miércoles, 30 de octubre de 2019

Unos 60.000 cartageneros de clase media se manifiestan en auxilio del Mar Menor y dejando fina a la clase política


CARTAGENA.- Unos 60.000 cartageneros, la mayoría de clase media y propietarios (ahora con patrimonio inmobiliario de segunda residencia depreciado) o veraneantes en la ribera este y sur de la albufera murciana se han manifestado esta tarde durante dos horas y media por el centro de Cartagena (un kilómetro de trayecto desde del comienzo de la Alameda de San Antón al final del Paseo de Alfonso XIII), en auxilio del Mar Menor y, de paso,  dejando fina a la clase política en general y a la que se ha atrevido a aparecer entre las buenas gentes teniendo que soportar una fuerte pitada y gritos de ¡fuera, fuera, fuera!, casos de Cristina Narbona y Diego Conesa, del PSOE. Y muchas alusiones a la incrustada contaminación de la bahía de Portmán en algunas de las pancartas después de tantas décadas de promesas y más promesas, grosera e impúdicamente incumplidas, por toda laya de políticos en el poder de turno.

Un mínimo de 55.000 personas con picos de más de 60.000, según la Policía Local y la Policía Nacional de Cartagena, se han manifestado por sus calles para pedir la recuperación ambiental del Mar Menor tras la muerte de toneladas de peces el pasado 12 de octubre por falta de oxígeno en el agua.

La manifestación ha sido verdaderamente multitudinaria. Familias enteras, niños, jóvenes, mayores y muy mayores.

Con esa gente de todas las edades, algunas vestidas de luto, disfrazadas de caballito de mar y con camisetas con la leyenda "SOS Mar Menor", entre los manifestantes de este miércoles resaltaban dos exministras de Medio Ambiente, la socialista Cristina Narbona y Elvira Rodríguez, del PP, el cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero y altos cargos del Gobierno de coalición murciano PP-C's, como su vicepresidenta Isabel Franco, de C's, aunque no su compañero de partido y presidente de la Asamblea Regional, Alberto Castillo.

En la cabecera de la manifestación estuvieron, entre otros representantes, el presidente de la Federación de AA VV, Leandro Sánchez; la portavoz de Pacto por el Mar Menor, Celia Martínez y el director de ANSE, Pedro García. Tampoco faltó la anterior asociación SOS Mar Menor.
 
Jornada histórica pues la vivida este miércoles tarde-noche en Cartagena con miles y miles de personas, según fuentes de los organizadores y de la Policía Nacional auxiliada de un visible dron profesional para calcular la asistencia con un programa informático que calibra un número muy aproximado de cabezas, manifestándose para exigir soluciones a la crisis ambiental que vive el Mar Menor.

Convocados por la Federación de Asociaciones de Cartagena y Comarca, los manifestantes han salido a las 18.00 horas de la Alameda de San Antón y se han dirigido hacia el paseo de Alfonso XIII donde, en torno a las 20.00, se ha leído un manifiesto, frente a la Asamblea Regional. La escritora María Dueñas, junto a varios de los organizadores, ha sido la encargada de ponerle voz.

Bajo el lema SOS Mar Menor, la manifestación pretendía ser un grito unánime de la sociedad para exigir a los políticos que tomen medidas urgentes para salvar la laguna salada. Con pancartas en las que se podía leer 'No hay trato con los nitratos' o 'Políticos, habéis dejado morir al Mar Menor', los convocantes han exigido soluciones a un problema que viene de lejos, y que ha convertido a la laguna, de nuevo, en 'una sopa verde'.

Apoyada por Pacto por el Mar Menor, grupos ecologistas como ANSE y Ecologistas en Acción, además de la Cofradía de Pescadores de San Pedro del Pinatar, en ella han participado no sólo vecinos de los municipios ribereños del Mar Menor sino también simbólicamente ciudadanos que se han desplazado desde numerosos puntos de la Región para exigir soluciones al problema de la laguna salada.

