza el
millón y medio de euros al año (incluyendo una programación formada por
un cutre
informativo para dar pábulo al desacreditado gobierno regional y varios programas
realizados por productoras independientes, sin medios suficientes y que se quedan con los ingresos que esta
proporciona, además de la transmisión de la señal hasta las viviendas y el
mantenimiento de la parte proporcional del ente público RTRM)
es más alto que el de todas las televisiones privadas de Murcia
juntas y, sin embargo, sus contenidos y errores técnicos, no difieren
mucho, o
en nada, de los que en otras épocas produjeron, no sin esfuerzo, algunos
de
estos otros canales a los que tanto criticaron algunos y que, sin
embargo, no
costaban nada al contribuyente y trabajaban sin medios ni presupuesto", añaden.
"El capricho televisivo del presidente Valcarcel está dirigido por un
profesional proveniente de una radio amiga del PP, sin ninguna
experiencia en el medio televisivo, lo cual es francamente notorio, pero
con un sueldo astronómico, sobre todo si le sumamos el de su pareja,
que es la directora de informativos; lo pagan todos los murcianos y es
cada día más prescindible, ya no sólo por el
problema del déficit económico que sufre la Región, y que es de los
peores de España, sino por lo penoso de los
contenidos, que han entrado en competencia desleal, por ser
subvencionada, con
la de las otras televisiones privadas murcianas que, sin ningún apoyo
institucional, tratan de sobrevivir y subsistir a
la implacable crisis", prosiguen.
¿Cómo es posible que un gobierno compita, en plena
época de depresión
económica, con las televisiones privadas que tan mal lo están pasando en
Murcia
y usando el dinero de los impuestos de todos los murcianos; cómo es
posible que éstos soporten
esta vergonzante situación sin saber qué es lo que se está haciendo con
su
dinero?", concluyen
No hay comentarios:
Publicar un comentario