MADRID.- El jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire (JEMA), general Javier
Salto, ha alertado de la falta de personal y ha estimado que “a corto
plazo” serían necesarios unos 5.000 militares más para atender las
actuales misiones y los retos de futuro inmediatos como el espacio y la
ciberdefensa.
El máximo responsable del Ejército del Aire, en un encuentro con
miembros de la Asociación de Periodistas de Información de Defensa, ha
detallado que se ha pasado de los 27.000 militares hace diez años a los
23.000 en la actualidad, una cifra que bajará con la nueva directiva de
plantillas a los 20.000 efectivos.
Falta
personal para atender las misiones en el exterior y para hacer frente a
las nuevas necesidades en el mundo aéreo como son los aviones no
tripulados, la ciberdefensa o el espacio, ha precisado el general.
En
este sentido ha concretado que el Ejército del Aire, con una plantilla
de unos 23.000 militares, representa el 17 por ciento del total de las
Fuerzas Armadas, frente al 25 por ciento en países de nuestro entorno.
Además ha desvelado que 54 de los aproximadamente 500 pilotos que tiene han pedido la excedencia en el último año.
Por otra parte ha considerado prioritario la compra de aviones
para formación de pilotos, que sustituyan a los actuales C-101, que
finalizarán su vida útil en 2020/2021.
Para ello se baraja la compra de T-6 estadounidense, PC-21 suizo y un
nuevo C-102, de Airbus, según el JEMA, quien ha dicho que apoya la
opción de la industria nacional, involucrada en el consorcio europeo de
Airbus.
Tras afirmar que se necesitan más de una veintena de
aviones de este tipo, ha avanzado que también se estudia la posibilidad
de alquilarlos por horas de vuelo.
Ha admitido que el nuevo avión de transporte A-400-M, que
sustituye a los Hércules, tiene “limitaciones” y que a los dos con los
que cuenta en la actualidad se sumarán otros dos antes de final de año.
También
ha considerado prioritario la compra de aviones de vigilancia y
patrulla marítima y de helicópteros, así como afrontar y tomar una
decisión sobre la sustitución de los 65 cazas F-18, que se jubilan entre
2025 y 2030.
El general Salto ha situado los aviones no
tripulados y el espacio como los nuevos retos para el Ejército del Aire y
ha avanzado que se ha creado un escuadrón de vigilancia espacial porque
el control del espacio es fundamental para la seguridad.
Sobre los últimos accidentes mortales en octubre protagonizados por
un Eurofighter en Albacete y un F-18 en Torrejón, ha dicho que aún no
están terminados los informes de Comisión para la Investigación Técnica
de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM) y los juzgados que llevan
los casos también están trabajando.
Ha indicado que el Ejército del Aire no influye en esos procedimientos y que se ha centrado en la seguridad en vuelo.
En
este sentido ha subrayado que se han puesto en marcha medidas, entre
ellas la revisión de procedimientos, se potenció la figura del jefe de
escuadrón y se atiende a las familias de los pilotos fallecidos.
Por
otra parte, ha lamentado los últimos casos de acoso sexual en los
ejércitos y ha dicho que las Fuerzas Armadas son “el reflejo de la
sociedad”. Ha concluido que la institución que dirige toma medidas,
siempre dentro de la legalidad, y atiende cada caso, con “todos los
medios” en sus manos para evitar que se repitan.
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