De Murcia han salido varios autobuses fletados por la Plataforma Pro-Soterramiento, la Marea Blanca y los Yayoflautas, así como de otros puntos de la comarca de la Vega Media del Segura e incluso de Lorca. También han contribuido al éxito de la convocatoria colectivos como Greenpeace, Contra la autovía del bancal y la Plataforma de Afectados por los Metales de la Sierra Minera de Cartagena.

Sólo en el sector pesquero los daños son cuantiosos, ya que según los pescadores, "mucha gente no quiere comprar productos del Mar Menor, y varias personas se han ido al paro". Son 150 las familias que dependen de la pesca en la laguna. A ellos hay que sumar muchos empleos indirectos en sectores como la Hostelería.

Pese al llamamiento a la despolitización por parte de los convocantes, en la manifestación han participado representantes de casi todos los partidos políticos, aunque la presión social no les ha dejado ponerse en la cabecera.

Así, se han sumado varios consejeros del Gobierno regional, como Antonio Luengo y Manuel Villegas, entre otros; además de políticos de C's, como la vicepresidenta del Gobierno, Isabel Franco.

Por el PSOE, participaron Diego Conesa o la presidenta federal, Cristina Narbona. También había representantes de Unidas Podemos, como Juan Carlos Monedero, y de Más País, con su candidato regional Óscar Urralburu a la cabeza, según la crónica de la Cadena SER en la Región de Murcia.

Entre las consignas destacaban "Justicia para el mar, responsables a pagar" o "Nos falta la paciencia por vuestra incompetencia", y de las pancartas, algunas en las que se leía: "Ya no hay peces en el Mar Menor, solo besugos para gobernar", "Agroindustria + vertidos = Mar Menor perdido" o "Pobre Mar Menor, 25 años de Gobiernos regionales del PP... ¡Culpables!".

La organización conjunta -Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena y Comarca, Asociación de Naturalistas del Sureste, Ecologistas en Acción, Pacto por el Mar Menor y cofradía de pescadores de San Pedro del Pinatar- ha sostenido que en los últimos 25 años el Gobierno regional ha tratado a la gente como "estúpida".

"Han eliminado las leyes de protección del Mar Menor, han impulsado grandes recalificaciones de suelos que solo la ruina inmobiliaria y la acción judicial han impedido que salieran adelante construcciones", sostiene el manifiesto leído ante el Parlamento regional.

Y añade: "Han favorecido un crecimiento irracional de la agroindustria más allá de cualquier límite con el beneplácito de la Confederación Hidrográfica del Segura", dependiente del Gobierno central, pero ahora el Ejecutivo murciano "ha entrado en pánico".

"Ya no se acuerda de que había quitado importancia a quienes veníamos advirtiendo que la laguna estaba muy enferma, que éramos unos exagerados, que perjudicábamos la imagen de la región, del turismo y de la economía..., pero volvió a tratarnos como estúpidos al decir que rea consecuencia" de la gota fría de septiembre, ha leído una portavoz.

Han afirmado no fiarse de que sigan engañándolos, por lo que han exigido "que las decisiones se tomen en órganos de participación ciudadana real", sin que el Gobierno murciano "se aproveche de comités de expertos a los que ningunean hasta aburrir y desanimar a quienes más saben, cuando son tan necesarios", en referencia a la dimisión de ocho de los miembros que asesoran a ese Ejecutivo.

Por último, han pedido "coordinación y colaboración real entre todas las administraciones, con reparto de competencias adecuado. No vale pedir socorro al Estado y criticarlo al minuto siguiente y ejecutar solo las medidas que benefician a los de siempre".

El presidente de Murcia, Fernando López Miras, ha dicho este miércoles en una declaración institucional posterior a la manifestación que "es obvio no se ha hecho lo suficiente para proteger el Mar Menor y su riqueza ecológica y cultural".

Al término de la manifestación, ha señalado en la sede del Gobierno regional en Murcia que no pondrá "paños calientes", sino "medidas claras y contundentes de protección y recuperación" en la ley integral que prepara en un plazo de dos meses, porque "no tiene más espera" y "no habrá prioridad mayor".

