MADRID.-
Uno de cada cinco españoles, el 22,1 % de la población, se encuentra en
riesgo de pobreza, es decir que vive con menos de 8.011 euros anuales,
al tiempo que los ingresos de los hogares han caído un 0,2%, hasta los
26.092 euros al año.
No
obstante, el ingreso medio por persona ha crecido el 0,3%, hasta 10.419
euros, lo que se explica por la reducción del tamaño medio del hogar.
Estos
son los últimos datos de los que dispone el Instituto Nacional de
Estadística (INE), que forman parte de la Encuesta de Condiciones de
Vida (ECV) elaborada con datos de 2014 y difundida hoy, y que en cuanto al riesgo de pobreza se mantiene en similar porcentaje.
Advierte
el INE de que la tasa de riesgo de pobreza de los menores de 16 años es
del 28,8 %, es decir que afecta a casi uno de cada tres, mientras que
la de los mayores de 65 años es del 12,3 %.
El
"riesgo de pobreza", explica Estadística, es un indicador que mide
desigualdad, no pobreza absoluta, sino cuántas personas tienen ingresos
bajos en relación al conjunto de la población.
Así,
calculando el total de ingresos de la población en 2014, la tasa de
riesgo de pobreza alcanza el 22,1 %, una décima menos que un año antes.
Dificultades para llegar a fin de mes
En
cuanto a la situación económica de los hogares, aunque ha mejorado
ligeramente, el 13,7 % de ellos llega a fin de mes con "mucha
dificultad" y casi el 40 % no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos.
Además,
el 40,6 % no puede ir de vacaciones ni una semana al año y el 9,4 % se
retrasa en los pagos relacionados con su vivienda (hipoteca, alquiler,
gas, electricidad, comunidad...).
El porcentaje de la población
española que vive en riesgo de pobreza se eleva hasta el 28,6 % (con una
caída de 0,6 puntos en un año) si se utiliza el indicador Arope (siglas
de At Risk Of Poverty or social Exclusión) que es el que figura en la
estrategia Europa 2020 de la Unión Europea.
Este indicador, además del riesgo de pobreza, tiene en cuenta la baja intensidad de empleo en
los hogares y la carencia material severa, como no poder comer carne,
pollo o pescado cada dos días, no poder tener coche, calefacción, o
lavadora, o no disponer de 650 euros para gastos imprevistos, entre
otros factores.
En su estadística, el INE ha dividido a la
población española en cinco grupos o "quintiles" (es decir que cada uno
contiene al 20 % de los ciudadanos) en función de sus ingresos.
Y
de este reparto se desprende que el 41,8 % de la población con educación
superior esta en el quinto quintil (el de mayores ingresos), mientras
que un porcentaje similar de los ciudadanos, el 41,5 % de los parados se
encuentra en el primer quintil (el de menores ingresos). Sólo el 7 % de
quienes más tienen están desempleados.
Si se tiene en cuenta la
nacionalidad, el 16,7 % de los españoles se encuentra en el grupo de
menores ingresos, un quintil al que pertenecen el 30 % de los
extranjeros de la Unión Europea y el 51,7 % de los de fuera de la UE.
Por
tamaño de hogar, en el quintil más pobre, están el 36,8 % de los
hogares con 5 miembros o más, mientras que al más rico sólo pertenecen
el 14,1 % de estas familias numerosas.
Nivel de estudios
La
tasa de riesgo de pobreza también se puede desagregar en función de
características como el nivel de estudios o el tipo de hogar, lo que
refleja mayor pobreza entre los menos formados y en las familias con niños dependientes.
Así,
el 29,9 % de quienes sólo tienen un nivel educativo equivalente a la
primera etapa de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) está en
riesgo de pobreza.
Un porcentaje que se reduce hasta el 9,8 % entre quienes han cursado educación superior.
Por
tipo de hogar, el 37,5 % de quienes viven en hogares formados por un
adulto con hijos dependientes a cargo están en riesgo de pobreza.
La menor tasa de riesgo de pobreza es la de los hogares de dos adultos sin niños dependientes (15,2 %).
También el 44,8 % de los parados está en riesgo de pobreza, al igual que el 10,3 % de los jubilados.
Por
nacionalidad, el porcentaje de personas por debajo del umbral de riesgo
de pobreza es del 18,8 % para los españoles, del 33,3 % para los
extranjeros de la UE y del 55,3 % para quienes no pertenecen a la UE.
El
INE explica en la encuesta que, si se imputa a cada hogar un cálculo
aproximado de un pago mensual de alquiler o hipoteca por cada uno de sus
miembros, la tasa de pobreza se reduce al 19,5 % (6,3 % para los mayores de 65 y 28,7 % para los menores de 16 años).
Por
comunidades autónomas las tasas de riesgo de pobreza más elevadas son
las de Andalucía (35,7 %), Murcia (31,8 %) y Extremadura (29 %), y las
más bajas a Navarra (9,6 %), País Vasco (10,9 %) y Cataluña (13,9 %).