Por si Pedro Saura tuviera poca ocupación de cara al congreso regional del 18 de julio, Ramón Luis Valcárcel se ha encargado de echarle una mano, poniendo más deberes. El Debate sobre el Estado de la Región se ha marcado para los días 11 y 12 de julio, una semana antes del cónclave de los socialistas murcianos, al que se han anunciado ya dos candidaturas, la de los ‘sauristas’ y la de los ‘marmolistas’.
Las peticiones del principal partido de la oposición regional de buscar otras fechas no han encontrado eco en el Gobierno Regional, ya que según San Esteban no existen otras fechas en una agenda muy intensa. “Parece que Valcárcel intenta echar una mano a los alternativos del PSRM”, ironiza un veterano militante socialista.
En principio, parece que el primer debate sobre la Región tras las pasadas elecciones autonómicas, que lógicamente se centrará en la actual situación económica, se podría presentar un poco descafeinado, ya que los socialistas estarán en plena batalla interna intentando fidelizar delegados, con Pedro Saura al melón y a las tajadas y movimientos en los pasillos por los dos sectores.
Tampoco el presidente de la Comunidad se da mucho tiempo para su preparación, ya que es presidente del comité organizador del Congreso Nacional del PP en Valencia y eso también requiere dedicación. Además, como ‘barón periférico’ de los populares no puede quedarse al margen del duro y agrio debate interno que se está produciendo en las filas de su partido, porque el patio en Génova está cada día más revuelto y el encuentro de Valencia no se avista precisamente como una balsa de aceite.
Pero, en su caso, puede deslindar los dos trabajos, descargando la preparación y elaboración del balance de su primera gestión en los consejeros y colaboradores, bajo su coordinación personal. Y además, en el debate como tal, está respaldado por una apabullante mayoría parlamentaria leal. Mientras que Saura tiene ‘críticos’ en su filas. Puede ser una oportunidad de lucimiento para Pujante, el diputado de Izquierda Unida, apunta un observador parlamentario.
Con el debate y los congresos se cerrará la primera etapa de esta legislatura. En el aire está la posible remodelación del Gobierno Regional.
Las peticiones del principal partido de la oposición regional de buscar otras fechas no han encontrado eco en el Gobierno Regional, ya que según San Esteban no existen otras fechas en una agenda muy intensa. “Parece que Valcárcel intenta echar una mano a los alternativos del PSRM”, ironiza un veterano militante socialista.
En principio, parece que el primer debate sobre la Región tras las pasadas elecciones autonómicas, que lógicamente se centrará en la actual situación económica, se podría presentar un poco descafeinado, ya que los socialistas estarán en plena batalla interna intentando fidelizar delegados, con Pedro Saura al melón y a las tajadas y movimientos en los pasillos por los dos sectores.
Tampoco el presidente de la Comunidad se da mucho tiempo para su preparación, ya que es presidente del comité organizador del Congreso Nacional del PP en Valencia y eso también requiere dedicación. Además, como ‘barón periférico’ de los populares no puede quedarse al margen del duro y agrio debate interno que se está produciendo en las filas de su partido, porque el patio en Génova está cada día más revuelto y el encuentro de Valencia no se avista precisamente como una balsa de aceite.
Pero, en su caso, puede deslindar los dos trabajos, descargando la preparación y elaboración del balance de su primera gestión en los consejeros y colaboradores, bajo su coordinación personal. Y además, en el debate como tal, está respaldado por una apabullante mayoría parlamentaria leal. Mientras que Saura tiene ‘críticos’ en su filas. Puede ser una oportunidad de lucimiento para Pujante, el diputado de Izquierda Unida, apunta un observador parlamentario.
Con el debate y los congresos se cerrará la primera etapa de esta legislatura. En el aire está la posible remodelación del Gobierno Regional.
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