En Twitter, el presidente del Gobierno de España en funciones, Pedro Sánchez, ha escrito esta tarde: "El Mar Menor agoniza. Hoy miles de personas salen a la calle en Cartagena para lanzar una llamada de auxilio y exigir responsabilidades. Nuestro compromiso está con su regeneración. Urge actuar, trabajar juntos para convertirlo en ejemplo de prosperidad sostenible. SOS Mar Menor".

Monedero ha llamado a "controlar pozos y desalinizadoras ilegales" y advertido "a grandes empresas como ElPozo o Agroexport que controlen a los pequeños productores a los que nos les pagan lo suficiente para que cumplan los mínimos requisitos medioambientales que les permitan sobrevivir sin salidas paralelas".

Narbona ha indicado que "se ha llegado al límite de vertidos contaminantes, lo que los científicos llevan mucho tiempo advirtiendo" y cuando era ministra "ya se hizo un diagnóstico muy certero de lo que estaba pasando y el Gobierno de Murcia, con competencias en regadíos y urbanismo, no quiso en absoluto contribuir a frenar ese proceso" y sostuvo que "esto de la contaminación era poco menos que un invento de los ecologistas".





 Varios líderes de la sociedad civil de la Región 
presentes junto a los cartageneros

Entre las miles de personas de Cartagena y comarca del Mar Menor asistentes esta noche en demanda de auxilio para el Mar Menor, se ha podido ver presentes en la manifestación a líderes clásicos de la sociedad civil en la Región caso del catedrático emérito de la Universidad de Murcia, Francisco Jarauta; el líder ecologista Rubén Vives; el arquitecto Felipe Iracheta; el biólogo Herminio Picazo; el abogado Diego de Ramón; el ex concejal lorquino de C's, Antonio Meca; los profesores universitarios y ecologistas Miguel Ángel Esteve y Julia Martínez; la portavoz de la Plataforma Salvemos el Faro de Cabo de Palos, la química y profesora Gloria Moya; el hidrogeólogo de la Confederación Hidrográfica del Segura y presidente del Comité de Personal, por CC OO, de las Administraciones Públicas del Estado en la Región, Francisco Turrión. Y del Foro Ciudadano, estaba el catedrático de Filosofía de la UMU, Antonio Campillo.

Entre los políticos asistentes, los del PP fueron los que mas arrojo le han echado asistiendo, desde Noelia Arroyo a José Miguel Luengo y Visitación Martínez, alcaldes de San Javier y San Pedro del Pinatar respectivamente, que lo hicieron a la cola de la marcha discretamente tras concentrarse previamente en el bar 'Coliseo' junto a concejales del PP en el Ayuntamiento de Cartagena y un consejero Antonio Luengo rodeado de guardaespaldas.

Mas discreta todavía la alcaldesa de Cartagena expulsada del PSOE, Belén Castejón, con sus concejales; se echaba de menos a los políticos de Vox aunque su diputado regional, el cartagenero Juan José Liarte, presenció como espectador el comienzo de la marcha. 

Sí se pudieron ver también las banderas de la provincia marítima de Cartagena portadas por gentes del Movimiento Ciudadano. Algunos residentes extranjeros junto al Mar Menor enarbolaron, por su parte, varias de la Unión Jack.



Lectura del Manifiesto SOS Mar Menor

La destacada escritora cartagenera María Dueñas ha leído al final de la manifestación frente a la Asamblea Regional el Manifiesto consensuado por las cinco organizaciones convocantes: la plataforma Pacto por el Mar Menor, ANSE, Ecologistas en Acción, Cofradía de Pescadores de San Pedro del Pinatar y la Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena y Comarca.

El Mar Menor nos define e identifica, está presente en nuestros recuerdos y vivencias, ha sido nuestra casa y lugar de vacaciones, y queremos que siga siendo nuestro futuro.

