MURCIA.-Pintada referida a Valacárcel en la pared contigua a su nueva casa de la Gran Vía, en la parte de atrás, en la Calle Pascual, de Murcia. El jueves 30 estaba fresca aún y menos de 24 horas después la pared estaba remozada y limpia por parte de las brigadas municipales correspondientes para conurar así, también, la más espontánea de las libertades de expresión pública en democracia.
¿Hacen las misma actuaciones con tanta prisa para la limpieza de los grafittis y pintadas en el resto de la ciudad? Recuerda la situación de Argelia antes de la independencia de Francia, cuando actuaban las brigadas de limpieza para tapar los grafittis en contra del régimen opresor del general De Gaulle.
El sátrapa de San Esteban ya no tolera, al igual que en la Rumanía de Ceaucescu, la más mínima crítica verdadera. La pareja Valacárcel hace tiempo que recuerda demasiado a la pareja rumana, de tan triste final por otra parte a manos de sus propios correlegionarios.
El sátrapa de San Esteban ya no tolera, al igual que en la Rumanía de Ceaucescu, la más mínima crítica verdadera. La pareja Valacárcel hace tiempo que recuerda demasiado a la pareja rumana, de tan triste final por otra parte a manos de sus propios correlegionarios.
La pintada no descubre nada nuevo: triplex en la Gran Vía por un millón de euros y un vehículo Audi de lujo de 300.000 euros, suministrado por el privilegiado Grupo Huertas; pequeñas corruptelas que invitan, a juicio del graffitero de turno, a evitar que el susodicho esté 18 años en el cargo si se le vuelve a reelegir por otros cuatro en las mismas condiciones de impunidad actuales.
Pero es precisamente en las filas del PPRM donde el descontento de la militancia es más acusado, incluso, que en la sociedad murciana desinformada a propósito, y ya se denuncia en privado la dictadura corrupta interna impuesta por el trío Valacárcel-Sánchez Carrillo-Cámara con la absoluta complacencia de Mariano Rajoy, a quien Murcia y los murcianos parecen importarle nada más que como vivero de votos para que él se mantenga en Madrid como jefe de la Oposición aunque aquí la Región se caiga a pedazos enmedio de su saqueo a placer.
Pero es precisamente en las filas del PPRM donde el descontento de la militancia es más acusado, incluso, que en la sociedad murciana desinformada a propósito, y ya se denuncia en privado la dictadura corrupta interna impuesta por el trío Valacárcel-Sánchez Carrillo-Cámara con la absoluta complacencia de Mariano Rajoy, a quien Murcia y los murcianos parecen importarle nada más que como vivero de votos para que él se mantenga en Madrid como jefe de la Oposición aunque aquí la Región se caiga a pedazos enmedio de su saqueo a placer.