PAMPLONA.- El subgobernador del Banco de España, Javier Aríztegui, ha advertido hoy de que "se avecina un año duro para las cuentas de resultados" de las entidades bancarias y ha asegurado que sería "óptimo" que "al menos dos o tres bancos procedentes de antiguas cajas de ahorros hubiesen iniciado su cotización en Bolsa" antes de que acabe el 2011, porque "supondría un avance muy relevante en la consolidación de las cajas de ahorros como un sector significativo dentro del sistema bancario".
A este respecto, Aríztegui, que ha participado este miércoles en una jornada organizada por Caja Navarra en Pamplona, bajo el título 'De accionistas de derechos a inversores de hecho', ha señalado que "este hito marcaría un compromiso claro con la disciplina de mercado de un sector que irreversiblemente está obligado a obtener recursos financieros en él, tanto en forma de financiación ajena como en forma de capital".
"Esto supondría un avance muy relevante en la consolidación de las cajas de ahorros como un sector significativo dentro del sistema bancario", ha subrayado el subgobernador del Banco de España.
Además, en su discurso, el subgobernador del Banco de España ha destacado que el fin último de la reestructuración de las cajas de ahorros es "garantizar la viabilidad a largo plazo de este sector" y mejorar "la solidez y la solvencia".
En su opinión, se debe conseguir que las cajas de ahorro españolas "adecuen su estructura al volumen de negocio previsible, su eficiencia a las exigencias del mercado y su solvencia a las demandas de inversores, depositantes y reguladores".
Así, Aríztegui ha puesto de manifiesto que "la concentración entendida como un aumento de tamaño no debe ser un fin en sí mismo", sino que, según ha dicho, "debe ir acompañada de una profunda reestructuración interna de las entidades, que reduzca costes, genere sinergias y mejore la rentabilidad".
Sin embargo, y a pesar de que "la mayor parte de las entidades muestran unos buenos niveles de solvencia y eficiencia", el subgobernador del Banco de España ha alertado de que "se avecina un año 2011 duro para las cuentas de resultados de las entidades", por lo que ha reclamado que "se afronte el ejercicio con decisión, agilidad y rigor, pero también con confianza, porque, como decía Cervantes, en los ánimos encogidos nunca tuvo lugar la buena dicha".
Ante esta situación, Javier Aríztegui ha considerado "fundamental" que "todas las entidades de crédito extremen la prudencia en sus prácticas de gestión de riesgo de crédito" y que "batallen por la eficiencia".
También les ha aconsejado "aplicar políticas responsables de riesgo, de fijación de precios de activos y pasivos, de racionalización de costes y de gestión de activos problemáticos, para seguir prestando con eficacia los servicios de intermediación financiera que requieren los ciudadanos y las empresas españolas".
En opinión del subgobernador del Banco de España, otro de los "retos pendientes" para los próximos meses es "la culminación ágil y responsable de los efectos previstos por la nueva legislación del reforzamiento del sistema financiero". Según ha señalado, en los casos en que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancario (FROB) preste ayudas públicas, "tienen que prepararse rápidamente los planes de recapitalización, incluyendo los compromisos que se deben asumir".
También ha considerado necesario Aríztegui la realización de las pruebas de resistencia organizadas por la nueva Autoridad Bancaria Europea (ABE) y ha asegurado que España "va a volver a ser el país europeo con un mayor número de entidades sometidas al escrutinio de las pruebas, ya que, se incluirá a todas las cajas de ahorro y a todos los bancos cotizados".
No hay comentarios:
Publicar un comentario