Es posible que muchas personas opinen que esta manifestación es el resultado de un fracaso..., sobre todo político, de las mismas proporciones que el que hizo desaparecer la bahía de Portmán y destruyó buena parte de la Sierra Minera, y el mismo Mar Menor, demostrando que el desarrollo económico sin respetar el Medio Ambiente produce a la postre más pobreza y desigualdades sociales, e hipoteca nuestro futuro y el de nuestros hijos.


Durante los últimos 25 años, los diferentes gobiernos regionales nos han tratado como estúpidos. Han eliminado las leyes de protección del Mar Menor, impulsado grandes recalificaciones de suelos, que solo la ruina inmobiliaria y la acción judicial han impedido que salieran adelante, y favorecido un crecimiento irracional de la agroindustria más allá de cualquier límite, con el beneplácito de la Confederación Hidrográfica del Segura.


Y hasta hace apenas unas pocas semanas, seguían manteniendo que la mayor laguna litoral española estaba mejor que nunca, y todo gracias a ellos.


Hace unos días el Mar Menor nos arrojó nuestra estupidez a la cara, nos enseñó que todavía podía ser peor, que además de aguas verdes y fondos sin oxígeno, la muerte podría llegar de forma masiva a nuestros pies, en forma de miles de anguilas, quisquillas, doradas o cangrejos, y nos estremeció...


Y los responsables del Gobierno Regional entraron en pánico. Ya no se acordaban que habían quitado importancia a quienes veníamos advirtiendo que la laguna estaba muy enferma, que eramos unos exagerados, que perjudicabamos la imagen de la Región, del turismo y de la economía...


Volvieron a tratarnos como estúpidos, diciendo que era consecuencia de la Dana, mientras la agroindustria seguía incumpliendo las normas europeas, y las redes de alcantarillado de muchos pueblos se desbordaban arrojando sus aguas a la laguna una vez más.


Han malgastado muchos millones de euros en depósitos de hormigón o rampas para motos de agua que no solucionaban los problemas del Mar Menor, y ahora quieren que el Estado nos salve ante tanta irresponsabilidad. 


Y dicen que nos endeudaremos aún más si fuera necesario para salvar el Mar Menor; ahora si dicen que hay que salvarlo, que es un asunto de estado, que es un asunto europeo, que es un asunto mundial, pero los pescadores aún no tienen garantizadas las ayudas por dejar de pescar y recuperar la pesca.

Y, también ahora, piden medidas urgentes, y declaración de emergencia, y ayudas europeas y unidad...


Y nosotros les decimos que estamos hartos de mentirosos, incompetentes, y defensores de intereses privados en cargos públicos... y les exigimos cambios reales, porque si no llegan
pronto deberían de irse cuanto antes para que los hagan otras personas.


Recuperación, si, de paisajes cada vez más perdidos y olvidados, de molinos de viento, de embarcaciones a vela...


Y como no nos fiamos de que sigáis engañándonos, queremos que las decisiones se tomen en órganos de participación ciudadana real, y no aprovechéis Comités de Expertos que ninguneáis hasta aburrir y desanimar a quienes más saben, cuando son tan necesarios.


Y exigimos coordinación y colaboración real entre todas las administraciones, con reparto de competencias adecuado. No vale pedir socorro al Estado y criticarlo al minuto siguiente, y ejecutar solo las medidas que benefician a los de siempre.


Y confiamos en un buen resultado de las acciones judiciales actuales y futuras, pero sobre todo confiamos en la movilización ciudadana.


Y todo esto lo decimos a esta hora, a la que en las zonas más profundas del Mar Menor reina el silencio porque la mayoría de sus habitantes han tenido que huir hacia las orillas buscando oxígeno, pidiéndonos ayuda.


A esta hora en que un susurro es suficiente para que llegue hasta el lo más profundo, para ser devuelto de inmediato y convertirse en un grito desesperado. Devolvedme de nuevo la vida que os he regalado, por vuestro propio bien y por quienes vendrán después de vosotros.


Gracias por convertir toda la tristeza e impotencia en rabia y protesta. Gracias por pasar de la resignación a la indignación y gritar más fuerte que nunca que no vamos a seguir consintiendo semejante incompetencia de los poderes públicos.

