viernes, 26 de enero de 2018

'Navantia' basa el aumento de pedidos de su plan estratégico en el exterior y en la Armada

MADRID.- La compañía de construcción naval Navantia, controlada por la Sociedad Estatal de Participaciones Estatales (Sepi), está perfilando su nuevo plan estratégico, en el que para mantener al máximo la capacidad productiva la batalla por engrosar su cartera de pedidos es la cuestión más relevante. Junto, asimismo, con el logro de un pacto con la plantilla, tema que gestiona a través de las negociaciones con los sindicatos respecto al programa de negocio para los próximos años, publica www.diarioabierto.es.

Si bien las conversaciones tienen aún un largo recorrido por delante, los sindicatos conocen ya algunos de los planteamientos de carácter interno, así como las previsiones sobre cómo el grupo va a desarrollar la política comercial en un complejo mercado. El plan, además de ese área, se focaliza en la actividad operativa (se busca avanzar hacia el modelo Astillero 4.0) y en el rejuvenecimiento de plantilla. 
Y, como meta básica y global, la compañía naval pública espera mantener carga de trabajo para todos los centros, lo que equivale a sus supervivencia.
En este área comercial hay dos mercados diferenciados, aunque en todo caso las previsiones apuntan a un mayor tirón de los buques militares. En España, la demanda que tiene más posibilidades de materializarse es el programa de fragatas F-110 para la Armada. 
El plan de I+D+i (investigación, desarrollo e innovación) de la futura fragata cuenta ya con presupuestos por 174 millones de euros que se destina al desarrollo del proyecto en su fase tecnológica. 
No obstante, hasta mediados de este año no se espera que se concreten los pedidos, para poder ser suministradas la primera fragata en 2023.
La construcción de las cinco que forman parte del plan dará empleo a 1.300 personas en Navantia y a 300 de Indra.
En el exterior los directivos de la empresa pública centran su atención en Canadá (también, fragatas), India (megabuques), Estados Unidos, Australia y Arabia. 
En Australia compite con el grupo italiano Fincanteri y el británico BAE. Se trata de un mega-programa, que tendrá un presupuesto por 22.500 millones de euros, pero en el que la parte más relevante es la provisión a los barcos de la Armada australiana de material militar con la más alta tecnología.

No hay comentarios: