El AVE tardará, al menos, cinco años en llegar a la Región

MURCIA.- Si alguien hubiera advertido hace siete años, cuando se firmó el Pacto de Murcia, que el tren de alta velocidad tardaría al menos 13 años en llegar a la capital de la Región nadie se lo habría creído.

Si además hubiera predicho que las obras no se iban a realizar simultáneamente, como se acordó solemnemente, lo habrían tildado de agorero. Y si hubiera avisado de que los trenes no van a alcanzar los 300 kilómetros por hora, sino que el trazado más próximo a Murcia no permitirá velocidades superiores a los 220 kilómetros, le habrían echado a gorrazos en aquellos días de euforia ferroviaria.

Lamentablemente, los hechos y los retrasos están dado la razón a las predicciones más negativas, según "La Verdad".

La alta velocidad no llegará a la ciudad de Murcia antes de cinco años -Cartagena ni se sabe- según los plazos que barajan el Ministerio de Fomento y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). El AVE, sea de primera categoría o de altas prestaciones, no estará antes del 2014. Con los cálculos más optimistas, ese tren circulará por la Región dos años después de que lo haga por Alicante y cuatro después que Valencia.

Suponiendo que las protestas en los municipios de Callosa del Segura, Orihuela y Beniel no retrasen más el proyecto, las obras de los tramos licitados y adjudicados en la Vega Baja de Alicante ­a excepción del que transcurre por Callosa, que está pendiente- necesitan un plazo de ejecución de 34 meses, si se toma como base el trayecto de 6,88 kilómetros recién adjudicado a Sacyr por un valor de 119,8 millones de euros. Este subtramo está comprendido entre Orihuela y Colada de la Buena Vida, cerca de Beniel.

El resto de tramos que discurren por la Vega Baja, hasta sumar 21,9 kilómetros, ha sido licitados y están pendientes de ser adjudicados. Si las obras comienzan el próximo verano, la plataforma para la alta velocidad no estará terminada hasta el 2012.

Posteriormente hay que contratar la instalación de las vías, que requiere otro periodo administrativo de licitación y adjudicación. Por último, quedará el contrato para electrificar la red. El Gobierno murciano opina que, si no hay contratiempos, se necesitarán al menos cinco años para que el AVE llegue a la capital de la Región.

Los responsables de Adif han señalado que piensan seguir adelante con los tramos licitados en Orihuela y Beniel, donde esperan que se llegue a un acuerdo sobre el trazado. En Callosa del Segura, el Ministerio ha rechazado el proyecto que el presentó el Ayuntamiento y no hará cambios en el trazado. En lugar de taludes se construirá un viaducto, según una modificación pactada a principios de diciembre.

El Ministerio de Fomento y Adif no se atreven a dar fechas. La secretaria general de Infraestructuras, Josefina Cruz, declinó dar una durante su visita a Cartagena en diciembre. Con anterioridad, Santiago Cobo, director de la línea de alta velocidad, tampoco quiso mojarse cuando visitó en agosto el tramo de acceso a Murcia a través del Reguerón.

Las únicas fechas comprometidas por el Ministerio atañen a Alicante, que tendrá AVE en el año 2012, según la ministra Magdalena Álvarez. No se descarta que sea un año antes. En cuanto a Valencia, que cuenta con una línea directa con Madrid a través de Motilla del Palancar y Cuenca, se espera que sea en el 2010.

El retraso que acumulan las obras del AVE en Murcia, que nadie niega a estas alturas, vulnera los compromisos que se adoptaron en enero del 2001 en Murcia, cuando se reunieron en el Palacio de San Esteban el ministro Francisco Álvarez Cascos y los presidentes autonómicos Ramón Luis Valcárcel, Alberto Ruiz Gallardón, José Bono y Eduardo Zaplana. Entre todos acordaron que la ejecución de los tramos se haría de forma simultánea.

Dicha simultaneidad se entendía que era flexible, pero el objetivo marcado fue que ninguna capital se quedaría descolgada. No obstante, una diferencia de dos a cuatro años entre Murcia y el resto de comunidades resulta clamoroso.

Alicante y Murcia tenían el obstáculo del nudo de comunicaciones de La Encina, donde se distribuyen todos los tráficos del corredor Mediterráneo y Centro, pero este problema parece resuelto puesto que no será necesario un trámite ambiental. Las obras se adjudicarán en breve.