¡POR EL FUTURO DE NUESTRA TIERRA, DE NUESTROS HIJOS, NO PARAREMOS HASTA SALVAR EL MAR MENOR! 

Posteriormente reforzaron el Manifiesto con sus intervenciones finales Celia Martínez, del Pacto, Sonia Vera, de la Cofradía, e Irene Liarte, de la Federación, y todas cargaron contra la gestión del Gobierno regional y de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) y les exigieron a todos ellos unidad para tomar medidas urgentes y definitivas.

Además, mostraron su confianza en la acción de la Justicia, para castigar a los responsables de la contaminación (citaron la «agroindustria») y pidieron un «grito» por la albufera.

Y al final de todo, una gran pancarta horizontal de varios metros quedó como testimonio y parte de la fachada de la Asamblea Regional para que no les pase desapercibida mañana jueves a ninguno de los 45 diputados que, al menos, acudan a cobrar la dieta.

Reza así: "Protejamos el Mar Menor".


López Miras comparece tras pedirse su dimisión 
al final de la convocatoria cartagenera

MURCIA.- Nada más terminar la manifestación de Cartagena, que concluyó frente a la Asamblea Regional con la lectura del Manifiesto y gritos del público pidiendo la dimisión del mismo López Miras, el todavía presidente de la Comunidad Autónoma compareció en rueda de prensa en el Palacio de San Esteban, en Murcia, y pidió  no buscar responsables políticos en cuanto a la gestión y el cuidado de la laguna salada: 

"No perderé un segundo en determinar si los gobiernos que me precedieron realizaron todo lo que estuvo en sus manos porque ese segundo, en mi opinión, estaría perdido y prefiero sumarlo a las muchas horas de trabajo que tenemos por delante".

Ante la petición este miércoles desde las calles de Cartagena de medidas urgentes para proteger el Mar Menor y la dimisión de Fernando López Miras como presidente de la Comunidad Autónoma, éste ha contestado además que "ya no es útil echar la vista atrás" y explicó que "lo útil, lo adecuado y lo necesario es mirar al frente porque enzarzarnos en disputas políticas solo nos aleja del objetivo, que no es otro que sumar voluntades y trabajar en equipo por la recuperación del Mar Menor".

En este sentido, explicó que "estamos trabajando e incluyendo en la redacción de una Ley de Protección Integral del Mar Menor medidas claras y contundentes de protección y de recuperación", y aseveró que "todos los sectores deberán hacer concesiones porque así lo exige la situación".


¿Qué hace aquí el Gobierno? / Ángel Montiel *


El consejero de Medio Ambiente, Antonio Luengo, ha anunciado que asistirá hoy a la manifestación convocada por la Plataforma Pacto por el Mar Menor en defensa del futuro de la laguna. Y lo justifica en que él también se considera 'afectado' por esta crisis ecológica. Pocas palabras, múltiples contradicciones. 

Primera, esta no es una manifestación de 'afectados', como lo han sido las que tenían como pretexto las consecuencias de la DANA sobre los municipios ribereños. La de hoy es una manifestación cívica, del más amplio concurso de la ciudadanía, para invocar una mejor gestión política y administrativa de un bien natural único que ha venido siendo atacado durante décadas precisamente por la permisividad y el activismo cómplice del estamento político y administrativo. Un matiz importantísimo sobre el que no hay duda alguna ni siquiera en el entorno de las propias instancias gubernamentales. 

Segunda: como cabe suponer que la situación del Mar Menor no 'afecta' a Luengo solo en el plano personal, sino fundamentalmente en el político, que es lo que Luengo es, su presencia en la manifestación podría crear la impresión de que el Gobierno al que pertenece considera este problema como una cuestión no principal, ya que acude a ella un consejero, pero no lo hace el presidente. Ya puestos, que vaya el presidente. Si el Gobierno se apunta, que sea al máximo nivel, pues del máximo nivel es el drama del Mar Menor.

