MADRID.- A día de hoy, el 85% de los internautas de 16 a 65
años utilizan las Redes Sociales y la frecuencia de uso de estos canales
crece año a año - según los datos del último informe IAB Spain -. Estas
cifras confirman el auge de las Redes Sociales en España y hacen de los
perfiles sociales una de las mayores fuentes de información, no solo
para los usuarios personales, sino también para las empresas.
De
hecho, según un estudio realizado por InfoJobs, el 50% de las empresas
españolas afirma consultar las redes sociales de los candidatos antes de
tomar la decisión de contratarlos. Este hábito es mayor en las empresas
de 10 a 49 empleados (53,5%), mientras que en las grandes empresas – de
50 empleados o más –es menos frecuente y solo un 42% de las empresas
declara revisar las RRSS de los candidatos a un puesto.
Entre
todas las redes sociales que existen, Facebook es la más consultada por
las empresas. Un 84% de las compañías que revisan los perfiles sociales
de los candidatos declaran utilizar esta red para obtener información
de los perfiles entrevistados.
En segunda posición se sitúa LinkedIn,
consultada por un 79% de las empresas que revisan las RRSS en los
procesos de selección. Esta red profesional es un buen escaparate para
analizar los méritos profesionales de los candidatos. Esto ha hecho que
su uso crezca respecto al año pasado, cuando solo era consultada por el
69% de las empresas, y que sea la red favorita para medianas y grandes
empresas.
En tercer lugar, y desbancando a
Twitter, se sitúa Instagram, utilizada por el 49% de las empresas que
revisan los perfiles y cuyo uso ha crecido en 16 puntos porcentuales en
tan solo un año. Esta red social no ha dejado de crecer en número de
usuarios, lo que hace que cada vez más empresas recurran a ella.
Twitter, por su parte, cae a la cuarta posición, siendo utilizada por el
36% de las empresas, cifra inferior al 41% del año pasado.
Tal
y como explica Judith Monmany, “con estos datos lo que vemos es que las
empresas recurren a redes sociales tanto de carácter profesional como a
las de uso más personal para completar información de los candidatos.
En cada una de ellas pueden encontrar datos de diferente índole que les
ayuden a formarse una idea más completa del profesional”.
Incoherencias
entre la información publicada y la dada en la entrevista, las fotos y
las faltas de ortografía, los principales motivos de descarte
Del
estudio también se desprende que, del total de empresas que consultan
las redes sociales de los cándidos, el 22% reconoce haber descartado a
un perfil que de primeras les había gustado tras ver la información
publicada en sus perfiles sociales.
Las mentiras o
incoherencias entre lo comentado en la entrevista y la información
encontrada en las redes sociales es el principal motivo de descarte de
candidatos. En concreto, el 55% de las empresas que han descartado a
algún candidato tras consultar sus RRSS lo han hecho por esta razón.
El
segundo motivo más mencionado (44,5% de las empresas) es el contenido
fotográfico recogido en las redes sociales. Las faltas de ortografía
graves en las publicaciones se convierten en la tercera causa más
mencionada (43%).
Fuera del top 3 encontramos
causas como la falta de respeto hacia otros usuarios (37%), la
publicación de opiniones radicales acerca de temas religiosos, racistas o
de orientación sexual entre otros (32%) o sobre cuestiones políticas
(26%) y exponer comentarios negativos sobre jefes, compañeros o empresas
en las que ha trabajado el candidato (25,5%).
Analizadas
las causas por tamaño de empresa, se aprecian ciertas diferencias,
especialmente cuando ponemos nuestra atención en las compañías de más de
50 empleados. Para estas, las dos primeras causas de descarte coinciden
con el global, pero se cuela en la tercera posición los comentarios
negativos sobre jefe, compañeros o empresas (31% lo mencionan frente al
25,5% global).
“En las grandes empresas, la
reputación corporativa y la marca adquieren una gran importancia, ya que
de ellas depende la captación y retención de talento. Por ese motivo
son menos aceptados los comentarios negativos en las redes sociales.
Asimismo, que un profesional tenga este tipo de actitudes en las redes
sociales dice mucho sobre su persona y es lógico que una empresa no
quiera contar con un perfil de este tipo entre sus colaboradores”,
explica Judith Monmany.
Otra diferencia clave
para este grupo de empresas es que la exposición de opiniones radicales
sobre temas como religión, racismo u orientación sexual y la redacción
con faltas de ortografía en las redes sociales solo son causa de
descarte para una de cada 10 empresas, mientras que en el global es
mencionado por 2 de cada 10.
Recomendaciones para un buen uso de las redes sociales
Algunos
consejos sobre el uso apropiado de redes sociales. En primer lugar,
debemos tener muy claro qué redes sociales queremos utilizar a nivel
profesional, cuáles a nivel personal o cuáles de manera mixta, ya que
esto marcará qué tipo de información, datos o fotos compartimos en cada
una de ellas.
Por ejemplo, en nuestras redes de uso profesional, podemos
compartir artículos relacionados con nuestro sector o con nuestras
áreas de interés a nivel laboral o bien entrar en conversaciones con
profesionales de nuestro ámbito.
En relación con
el aspecto anterior, hoy en día la gran mayoría de redes sociales dan
la posibilidad de gestionar el nivel de privacidad de nuestra cuenta.
Podemos aceptar o no a las personas que quieren acceder a nuestras
publicaciones y también podemos elegir qué información queremos que vea
cualquier usuario y cuál queremos compartir solo con determinadas
personas.
Otra de las recomendaciones es no
mentir. Mostrar en nuestras redes información falsa acerca de nuestros
estudios o de la experiencia profesional es algo totalmente
contraproducente, sobre todo por lo fácil que es hoy en día verificar
esta información.
También debemos cuidar nuestro
lenguaje, es importante lo que decimos y cómo lo decimos. Esto incluye
evitar las faltas de respeto y los insultos, pero también las faltas de
ortografía. Un texto con faltas puede indicar, entre otras cosas, que al
otro lado hay una persona poco cuidadosa y con falta de atención al
detalle.
Y lo mismo que hacemos con el lenguaje,
debemos aplicarlo a las fotos e imágenes que subimos a las redes
sociales. Evitemos aquellas fotos en las que se exponga una mala imagen
personal y, en las redes personales, cuidemos la foto de perfil.
Para
terminar, nunca está de más revisar nuestras redes sociales y borrar
todo aquel contenido que creemos que nos puede perjudicar o que
consideramos que no aporta una imagen fidedigna de quiénes somos.