MURCIA.- La Mesa Nacional de Frutos Secos, integrada
por las organizaciones agrarias Asaja, Coag y UPA, Cooperativas
Agro-alimentarias de España, y la Asociación Española de Organizaciones
de Productores de Frutos Secos y Algarrobas (Aeofruse), prevé una
producción nacional de almendra para esta campaña de 32.053 toneladas de
almendra grano. La cifra es una de las más bajas de los últimos 10 años
y supone un descenso del 30,48% con respecto a la campaña pasada.
Las principales razones son las heladas de febrero y marzo, que
afectaron mayoritariamente a las variedades de floración temprana,
además de los problemas de polinización debido a las continuas lluvias
en el momento de la floración y el agotamiento de las plantaciones como
consecuencia de periodos de sequía en años anteriores.
También se han observado dificultades en la producción debido a la
presencia de enfermedades como la monilia y la afección de gusano
cabezudo.
En el caso de Murcia, Fecoam señala que la reducción es del 20%,
al pasar de 7.900 toneladas en 2012 a 6.320 este año. La variación
respecto a la media de 2008 a 2012 es también del 21,27%. El
representante sectorial de Frutos Secos, Pedro Guerrero, destaca que la
cifra significa la mitad de lo que podría calificarse como una buena
campaña.
Explica que las heladas de finales de marzo hicieron mucho daño a
las variedades tempranas y que la gran preocupación del sector ahora
mismo es la inestabilidad meteorológica de las últimas semanas de la
primavera, por la amenaza de que se pueda producir una tormenta de
granizo como la del pasado 27 de mayo, que afectó principalmente a Mula.
También se lamenta de que el constante aumento del precio del
gasóleo y de los fitosanitarios hace que los costes de producción se
disparen. En lo que respecta al precio de mercado, señala que la
almendra española en cáscara se sitúa entre 5,30 y 5,40 euros. El
representante sectorial de Fecoam asegura que algunas cooperativas ya
están cerrando contratos para el mes de septiembre con estas cantidades.
Asimismo, resalta que el sector reclama más apoyo para llevar a
cabo una importante reconversión varietal y que sigue preocupado por el
Plan de Gestión Integral de los Espacios Protegidos Red Natura 2000 del
Noroeste, puesto que es uno de los más afectados al contar con unas
46.000 hectáreas (de las 69.000 que hay en total) dentro del área de
influencia de la futura normativa medioambiental.
Los productores critican que el plan prohíbe las transformaciones
agrícolas de secano a regadío y de cultivos herbáceos de secano
(cereales) a cultivos arbóreos de secano (almendros), con el fin de
favorecer las especies de aves esteparias. Guerrero recuerda que los
cereales tienen una escasa rentabilidad en la Región por la escasez de
lluvias y las altas temperaturas y que el almendro es el único frutal
que es "medio rentable" en secano, por lo que la medida condenaría a los
agricultores a perder dinero.
También destaca que, a pesar de que se han presentado más de
11.000 alegaciones al plan del Noroeste y que el Gobierno regional
asegura que se tendrán en cuenta el 99%, no hay un nuevo borrador
oficial del documento después de cuatro meses.
Dada la situación de precios de los últimos años que viene
arrastrando la almendra y el comprometido futuro por la fuerte
competencia internacional, fundamentalmente de California, Fecoam
considera que es "absolutamente imprescindible" el aporte de ayudas de
las administraciones para la supervivencia de unos cultivos que no son
viables, ni rentables por sí solos, pero que, entre otros múltiples
beneficios, contribuyen a la lucha contra la erosión y la desertización,
favorecen la actividad y el empleo rural, especialmente en zonas
desfavorecidas, y contribuye a la biodiversidad.
La organización insiste en fomentar el consumo de almendra
murciana, por su calidad y por todas las bondades que este producto
tiene para la salud puesto que, además de un importante efecto
antioxidante, aporta gran cantidad de energía, tiene un bajo contenido
en azúcares (por lo que se puede recomendar en las dietas de personas
diabéticas) y contribuye a reducir el riesgo a padecer problemas
cardiovasculares.