Diego Conesa: «El cierre del trasvase Tajo-Segura es una mentira institucional»

MURCIA.- El delegado del Gobierno en la Región, Diego Conesa, lanzó este jueves un mensaje de «tranquilidad y confianza» a los regantes, a quienes insistió en que no se va a cerrar el trasvase Tajo-Segura y mostró su «indignación» porque las declaraciones del presidente autonómico, Fernando López Miras, tras reunirse con Teresa Ribera «no se ajustan a lo que se trató» en el encuentro.

En declaraciones a los periodistas durante el acto de celebración del vigésimo quinto aniversario del Consejo Económico y Social de la Región de Murcia (CES), Conesa insistió en que el cierre del trasvase Tajo-Segura es «una mentira institucional que se desmontará en unos días, puesto que la Región volverá a recibir caudales, tal y como marca la ley».

En esta ocasión llegarán 7,5 hectómetros cúbicos para consumo y abastecimiento, no los 20 hectómetros máximos trasvasables, de acuerdo con una «decisión técnica», apuntó, que en cualquier caso garantiza y da seguridad de suministro.

Por eso, mostró su indignación, como ya lo hizo también la ministra de Transición Ecológica, por las declaraciones de López Miras tras la reunión de este miércoles porque, según Conesa, «no se ajustan a lo que se trató» en el encuentro, en el que se explicaron todas las decisiones técnicas que se han tomado. 

«No se pueden permitir manifestaciones que falsean los compromisos de estabilidad y garantía del trasvase, que es irrenunciable», subrayó.

«No obstante, junto con el trasvase, es necesario articular otras medidas como la desalación para dar una mayor estabilidad, ya que durante el pasado ejercicio la región estuvo once meses sin recibir agua del trasvase porque no había reservas», recordó.

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Miguel Sánchez, exigió a PP y PSOE que «rebajen el tono» y aparquen esta «vieja política» que utiliza el agua como arma arrojadiza cada vez que se aproximan las elecciones.

En las últimas tres décadas, laamentó, solo han generado «ruido» sin aportar ninguna solución, por lo que exigió abordar el problema desde una posición de estado y basada únicamente en criterios técnicos y no políticos, evitando los enfrentamientos.