Tercera: ¿Habría ido Luengo a la manifestación de hoy si no se hubiera producido el episodio de la mortandad masiva de las especies marinas el pasado día 12? Hay que recordar que la Plataforma había convocado esta manifestación una semana antes de ese acontecimiento; de no haberse producido éste, habría sido ignorada por el Gobierno o, como otras veces, estigmatizada con los habituales descalificativos.

Es el problema de las plataformas cívicas como la de Pacto por el Mar Menor. Llevan años anunciando el problema en la más estricta soledad, y cuando éste se revela como real, hasta el Gobierno se coloca en la pancarta o sus aledaños para neutralizar la movilización, blanquear la tragedia y ofrecer una falsa sensación de inquietud y compromiso. 

En realidad, el término empleado por Luengo no es del todo inexacto: es cierto que el Gobierno está 'afectado' por esta crisis, pero no por las consecuencias medioambientales, sino por las electorales: 10 de Noviembre, o sea. La pregunta que cualquiera puede hacerse es: ¿tengo que desplazarme hoy hasta Cartagena para demandar una política activa y urgente en favor de la supervivencia del Mar Menor y de hacerlo junto al Gobierno del partido que se lo ha cargado a lo largo de los últimos veinticinco años? 

La manipulación es más grave, porque la convocatoria de hoy no es contra el Gobierno. No es 'contra' el Gobierno, pero tampoco lo es 'con' el Gobierno. Son espacios muy distinguibles que, por una vez, el Gobierno debiera respetar. La manifestación, tal y como está planteada, se produce para poner las pilas al Gobierno, para no dejarlo respirar, para que adopte soluciones reales y radicales que permitan salvar el Mar Menor atendiendo, no a vendas de emergencia, sino a iniciativas estructurales y tal vez en algún caso impopulares.

Veamos, para nos despistarnos mucho, qué responsabilidades tiene exactamente el consejero Luengo: Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente. En otras Comunidades, estos epígrafes podrían tener una interrelación coherente, pero visto lo visto en la Región de Murcia, es muy expresivo que el capítulo Medio Ambiente figure a la cola. 

En otros periodos nos escandalizamos de que hubiera un ministerio de Justicia e Interior, o aquí mismo una Consejería de Política Territorial y Medio Ambiente. Y decíamos: han puesto la zorra a convivir con las gallinas. Pues bien, en Murcia, Agua, Agricultura y Medio Ambiente es la Consejería de la zorra y las gallinas. 

Y a la vista queda el análisis general compartido, incluso por el propio Gobierno a efectos prácticos, de que la permisividad sobre los usos ilegales de la agricultura intensiva y las consecuentes extracciones ilegales de agua constituyen el 80% del acoso letal al Mar Menor. 

Luengo no está legitimado para asistir a esta manifestación hasta que no emita la conveniente autocrítica en nombre del Gobierno: la dirección general sobre el Mar Menor tras la 'sopa verde' fue un gesto para la galería, por lo demás inoperante; la retórica triunfalista que vino después intentó ocultar un problema de fondo del que eran conscientes; los reclamos urgentes a la unidad de las fuerzas políticas no se compadecen con la actitud de rechazar las iniciativas de la oposición (junto a Cs) en esta misma legislatura sin intentar siquiera proponer alternativas o enmiendas; la recurrencia al dinero público, sobre todo del Estado sin que compute como deuda obvia el lema 'quien contamina, paga', de modo que se le pegan al impositor obligaciones que corresponde reparar a quienes se han saltado la legalidad, cierto que con la complacencia de la Administración que, ahora, deprisa y corriendo, se acuerda de que esto hay que regularlo. Etcétera. 

El Gobierno no puede pretender que lo ha hecho todo bien a la vista de que todo está tan mal, según él mismo ha de admitir. Al menos sería exigible la responsabilidad política de la autocrítica. A lo que no puede aspirar es a que parezca normal que acuda a una manifestación cívica de protesta contra su inoperancia como si la cosa no fuera con él.


(*) Columnista