La Universidad Católica de San Antonio es una institución de la Iglesia Católica, pero la titularidad, las facultades de gobierno, gestión y administración corresponden a perpetuidad a la Fundación San Antonio, es decir a José Luis Mendoza. Si el Obispo de la Diócesis de Cartagena no está de acuerdo puede presentar un recurso contencioso administrativo o llevar el tema en el interno de la Iglesia, viene a decir más o menos la resolución del Consejo de Gobierno.
La situación es cuando menos peculiar, si la titularidad es de La Fundación San Antonio y no de Iglesia, según los estatutos la UCAM es de un particular, algo que dicen no está recogido en la legislación española. Por otro lado, siendo José Luis Mendoza, un católico, apostólico y romano confeso, ¿qué incoveniente puede tener en que la titularidad pertenezca a la Diócesis de Cartagena?. En la polémica entre el Obispado y Mendoza, el Gobierno Regional ha optado por la salida más comoda y, como comenta un jurista, se ha lavado las manos.
Ahora habrá que esperar a ver como reacciona Reig Plá, que ha abierto el tema, aunque de momento se ha encontrado en Mendoza un duro rival. No en vano el presidente de la Fundación San Antonio mantiene muy buenas relaciones tanto con la cúpula del episcopado español, incluido el presidente de la Conferencia Episcopal, al igual que con el Vaticano. Es de suponer que el titular de la Diócesis de Cartagena no se ha de quedar de brazos cruzados, porque en la web del Obispado siguen defendiendo la titularidad.
También los socialistas ya han anunciado que tras la decisión del Ejecutivo Regional llevarán el tema a los tribunales, porque no están de acuerdo con el galimatías montado en torno a la titularidad. Insisten en que lo lógico fuera que la gestión, las facultades de gobierno y la administración correspondan a la Fundación San Antonio, pero la titularidad de la Universidad no puede estár en manos de un particular.
El tema de origen está, según el informe jurídico del Gobierno Regional, en el Decreto de Erección de 1996, por el que el obispo Javier Azagra encomendaba la titularidad y la gestión a la Fundación San Antonio. Posteriormente, monseñor Ureña no entro en el tema pero fue con la llegada del actual titular, el obispo Reig Plá, cuando se produjo el enfrentamiento con los estatutos.
El titular de la Diócesis considera incluso que los estatutos son nulos ya que no contaron con él, como Gran Canciller, para su aprobación. La resolución del Gobierno Regional parece que no ha resuelto el problema y no es dífícil que sigan los pleitos.
La crispación no gusta a los ciudadanos
Comentaba un histórico popular murciano con cierta pena por el expectáculo precongresual de su partido: “A este paso tenemos Gobierno Zapatero para ocho años”. La crispación interna en el PP a nivel nacional ya se ha reflejado en los sondeos del CIS, con los socialistas abriendo brecha. Y eso que las encuentas entre los ciudadanos se realizaron antes de que la crisis alcanzará puntos más álgidos como la salida de María San Gil o el desmarque de Elorriaga, entre otros.
De momento en la Región las cosas sólo se ven con preocupación, porque ahí el bloque popular es monolítico y los 117 avales de la Comunidad van para Mariano Rajoy. Los dirigentes regionales rezan para que tras el cónclave de Valencia del próximo mes se cierren las heridas.
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