MÉXICO.- Los servidores públicos de los tres niveles de gobierno, incluidos los de elección popular, que cometan delitos relacionados con la delincuencia organizada, deberán ser condenados a prisión vitalicia, dada la gravedad de la falta, según exigió la diputada del PAN, Violeta Lagunes Viveros.
Sostuvo que el incremento de la violencia, “cada vez más y mejor organizada”, se agrava por la competencia entre bandas de delincuentes, lo que ha creado un clima de incertidumbre y desconfianza entre la población y ha dado lugar a un proceso de descomposición de las instituciones encargadas de prevenir y castigar los delitos.
Aseguró que la fuerza de la delincuencia organizada radica en las alianzas y vínculos que sus integrantes han logrado establecer con funcionarios públicos de todos los órdenes de gobierno, desde mandos policiales hasta esferas políticas, en algunos casos: “los transgresores corrompen a las autoridades y se mantienen en la impunidad”, denunció.
Violeta Lagunes aseguró que las muertes violentas, los ajustes de cuentas, las desapariciones vinculadas con acciones de comandos policiacos y de narcotraficantes, son la constante en el país.
“Los asesinatos de jefes de las corporaciones, así como la multiplicación del narcomenudeo, reflejan la batalla por el control del mercado de las drogas y otros sumamente remunerados”, señaló en el texto que da sustento a su petición para castigar con prisión vitalicia a aquellos funcionarios.
Recordó que en una visita reciente a México, el analista de la ONU, Edgardo Buscaglia, señaló que a nivel mundial nuestro país ocupa el sexto lugar entre los países con mayor presencia de crimen organizado y que estos grupos han logrado relacionarse con el poder político, particularmente a nivel municipal.
El experto dijo que México sólo está por debajo de Afganistán, Irak, Paquistán, Nigeria y Guinea Ecuatorial, en cuanto a la presencia y nivel de operaciones de la delincuencia organizada: “Mundialmente, el crimen tiene presencia en 38 países”, subrayó.
Violeta Lagunes señaló que se calcula que entre el 50 y el 60 por ciento de las alcaldías a nivel nacional podrían tener algún vínculo con grupos del narcotráfico y en este sentido, advirtió, “la actual estrategia del gobierno del combate al crimen organizado no será eficiente si no se rompen las redes financieras y los nexos del crimen con el poder político”.
Agregó que los funcionarios públicos han sido “capturados” por delincuentes principalmente vía sobornos, amenazas, extorsiones, nexos de amistad o familiares, incluso casos en los que son miembros de organizaciones delictivas.
“Al parecer la delincuencia organizada cuenta con un eje de dirección y mando, por ello actúa como si sus dirigentes fueran la autoridad y sus reglas. En los últimos 10 años, la violencia y los crímenes se han salido de los esquemas tradicionales, dejaron de ser una delincuencia menor y doméstica, para convertirse en una delincuencia organizada, transnacional, con participación de funcionarios públicos de diversos niveles de gobierno”.
Insistió que las bandas criminales que emplean sus propias técnicas, métodos e ideología, han podido asociarse a funcionarios públicos dedicados al secuestro, la extorsión, el narcotráfico, el acopio y tráfico de armas, el tráfico de órganos, la prostitución y explotación de menores, al robo de autos, y una lista interminable de ilícitos.
Sostuvo que el incremento de la violencia, “cada vez más y mejor organizada”, se agrava por la competencia entre bandas de delincuentes, lo que ha creado un clima de incertidumbre y desconfianza entre la población y ha dado lugar a un proceso de descomposición de las instituciones encargadas de prevenir y castigar los delitos.
Aseguró que la fuerza de la delincuencia organizada radica en las alianzas y vínculos que sus integrantes han logrado establecer con funcionarios públicos de todos los órdenes de gobierno, desde mandos policiales hasta esferas políticas, en algunos casos: “los transgresores corrompen a las autoridades y se mantienen en la impunidad”, denunció.
Violeta Lagunes aseguró que las muertes violentas, los ajustes de cuentas, las desapariciones vinculadas con acciones de comandos policiacos y de narcotraficantes, son la constante en el país.
“Los asesinatos de jefes de las corporaciones, así como la multiplicación del narcomenudeo, reflejan la batalla por el control del mercado de las drogas y otros sumamente remunerados”, señaló en el texto que da sustento a su petición para castigar con prisión vitalicia a aquellos funcionarios.
Recordó que en una visita reciente a México, el analista de la ONU, Edgardo Buscaglia, señaló que a nivel mundial nuestro país ocupa el sexto lugar entre los países con mayor presencia de crimen organizado y que estos grupos han logrado relacionarse con el poder político, particularmente a nivel municipal.
El experto dijo que México sólo está por debajo de Afganistán, Irak, Paquistán, Nigeria y Guinea Ecuatorial, en cuanto a la presencia y nivel de operaciones de la delincuencia organizada: “Mundialmente, el crimen tiene presencia en 38 países”, subrayó.
Violeta Lagunes señaló que se calcula que entre el 50 y el 60 por ciento de las alcaldías a nivel nacional podrían tener algún vínculo con grupos del narcotráfico y en este sentido, advirtió, “la actual estrategia del gobierno del combate al crimen organizado no será eficiente si no se rompen las redes financieras y los nexos del crimen con el poder político”.
Agregó que los funcionarios públicos han sido “capturados” por delincuentes principalmente vía sobornos, amenazas, extorsiones, nexos de amistad o familiares, incluso casos en los que son miembros de organizaciones delictivas.
“Al parecer la delincuencia organizada cuenta con un eje de dirección y mando, por ello actúa como si sus dirigentes fueran la autoridad y sus reglas. En los últimos 10 años, la violencia y los crímenes se han salido de los esquemas tradicionales, dejaron de ser una delincuencia menor y doméstica, para convertirse en una delincuencia organizada, transnacional, con participación de funcionarios públicos de diversos niveles de gobierno”.
Insistió que las bandas criminales que emplean sus propias técnicas, métodos e ideología, han podido asociarse a funcionarios públicos dedicados al secuestro, la extorsión, el narcotráfico, el acopio y tráfico de armas, el tráfico de órganos, la prostitución y explotación de menores, al robo de autos, y una lista interminable de ilícitos.
2 comentarios:
Murcia terminará pronto de manera parecida...
Aqui podrían inaugurar la de Campos del Rio.
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